Ilegal (is it love Daryl)

Epílogo

MIRANDA

— ¿En qué piensas?. — pregunto a Daryl que está de pie frente al espejo intentando acomodar su corbata.

— En lo rápido que pasa el tiempo y lo dichosos que somos. —

Me acerco y le ayudo a hacer la corbata.

— ¿Está melancólico hoy señor Ortega?. — digo en tono burlón, el solo me regala una sonrisa de boca cerrada.

>> Dime qué es lo que te preocupa. —

Sus bellos ojos avellana se clavan en los míos logrando con ese solo gesto enviar una corriente de descarga eléctrica, ese efecto tiene en mi.

— ¿Soy tan fácil de leer?. —

— Para mi si. — sonríe.

— ¿Nunca te has puesto a pensar que sería de nosotros si no los hubiéramos conocido? ¿Que habría pasado si tú no hubieras ido a esa fiesta?. —

— Nunca lo he pensado. — digo sinceramente.

— Yo si. — dice sentándose en el borde de la cama.

— ¿Te arrepientes de lo que hemos vivido?. —

Levanta la vista y me tiende una mano, la tomó gustosa mientras él me jala hacia su cuerpo haciendo que me siente sobre sus piernas.

— Nunca me arrepentiría de lo que hemos vivido juntos solo es que en ocasiones recuerdo a Marco y pienso que ese pude haber sido yo de haber seguido en esa vida. —

Pasó mis manos por su cuello el me mira a los ojos.

— Creo que esto es lo que ambos mereciamos, ya la vida nos había tratado mal como par permitir que tuviéramos más de eso. —

— Tienes razón, discúlpame por atormentarte con mis locuras, solo que a veces pienso en que no merezco esto que tengo. —

— ¿Porque dices eso?. — pregunto por hacerlo hablar y sacar esas dudas que lo carcomen, pero de sobra se la respuesta.

— Fui una mala persona, acabe con la vida de muchos. — dice con tristeza.

— Pero ve en lo que te convertiste, eres un hombre exitoso, con una bella familia, dos hermosos hijos, con amigos que darían la vida por ti, esto es lo que eres tú, el Daryl del que yo me enamoré, ese que ví detrás de ese antifaz aquella noche. —

— Tu lograste ver más allá de ese antifaz, porque en el momento en que mis ojos vieron esos bellos ojos verdes supe que había caído ante ti. —

Me acerco y lo beso lentamente, disfrutando del suave roce de sus labios, de esa lengua juguetona que me enloquece.

Escuchamos que alguien se aclara la garganta, nos separamos y ambos volteamos hacia el marco de la puerta donde nuestra hija nos observa sonriendo.

— ¿Cómo me veo?. — nos pregunta mientras gira para que veamos su hermoso vestido blanco.

— Pareces un ángel. — le indica Daryl viéndola con devoción.

Hoy nuestra pequeña Daryela se casa. Camina hasta Daryl y lo abraza mientras sus ojos se llenan de lágrimas.

— Gracias por ser el mejor papá del mundo. —

— Fue fácil teniendo unos hijos tan maravillosos como ustedes. — dice sonriendo.

Daryela se separa, mi esposo limpia las lágrimas que han escapado por sus mejillas.

— Nada de llorar, que hoy es un día para celebrar que mi princesa se casa. —

Ella asiente y camina hasta la puerta.

— Te espero abajo papá. — Daryl asiente y ella sale de la habitación.

— Espero de corazón que sea feliz, tanto o más que nosotros, así como Declan es feliz con su mujer. —

— Lo será, ella a elegido bien, tienes una chica muy lista por hija. — él sonríe.

— Así es. — da un largo suspiro. — Tenías razón, lo hicimos bien y la vida nos premio con nuestra hermosa familia. —

Toma mi mano, salimos de la habitación y bajamos las escaleras que dan a la sala, ahí observamos a Matt, Evan y Colín con sus familias.

— Quien iba a decir que alguien que solo pensaba en diversión sin control pudiera llegar a tener esto y todo te lo debo a ti. — yo niego y veo como frunce el ceño confundido.

— Este es nuestro logró, porque lo hemos hecho juntos. —

Abre su saco y veo como del bolsillo interior saca una rosa azúl que me tiende.

— Sabes que hay una historia, sobre las rosas azules. — me pregunta como la primera vez que nos vimos, sonrío al recordar.

— Alguien me dijo que son un detalle de amor eterno. — el asiente.

>> Si y lo más interesante es que si se la regalas a la persona amada ella estará a tu lado para siempre. —

Se acerca colocando su frente con la mía para que sus labios queden a solo unos centímetros de los míos.

— Me lo prometes, prometes que estarás a mi lado para siempre. — dice viéndome con esa misma intensidad y dulzura con que lo hizo la primera vez que nos vimos.

— Lo prometo. —

Sus labios hacen contacto con los míos solo unos segundos para bajar hasta donde está nuestra familia. Somos afortunados, después de tanto luchar por huir de las mentiras que nos rodeaban hemos podido ser felices. No conseguí al príncipe azul como el que aparecía en mis libros de romance, conseguí algo mejor, un hombre que a pesar de sus errores me hizo ver que los finales felices si existen.

¡Si! y Ilegal llego a su fin, muchas gracias por el apoyo y paciencia que me han tenido cuando tardo en actualizar 🙈🙈 pero como les he dicho mi día necesita más de 24 horas para poder hacer todo los pendientes que tengo.

Bien les comento que no habrá segunda temporada de esta historia, pero no será la única que escriba sobre Daryl, así que sigan al pendiente y mil gracias por hacer de mis locuras una hermosa historia.