Jigsaw life 〄

Capítulo 27 "Viejos amigos"

-¿Y después qué hicieron?- Preguntó Mariana

De nuevo era lunes, la primera hora de clases y le estaba contando todo lo de Monterrey.

-Tuvimos que regresar al hotel a empacar todo y para el check out- Conté.

-¿Qué check out?- Preguntó Emily entrando al salón.

-Le estoy contando lo de Monterrey a Mariana- Expliqué y ella rodó los ojos.

Ellas dos siguen sin hablar, y la verdad no culpo a Emily, yo tampoco estoy muy segura en cuanto a Mariana.

-¡Ah oye! ¿Eso significa que regresaste con Esteban?- Preguntó Em.

-Mmm se podría decir que sí- Sopesé- Oh y me regaló este anillo- Informé enseñándoles el anillo en mi dedo.

-Por favor dime que no es de compromiso ¡Estás muy joven!- Exclamó Em.

-Wow ¿Cómo puedes si quiera pensarlo?- Cuestioné haciendo una mueca- Es una promesa de que aunque estemos separados siempre estaremos para el otro.

-¿Y cómo sigues con eso?- Preguntó Mariana viéndose las uñas.

-Ya ni sé, o sea, estoy feliz por él, pero igual es triste ¿Saben? estoy segura que cuando se vaya ya no habrá un "nosotros", y también estoy segura de que igual él lo sabe- Expliqué.

Me puedo hacer la mártir, pero en realidad tengo todo calculado. No hay forma de que Esteban se vaya a Nueva York, yo lo necesito aquí. Si tengo que decirle que lo amo para que lo haga, lo haré las veces necesarias. Y quién sabe, tal vez sí lo quiero pero no he sabido definirlo...

-Puede que eso creas, pero sólo se va a ir un semestre- Dijo Em.

-Porque terminando ese semestre ya termina la prepa- Expliqué- Además, es claro que va a buscar universidades allá. Es muy talentoso, sería imposible que no entre.

-Bueno...¡Iré a sacar mis cuadernos!- Exclamó Emily cambiando de tema y se fue por su mochila.

-Pero bueno, hablando de Esteban y de que es muy bueno es todo- Dije dirigiéndome a Mariana- La próxima semana tiene una exposición de fotografía en su escuela, así que si quieres ir, estás más que invitada. Emily va a ir.

-¡¿Yo qué?!- Preguntó Em desde el otro lado del salón y caminó otra vez hacia nosotras- Escuché mi nombre.

-Le explicaba lo del sábado- Le contesté.

-Ah ya, bueno, tampoco es como que voy desinteresadamente- Confesó- Lo veo también como una oportunidad, pues si Esteban se va, van a tener una vacante, y bueno, ya saben que me gusta la fotografía- Explicó ella.

-¿Así que vas a robar el lugar de mi novio, eh?- Pregunté levantando una ceja en broma.

-Así es, pero qué pued..- Empezó a decir pero hizo una pausa- ¿"Novio"? ¡¿Lo admites?!- Preguntó y podría jurar que sus ojos brillaron.

-Pues, estamos juntos, no sabría decir si "novios", porque aún no aclaramos nada, pero no lo sé, él está para mí y yo para él.

. . .

-Es que ya no entendí ¿son novios o no?- Me preguntó Paolo dándole una mordida a su pizza y yo sólo me estresé. Era la tercera vez en el día que me lo preguntaban.

-Oh pues que no sé- Exclamé y agarré mi vaso para dar un trago.

-Es que tienes que admitir que está muy raro- Comentó mi amigo de la flor- Durmieron en la misma cama, te regalo un anillo- Añadió señalando el anillo en mi dedo anual izquierdo- Y se besaron, si eso no es regresar entonces no sé qué sea- Añadió y soltó un mini eructo.

-Para ser gay, eres muy puerco- Le dije- Menos mal que estamos en tu casa y no en la calle- Añadí.

-Soy gay, pero sigo siendo hombre- Explicó y yo asentí, tenía razón.

-¿Sabes? ya casi no me acordaba de tu casa- Comenté admirando su sala.- ¿Sigues viviendo con tu papá?- Pregunté al recordar que su mamá se había ido de la faz de la tierra cuando él tenía seis años, lo que siempre le admiré fue que no le era delicado tocar el tema.

