Capítulo 12

1.3K 72 2
                                    

*Narra Klaus*

El día había comenzado. Charlotte no había bajado de su cuarto y Elijah no me dirigía la palabra.
Rebecca y Kol no me lo decían pero podia notar que estaban enojados conmigo.
En el fondo sabía que esto era culpa mia. No debí tenerla encerrada ni ocultarle la verdad.
Aunque ahora tenía que encontrar a Katherine, no podía estar suelta, era peligroso y no iba a dejar que lastime a mi pequeña.
Decidí encerrarme en mi oficina ya que nadie en mi casa quería estar cerca mio.
Estuve una hora entera tratando de concentrarme pero no lo lograba.
No podía dejar de pensar en los ojos de Charlotte observandome luego de que la abofetee, esos hermosos ojos verdes que siempre me miraron con amor, ahora me observaban con enojo, tristeza y frustración... y por mas que odiara admitirlo, también con un poco de miedo.

Estaba sentado en mi escritorio cuando veo que la puerta de la oficina se abre, por ella se asomaba Caroline.
_¿Cariño? ¿Como te sientes?_ se acercó a mi y se sentó sobre mi regazo.
Rodee su cintura con mis brazos apoye la espalda en mi silla para mirarla.
_Se siente extraño, todos estan enojados conmigo, y Charlotte nisiquiera bajo a desayunar_ la observé.
_Me llamo anoche, me conto lo que sucedió. ¿No crees que deberías ir a hablar con ella?_ acariciaba mi rostro.
_No tengo nada que hablar con ella. Esto no habría pasado si no se hubiera escapado_ repliqué.
_Nik_ me observó como regañandome _se que esta mal lo que hizo, pero en el fondo tu sabías que esto pasaría. No se toda la historia pero tienes que poder hablar con ella. Tiene que tenerte confianza, asi lograrás que te cuente todo lo que siente_ me dio un beso suave.
Suspire, tenía razón, debía hablar con mi hija, tenía que contarle la verdad.
_Esta bien, ire a hacer las pases con ella_ la besé.
Salimos de ahi, ella fue a saludar a mis hermanos y yo subí al cuarto de mi niña.
Golpee la puerta:
_Charlotte, abre por favor_ intente no sonar amenazante.
Ella abrió la puerta y volvió a sentarse en su cama. Estaba abrazada a sus rodillas mirando por la ventana.
Me sente junto a ella.
_¿Cariño, podemos hablar?_ la miré.
_No tengo nada mas que decirte_ soltó.
_Escucha, ¿lo siento si? Se que estuve mal, se que debí escucharte y se que no debí ocultarte la verdad. Creí que estaba protegiendote_ me encogí de hombros.
_¿Quién es ella y por qué quiere hacerme daño?_ me observó triste.
_Katherine Pierce es una vampiro que conocí hace muchísimos años. Ella me quería solo por el dinero así que intento matarme. No pudo hacerlo y huyo. La perseguí durante años, incluso llegue a asesinar a toda su familia. Jamás la encontré. Después de muchos años conocí a tu madre y te tuvimos. Allí fue cuando ella apareció. Asesino a tu mamá. Pero no pudo tocarte porque logre huir. Desde entonces la he buscado para terminar lo que empece. Por eso no te dejaba salir de aquí, no dejare que ella me quite al amor de mi vida_ la observe.
Ella comenzo a llorar, odiaba verla llorar, no lo soportaba.
Estire mis brazos y ella se acurrucó conmigo como cuando era una bebé.
Al cabo de unos minutos se calmó un poco.
_Lamento haber escapado y mentirte. No debí hacerlo_ se pegó mas a mi.
_Esta bien, yo tampoco debí mentirte ni golpearte. Lo lamento princesa_
Nos abrazamos muy fuerte.
Bajamos juntos.
_Vaya, parece que la charla funcionó Caroline sonreía.
Charlotte fue a abrazarla.
_Gracias por aparecer en la vida de papá. Lo haces féliz, y me hace féliz que este asi de bien_ ambas se sonreían.
_Y... no pueden estar enfadados con papá si yo no lo estoy. Ya se todo lo que debo y ya hicimos las pases_ Charlotte señaló a sus tios.
Todos reímos y decidimos almorzar juntos. Un poco de paz y tranquilidad no estaba mal.

Luego de almorzar todos estabamos en el living.
Me alegraba ver que mi hija y mi novia se llevaban asi de bien.
_Bien... tengo algo que decir_ mi niña se paró frente a nosotros.
_Ahora que se quien es Katherine y lo que hizo, quiero que me ayuden a cazarla. Todos. Como familia. También tus amigos Caroline, claro si ellos quieren_ me observó.
_Oh no, eso si que no_ exclamé.
_Papá, lo haremos juntos, estarás ahí para protegerme. Pero no me quedaré de brazos cruzados sabiendo que una maldita quiere hacerme cenizas_

Suspire muy profundo. Era tan terca como yo. No podía culparla. Esto sería una guerra y solo el mejor ganaría.

La Pequeña Mikaelson (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora