30

682 25 2
                                    

Sandra

Después de un gran desayuno, los padres de Nagore habían hecho de todo para desayunar, tostadas, fruta, bollería, cereales, parecía un hotel, decían que era la comida más importante del día. 

Con el estómago bastante lleno, acompañamos al padre de Nagore en su paseo diario en bicicleta, donde nos enseño paisajes increíbles. Era sin duda el mejor sitio para desconectar de todo el estrés del hospital y de la gran ciudad. 

Después disfrutamos de un merecido descanso y de una ducha fría para recuperar los músculos después del esfuerzo. Nagore me llevo a conocer a sus amigas de la infancia, algunas todavía a día de hoy eran sus mejores amigas.

María: Dichosos los ojos. ¿Qué haces tú por estas tierras?

Nagore: Siempre es bueno volver al sitio donde naciste. He venido a pasar unos días aquí con mis padres y te quiero presentar a una persona. 

María: A ver, a ver... ¡Estás guapísima amiga!

Nagore: Eso es el amor amiga, ella es Sandra, mi novia. Sandra, está de aquí es María, mi amiga más loca. 

María: No le hagas caso, que no estoy tan loca. Está más loca ella. ¡Encantada! 

Sandra: ¡Igualmente! Eso creo que es verdad, cariño tu no es que estés muy cuerda no. 

Las tres estallamos en una gran carcajada. 

Nagore

A María siempre la había considerado mucho más que una amiga, era casi como mi hermana, siempre me daba los mejores consejos y siempre sabía como me estaba solamente con mirarme a los ojos. 

Aproveché que Sandra había salido había salido a responder una llamada de su madre para hablar con María. 

Nagore: ¿Qué te parece mi chica María? Ya sabes que tu opinión es muy importante.

María: ¿Qué quieres que te diga? Solamente hace falta mirarte a los ojos, el brillo que tienes jamás te lo había visto. 

Nagore: Es que es increíble, no había sentido nada así antes, me complementa, me entiende y me cuida mucho. ¡Tengo una gran suerte con ella! 

Cuando Sandra volvió nos pusimos a hablar de otro tema totalmente diferente, luego cuando estuviéramos a solas se lo explicaría. Tener a María y a Sandra juntas era lo mejor, en un rato vendría mi hermana para llevarnos a su casa, que nos había invitado a cenar. 

La verdad es que estos días con mi gente me estaban viniendo muy bien para recargar las pilas y sobretodo para que mis niveles de estrés descendieran considerablemente. También estaba muy feliz por enseñarle a Sandra mis sitios favoritos. 

Sandra

Me encantaba ver a Nagore así de feliz, rodeada de los suyos y escuchando a todas horas su risa. Acabamos de llegar después de la cena con su hermana y la verdad es que estábamos un poco cansadas. 

Nos desmaquillamos y nos pusimos en el pijama. 

Nagore: ¿Te ha gustado el día de hoy?

Sandra: Sí, me ha encantado. Tu amiga María está más loca que tú, pero me ha encantado conocerla. 

Nagore: A ella le ha encantado conocerte también, le has caído muy bien y me ha dicho que el brillo de enamorada que tengo no lo he tenido nunca.

Sandra: ¡Eso es verdad! Aunque yo lo siento tampoco lo había sentido por nadie y eso es gracias a ti. He descubierto cosas del amor y cada día descubro cosas nuevas a tu lado.


----

¿Os ha gustado este capítulo?

Esta semana no sé cuando podré subir capítulo...

Twitter: EresRefugio

Hospital Marie Curie #SangoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora