❝ nosey ❞ 2eunbi g!p

◟⁴⁷◝

—¿En serio no piensas hacer terapia con tus padres? —insistió Eun Bi, interrumpiendo el silencio y la concentración de Jung sobre el libro que debía haber empezado a estudiar días antes.

—No, Eun Bi, y es la última vez que respondo a eso —amenazó la mayor, poniendo sus ojos en su novia, quien le dedicaba aquella triste mirada, con el único motivo de convencerla—. Mi relación con ellos...

—"No tiene arreglo" —completó Eun Bi, junto con un pesado suspiro—. Eun Ha, tal vez sí lo tenga.

La mirada de Hwang se dirigió directamente hacia las largas medias que tenían el objetivo de cubrir gran parte de su tobillo.

Sin embargo, una de éstas estaba algo baja, dejando al descubierto una pequeña herida.

Dejándose guiar por su desconfianza, Eun Bi se inclinó hacia delante, para bajar su media, encontrándose con varios cortes recientes.

Eun Ha inmediatamente volvió a cubrirlos, sin devolverle la mirada a la menor, quien permanecía en silencio, simplemente observándola fijamente.

—Me dijiste que no volverías a hacer eso —dijo, finalmente, en un tono calmado, pero molesto.

—¡No lo entiendes, Eun Bi! —exclamo, repentinamente, poniéndose de pie—. ¡En toda mi vida jamás de he sentido apreciada por alguien! ¡Cuando era niña todos los días escuchaba a mis padres pelear por mí! Me decían que si no hubiera nacido todo sería más fácil, y, ¿sabes qué? Estoy de acuerdo con ellos.

Jung caminó rápidamente fuera de la habitación de Eun Bi, sin darle tiempo a ésta de pedirle que espere, decidiendo finalmente dejarla en paz.

Eun Ha se encaminó fuera de la casa y, posteriormente, hacia la suya, siendo dificultada por las lágrimas que imposibilitaban su completa visión del camino.

Ingresó en su casa, encontrándose con la típica escena de sus padres en un conflicto completamente inmaduro.

—¿Cuál es tu problema? —interrogó su padre frente al estruendo ocasionado por la fuerza con la que había cerrado la puerta.

—¡Ustedes! —respondió la menor, dejando al descubierto, de manera accidental, pero sin molestarse por cubrirlos, los cortes en sus piernas— ¡Toda mi vida me han hecho sentir una completa basura, no puedes reclamarme absolutamente nada!

Dejando a sus padres sin respuesta, se encaminó rápidamente hacia su habitación.