-No- Respondió y me sorprendí- Él hace un año se fue a Canadá, me permitió quedarme con la condición de que todo el tiempo le estuviera diciendo qué hacía, que no hiciera fiestas a menos que le preguntara y que no trajera a mis novios aquí a coger por respeto a él.- Explicó

-¿Por qué no quisiste ir?- Pregunté.

-Lo ascendieron y ahora va a tener que viajar mucho, no me gustaría en poco tiempo tener que irme de ahí también-. Explicó- De hecho, está la posibilidad de que regrese a Boston, realmente hace poco fue, pero fue muy rápido, no más de dos días- Mencionó él- Sí recuerdas ¿No? Digo, creo que esa historia nos la contaron unas mil veces.-Yo reí asintiendo.

Nuestras mamás eran muy amigas desde la universidad, pero cuando terminó, la mamá de Paolo se fue a Boston por un trabajo, conoció al papá de Paolo y se casaron ahí mismo. Lo que cuentan es que fue el mejor viaje de sus vidas, pues tanto su mamá como su papá invitaron unos cuantos amigos, incluida mi mamá, por casi tres semanas de pura fiesta "Pre-boda" o sea, se la pasaron borrachos tres semanas. Luego de ésto regresaron a México, tuvieron a Paolo, mi mamá me tuvo a mí y nos empezaron a meter en las mismas escuelas, así nos hicimos muy amigos y... bueno, lo demás ya es historia.

-¿Cómo sigue tu papá? ¿Y cómo está con la posibilidad de ir a Boston?- Pregunté, pues cuando su mamá se fue, todos asumimos que regresaría a Boston, pues sería un buen escape.

-Ya estaba bien, empezó a salir con una mujer, pero terminó con ella cuando supo que viajaría mucho. Ya no quiere poner a ninguna mujer sobre su trabajo- Explicó- Y de lo de Boston... realmente estaba bien, pero se enteró por un amigo que aún tiene allá que ella está ahí, eso lo puso algo mal- Explicó él.

-Mierda...- Dije y Paolo sólo asintió. En eso, su celular empezó a sonar.

-¿Te molesta? Es mi papá- Preguntó señalando su celular y yo negué-¿Hola?- Contestó mi amigo- Ah sí.. No, sigo aquí...Con Yoi ¿La recuerdas?.... Sí...espera.- Dijo separando su celular de la oreja para después poner el altavoz.

-¿Hola?- Dijo una voz del otro lado de la línea.

-¡Hola!- Contesté- ¿Cómo está?- Le pregunté

-Muy bien, gracias. Qué milagro escuchar de ti ¿Cómo has estado? ¿Cómo están tus papás?- Me preguntó

-He estado igual bien, gracias por preguntar. Mi mamá está bien, está con mi hermano menor y mi papá no sabría decirle...mis papás se separaron hace ya un rato y no hemos sabido nada de él- Expliqué.

-Lamento oír eso. Y justamente estaba pensado en ustedes hace unas semanas ¿Crees que me puedas pasar el contacto de tu mamá, me gustaría hablar de algo con ella.- Comentó él. ¿"Hablar con ella de algo"? No creo que sea de la mamá de Paolo, pues él sabe perfectamente que rompieron comunicación cuando ella se fue, pero si no era de eso ¿Qué otra cosa podría ser?

-Claro, si gusta, se los paso a Paolo y ya él más fácil se los puede mandar ¿Le parece?-

-Si, perfecto, muchas gracias, Yoi.

-No es nada- Aseguré.

-Ah oye, tú le presentaste a Paolo un tal Emi ¿No? porque ahora no deja de hablar de él- Se burló.

-Bueno, bueno, creo que ya duró mucho esta platica- Dijo Paolo.

-Interesante, no los presenté directamente, pero si fui un conector indirecto- Contesté divertida y Paolo me hizo gestos de que ya colgara- Fue un placer volver a hablar con usted, que tenga buena semana- Dije para finalizar.

-Igualmente, Yoi. Cuida que Paolo no meta a cualquier chavo a su cama ¿Vale?- Pidió el señor y no pude evitar botarme de la risa.

-De acuerdo, bye- Se despidió Paolo y colgó

-Así que ¿Emi?- Pregunté pícara y Paolo se puso rojo.