Capitulo Catorce

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Abri los ojos y note por la luz del sol que serian como las dos de la tarde.

Me tomé la cabeza aun sintiendo dolor pero ya no era tan profundo.

Recordé a Camila y Santiago y sonrei.

Dios gracias por estos amigos! Que haria sin ellos?

Mire hacia Santiago que tenia la boca abierta y un poco de baba caia por su rostro, su mano estaba por encima mio y tomaba la mano de Camila.

Daban tanta ternura juntos.

Ella dormia sonriendo era algo que siempre le deciamos, y no nos creia.

Era como si soñase cosas hermosas porque sino no se entendia.

No podia moverme ya que no queria despertarlos.

Me empecé a deslizar hacia la punta de la cama por debajo de sus manos entrelazadas.

Suspire mirandolos ya de pie frente a la cama.

Yo queria un amor asi, para siempre y pese a todo.

Dios, Klaus...que me has hecho?.

Camine hacia la cocina con tristeza, aun sentia sus ojos en mi con furia y odio.

Me dieron ganas de llorar de nuevo pero reprimi mis lagrimas.

Un sonido me hizo parar de golpe.

Era mi celular pero se escuchaba terrible, como cuando a un juguete se le acaba la bateria...donde lo habia dejado?

Recordé que mi celular sono cuando estaba en la ducha y luego Klaus entro hecho una fiera a exigir respuestas.

Empecé a buscar por los lugares de siempre.

Mi bolso, la mesita de luz, la mesada de la cocina, hasta mire por entre el medio de Camila y Santiago y nada.

Fui al balcon y nada tampoco.

Entre de nuevo cerrando los ventanales de vidrio y ahi con el reflejo del sol lo vi.

Estaba en el suelo debajo del sofa.

Me tire a cuatro patas a sacarlo de alli.

Casi grité de dolor.

Le faltaba la carcasa, y la bateria junto con la memoria habia volado.

La pantalla estaba quebrada.

Tome la bateria y la memoria y las coloque rapido.

Apreté el boton de encendido.

Nada.

Otra vez...nada.

Hijo de puta-susurre.

Ese era el golpe que habia escuchado.

El habia tirado mi celular.

Aprete mis puños fuerte con odio y me levante pateando una silla que tenia cerca, esta se cayo al suelo y una asustada Camila se desperto sentandose de golpe en la cama.

-Lore?

-shhh,si sigue durmiendo.

Enojada fui hacia la mesada de la cocina y me sente, Magnus salto a mi lado desde el suelo y me quedé impresionada con su estado fisico.

Enchufe el cargador del celular y lo puse a cargar.

Prendio.

Suspire aliviada.

Mientras esperaba el reinicio me baje de la mesada y tome una banana de la heladera.

Con total lentitud empecé a comer, ultimamente no tenia hambre, solo nervios y ganas de fumar.

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