Capitulo Uno

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Un dia como cualquier otro, desperte por la mañana y al darme cuenta de que de nuevo me habia quedado dormida, fui directo al baño me duche de manera rapida y corri al espejo. Sin maquillaje me dije a mi misma, mirando las ojeras que tenia.

Lo pense y dude, puedo llegar tarde a trabajar, no es que me vayan a correr de ese estupido Cafe; no...me dije a mi misma.

Tres veces en una semana era demasiado y no queria tolerar otro sermon de mi jefe.

Asi que solo me ate el cabello en una alta cola y en la parte superior le di un poco de volumen.

Corri al placard revolvi y revolvi entre mis ropas, me decidi por un jean azul oscuro y una camisa blanca la cual al ponerme odie al instante "cada dia mas gorda" dijo la voz de mi conciencia.

No era facil trabajar en el cafe, las sobras de pasteles y tartas se repartian entre los empleados y todas las comidas las hacia alli, tenia que parar me decia a mi misma siempre, pero no tenia la suficiente fuerza o ganas. Simplemente tenia la relacion amor/odio con la comida sabia que estaba comiendo demasiado.

Cambie la camisa blanca por la negra, que me hacia lucir mas delgada. Si, claro.

Ya lista sali de mi casa, mirando el desorden a mi alrededor y jurando que cuando llegara luego, limpiaria.

Baje corriendo por la escalera los dos pisos que me distanciaban de la Avenida de Mayo, al salir salude al portero Claudio quien al verme me sonrio de oreja a oreja.

Claudio era de esos viejitos confiables e inofensivos, de esos que quisieras fuera tu abuelo si estuvieran con vida.

Reprimi esa tristeza de inmediato y le dedique una sonrisa.

-Cero a cero Clau, la proxima sera.

-Estaba arreglado, siempre esta arreglado (grito el hombre, mientras me observaba como salia por la gran puerta de vidrio de la entrada y lo saludaba agitando la mano).

-Hasta la tarde-rei para mis adentros.

Fui tan rapido como pude, pero de igual manera llegue pasado dos minutos del horario de entrada, el cafe ya estaba en marcha, varias mesas ocupadas con los "madrugadores", entre saludando a Maria la esposa del dueño, era una mujer tan regordeta como amable no habia dia en que no me preguntara como estaba, si tenia algun problema con mi vida con el pago del salario,etc; Mentia a menudo claro que no estaba de acuerdo con mi paga, pero eso seria un tema de discusion y hasta despido si mi jefe, su marido Antonio supiera, ya habia visto a varios pasar por esa situacion, entraban trabajan uno, dos meses y cuando ya decidian que era muy poca paga iban a hablar con Maria, la dulce Maria... ella hablaba con Antonio y... adios empleado nuevo.

Si, estaba mal deberia conseguir algo mejor y lo sabia pero estaba demasiado comoda en mi puesto laboral y de hecho no era tan malo, me decia a diario para no angustiarme.

Llegado el mediodia Maria me informo del break, feliz por esto fui detras del mostrador me quite mi "unichaleco" como solia decirle, a la pechera blanca con el logo de "Cafe Mayo" escrito en fluor al frente de esta y con detalles en rosa, lo detestaba de solo verlo. No saldria a la calle asi por el amor de dios!.

Me rehice la cola del pelo mas alta mirandome frente a la vidriera y vi que una mujer algo obesa entraba casi cojeando hasta una mesa cercana, me la quede mirando, algo en ella me llamo la atencion de pronto la mujer sonrio y saco un cigarro lo encendio y la observe por el vidrio, al instante y maldiciendo por dentro voltee y dirigi la mirada hacia donde esta se encontraba.

-disculpe, aqui no se permite fumar.- mire asombrada, ya no era mas una vieja obesa la que estaba sentada alli, sino una hermosa rubia de metro ochenta a juzgar por sus piernas.Me observo irritada y dijo

-ups, disculpa linda lo apagare ok? Que me ves asi? Acaso nunca viste una mujer como yo?-tiro su cabello hacia atrás-

Apurate traeme un cafe.

-Bufe, y me mordi mi labio inferior no se que habia visto, o si me volvi loca o el vidrio me dio una imagen diferente de la real? Tal vez tenia aumento, como una lupa pense.

Me di vuelta y chequee la vidriera de nuevo alli se reflejaba la chica hermosa,tonta y creida con la cual me habia topado....

-Mariaaa..-llame hacia el fondo- hay una cliente, salgo de break.

Tome mi cartera y sali detras del mostrador la mujer me siguio con la mirada

-Sabes -dijo de manera altanera y un tanto sarcastica- me resultas familiar... Ex modelo?

-No -dije sonriendo falsamente y abriendo la puerta de salida -Enseguida la atienden.

MirameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora