Mi corazón a ritmo de una honda.

Capítulo 21

PIIIP, PIIIP, PIIIP

El despertador, ¿sabeis lo que odio este sonido? Pues mucho, pero hoy ni me da pereza levantarme, ya que ME VOY AL CIRCUITO DE MONTMELÓ con Marc, pero bueno, no saquemos las cosas de contexto, con Marc ni estaré, porque él estará trabajando, y yo dentro de unas horas, se podría decir que también. Mierda, tanto pensar ya se me ha ido un cuarto de hora, así que me meto a la ducha, no tardo mucho, unos 20 minutos como mucho. Al salir enroyo mi pelo en una toalla mientras seco mi cuerpo y me echo crema, esas cremitas con olores, ya sabéis, las adoro. Cuando acabo de todo esto me voy al vestidor para ver que puedo ponerme, no tardo mucho en decirme, unos tejanos y una camiseta básica blanca, de zapatos llevo mis vans de flores. Me recojo el pelo en una coleta bien alta, me pongo el antiojeras, un poquito de rimmel y mi barra de labios rosa, perfecta. Estoy cojiendo mi bolso cuando me llega un whatsapp.

Tardona, date prisa que llevo un cuarto de hora esperándote. Me van a echar de honda por tu culpa, va, no tardes, te quiero, Marc.

Este niño es idiota.

¿Y porqué el señor campeón del mundo no me ha llamado para decirme que estaba aquí, eh? Ya bajo.

Cojo el móvil, las llaves y la maleta y empiezo a correr escaleras abajo, tengo que decir que casi me lesiono en una minu caída, pero nadie se ha dado cuenta. Cuándo acabo de bajar las malditas escaleras me encuentro a Marc con gafas de sol, una americana, una camisa abierta blanca y unos tejanos. Joder, sabe cómo me gustan los chicos. Me acerco a él, pero está de espaldas y no me ve.

- Hola campeón del mundo.

- Me pensaba que me querías por mi y no por mis títulos - Dice hhaciendo pucheros.

- Anda cállate.

Y le beso, un beso que transmite todo lo que las palabras no han podido decir durante este mes y medio, un beso dulce pero apasionado.

- Joder Marina, no sabes lo que te echado de menos.

- Y yo Marc, mucho.

Me besa, pero no sin sonreír antes.

- Siento interrumpir el beso, ¿pero no teníamos prisa?

- Mierda, es verdad- Dice mirando su reloj de lotus- Vamos, entra o tendré que pisarle.

Entro en el coche, salimos de la ciudad y nos dirigimos al circuito, por suerte no hay mucho coche, así que en unos 20 minutos estamos allí.

- woow.

- Impresionante, ¿verdad?, yo también reaccioné como tú cuando lo pisé por primera vez.

- Entonces tú eras un niño.

- Sí.

Me giro para poder mirarle a los ojos.

- Marc, te quiero, pero no sé si me merezco estar aquí, yo quiero estar aquí por mí, no por ser la novia de Márquez.

- Eh, enana, mirame, tú estás aquí por lo que eres, ¿vale? Tu vas a ser una buenisima periodista, y, está claro que vales para la moto.

- ¿como lo sabes?

- Tus padres me han enseñado vídeos.

- Que sepas, que te voy a matar, Marc.

Nos abrazamos y entramos al circuito.