LA ELEGIDA © #Wattys2019

Fuego entre dos cuerpos.

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Sin decir nada, avanzo mi pecho contra el suyo, lo que le hace caer de espaldas, después deslizo una mano sobre su nuca.

Con mis dedos dibujo lentamente el contorno de sus labios.

Abre ligeramente los labios, moviendo la cabeza hacia atrás, mientras sus manos se deslizan por mi espalda y mis caderas.

No puedo resistir sus labios y mi boca toma posesión de ellos.

Devuelve mi beso con tanta pasión que sus manos se deslizan por todo mi cuerpo. Quiero fundirme con el.

De repente, me sujeta con fuerza y me hace girar de lado para colocarse encima de mi. Acaricia suavemente mi pelo, hundiendo sus ojos en los míos.

Puedo ver como sus pupilas brillan.

Veo como se le eriza la piel al contacto de mis caricias.

Cuando sus labios besan los míos, me arqueo para acercarme más a él.

Eliott acaricia cada parte de mi cuerpo.

—Tienes la piel perfecta.— Decía Eliott.

Me sienta sobre el y desliza mi ropa rápidamente sobre mi cabeza.

—Te quiero.—

Eliott sonríe y da pequeños besos sobre mi cuello.

—Haría cualquier cosa por ti Amy.— Decía Eliott con sinceridad.

Sus labios suben desde mi nuca a mis labios.

Muevo la cabeza hacia atrás para ofrecerme a él.
Sus brazos rodean mi cuerpo. Al abrazarme, me siento completa. Cerramos los ojos mientras su boca explora mis curvas con lentitud.

Hacerlo con él siempre será una satisfacción.
Al cabo de unos segundos caemos rendidos en la cama.

Nos despertamos a la mañana siguiente.

Eliott trae una bandeja con el desayuno.

—¿Has dormido bien?.— Decía Eliott sonriendo.

Lo miré tímidamente.

—Si, muy bien.— Dije mientras comía un trozo de tostada.

Eliott se acercó a mi y beso mi frente.

—Hoy tengo una reunión muy importante, estaré fuera unas horas.— Decía Eliott.

—Está bien.—

—Cuando vuelva hablaré con Hannah.— Decía Eliott poniéndose su traje.

Asentí con la cabeza.

—Nos vemos luego.— Decía Eliott dando un beso en mis manos.

—Hasta luego y suerte.—

Eliott salió por la puerta sonriéndome.

Mi sonrisa se desvaneció al ver aún como algunas heridas seguían en mi cuerpo.

No he sido capaz de contarle a Eliott todo lo que ocurrió.

No quiero que haga ninguna locura.

No quiero tener que ir a la Cárcel a visitarlo.

Al cabo de unos minutos me levanto y voy a mi habitación.

Me doy una ducha rápida y me visto.

Me dirijo al espejo para peinarme y veo a una sombra moverse.