La Pequeña Mikaelson (Terminada)

Capítulo 4

*Narra Damon*

Estaba en el living de mi casa oyendo música y tomando un vaso de wisky. Mi humor era bastante bueno, cosa que me extrañaba ya que no solía sentirme asi hace años.
Por momentos recordaba a la pequeña Charlotte, ni siquiera sabía cuantos años tenía pero por su contextura física y sus facciones se me hacía que era bastante joven.
El día que la vi en el Grill debo reconocer que sus facciones de muñeca me habían llamdo mucho la atención.
A decir verdad me agradaba bastante, sin embargo creo que esconde algunos secretos que claramente planeo averiguar.
_Hermano, estas de buen humor por lo que se ve, ¿qué maldad hiciste ahora?_ Stefan apareció en el lugar.
_Pues para tu información mi buen humor no se debe a ninguna travesura mi querido Stefan, y esa es toda la información que daré_ me volteé a llenar mi vaso de nuevo.
Stefan río irónico y se fue.
No tenía planeado contarle nada.
Tenía la esperanza de que mi muñeca apareciera el sabado en la fiesta del lago, asi tal vez podía empezar a sacarle algo mas de información sobre su vida.
En eso Caroline y Bonnie entraron por la puerta.
_Vaya parece que el mas amargado de los Salvatore esta de buen humor hoy_ Caroline río y apagó la música.
_Honestamente rubia, estaba de buen humor hasta que quitaste la música_ sonreí.
_Vamos Damon no seas aguafiestas, ¿iras el sabado al lago?_ preguntó Bonnie.
_Claro, debo hacerles de chaperón y asegurarme de que no se metan en problemas_ las observé.
_O tal vez estes esperando a que tu nueva amiguita aparezca_ Elena apareció desde la cocina con una sonrisa triunfadora.
Las dos chicas a mi lado me observaron sorprendidas.
_Matt me conto que te vio salir del Grill con una chica el otro día_ se cruzo de brazos.
_Pues Matt es un entrometido, le dire a Rebecca que lo entretanga mas asi tiene algo mejor que hacer que meterse en mis asuntos_ dejé el vaso en una mesa y salí de alli.
Me daba rabia que todo el mundo estuviera pendiente de mi, es por eso que Charlotte me caía bien, ella no indagó sobre mi vida y asi me gustaba.

*Narra Charlotte*

_Vamos tio Elijah, ¡¿vas a decirme que ya estas cansado?!_ sonreí.
Mi tío había rodado por el suelo luego de la patada que le había dado en el pecho.
Mi padre nos observaba y me sonreía.
_Cariño tu tio ya esta viejo, no debes ser tan dura con él_ rió observándolo.
Amaba entrenar con él. Mi tio me había enseñado todo lo que sabía y mas.
Estabamos en el patio trasero de la casa, siempre lo usabamos para entrenar. Había practicado casi desde los seis años cuando descubri mis poderes.
Tenía demasiada energía y mi humor había mejorado mucho desde esa salida. La llegada del sabado también me emocionaba y lo mejor era que la fiesta sería durante el día asi que ya tenía todo planeado.
_¡Papá te toca!_ lo miré.
_Oh no, aun no estas lista para mi_ me observó.
_Vamos, siempre dices eso, ¿acaso tienes miedo de que tu hija te gane?_
El comentario hizo reir a mis tios.
_Muy bien, pero luego no digas que no te adverti_
Se quito la chaqueta y se preparó. Esto me divertía bastante, además, mi padre era un oponente digno para mi.
Comenzamos, el atacó primero, logre esquivar su golpe y lo patee por la espalda haciendolo tropezar. Se volteó sorprendido.
Esta vez fui yo la que atacó. Lance un golpe pero detuvo mi brazo, intente con el otro pero también lo frenó. Me tenía atrapada. Al ver su cara de satisfacción hice de cuenta que iba a sentarme en el piso y lo patee por las piernas haciendolo caer.
Como no me soltó cai encima suyo. Ambos comenzamos a reir.
Intenté levantarme para continuar pero algo me detuvo..
_¡Ey no! ¡Nonono, eso es trampa!_ comencé a reir.
_Las cosquillas no son trampa, aquí todo vale_
No podía safarme de sus manos, se detuvo solo cuando estuve recostada en el piso pidiendole porfavor que se detuviera.
_¡Papaa, eres un tramposo!_ me ayudo a levantarme.
Le di un abrazo.
Muchos podían hablar mal de él, tal vez su pasado no es el mejor. A veces se olvidaba de mi por su trabajo pero era mi padre y siempre me dio todo. Lo amaba mas que a nada en el mundo y lo defendería de cualquiera aunque eso me ponga en riesgo.