Una Simple Pregunta

Epilogo

Narra Shirou Fubuki 14 años.

¿Cuando fue que lo conocí? Ah, es verdad fue cuando aún usaba la bufanda de Atsuya y cuando estábamos peleando contra el instituto Alien. Era un chico muy grosero y rudo. Recuerdo que tenía una marca en la cabeza, y su cabello no tenía esa marca blanca que luce ahora.

Nos habían reclutado para el FFI en Raimon, había llegado temprano y él también. Tal vez él esperaba no encontrarse con Kidou de inmediato pues eran algo así como rivales a muerte. De hecho nadie lo recibió apropiadamente, todos lo recibieron con miedo y recelo. Sé que sonará como una mala excusa pero él se buscó este trato por parte de los demás. Aún así, parece que... A mi me parece un poco triste. Durante las primeras semanas, antes del partido de inicio lo observé detenidamente. Había algo en el que parecía decir, "aquí estoy. Mírame. No quiero estar solo" aunque tal vez solo era mi imaginación jugando conmigo.

El día antes del partido fui a verlo. Sonreí al verlo jugar. Decidí hacer lo mismo y lanzarme a jugar con él también.

«¿Quieres ser mi amigo?» le quise preguntar. Era una pregunta simple que no salió de mis labios pero si de mi corazón, de mi manera de jugar con el. Y él respondió «Si» le mentí cuando me pregunto al final pues sabía que él no lo admitiría. Que se cerraría cuando apenas logre hacer que se abriera a mi.

Aún cuando solo fue un poco, durante ese campamento pasaron muchas cosas entre nosotros. Una vez el entrenador nos puso a jugar en lodo bajo la lluvia. Como fuimos los últimos en hacer los ejercicios nos tocó recoger el material junto a las managers. Cuando terminamos y fuimos a ducharnos él se acercó a mi y seco mi cabello, aunque siempre alegando que lo hacía porque yo era titular del equipo y no quería que me enfermara y la dinámica del equipo se estropeara.

También en aquel fatídico partido contra Corea. Él se enojo mucho y le grito que era un torpe descuidado y que Tsunami era un enorme troll por caerme encima de esa manera. Era su manera de preocuparse por mi. Pues aún cuando fue su gran debut en el Inazuma Japón y todos fueron a celebrar la victoria al Rairaiken él me acompañó al hospital para revisar. Días antes de que se fueran me prometió no perder hasta que pudiera alcanzarlo. Quería jugar conmigo en el campo.

Poco a poco nos fuimos uniendo más y más hasta que mi joven corazón quedó cautivado por el. Me gustaba hacerlo sonreír, me gustaba su manera de jugar y planear estrategias. Sabía que se preocupaba por los demás a su manera. A él no parecía importarle que estuviera cerca de él. Recuerdo que cuando me llamo amigo, me sentí muy feliz aunque un poco triste porque... Parecía que sólo sería su amigo... Aún así, decidí seguir a su lado pues eso hacen los amigos.
Además ¿quien sabe? Tal vez en el futuro las cosas cambien y pueda amarme como yo lo amo a él.

Fin