A/N: Ninguno de los personajes me pertenece. Queda prohibida la distribución y adaptación de esta historia sin mí previa autorización.
~x~
Si años atrás alguien le hubiera dicho como viviría ese día, el dolor en sus mejillas, garganta y estomago seria insoportable. Si no estuviera luchando por sobrevivir, todo le parecería surrealista; una absurda pesadilla.
Alzando su varita hacia la criatura Pansy lanzo una maldición mortal, el enorme cuerpo cayo inerte junto a otros. Las voces a su alrededor lograron distraerla, lo suficiente para no notar que Hermione y sus amigos se habían marchado de ahí. La joven diviso a varios Gryffindors peleando y otros tantos muertos entre los escombros, una escena que incluso hasta en un corazón de piedra habría causado un estrago profundo.
La voz de Voldemort resonó en su mente haciéndola estremecer, fue como si todo alrededor se detuviera por instante. Como si esa voz fuera un botón en pausa para todos sus despreciables seguidores y personas inocentes.
— "...Encuéntrame en el bosque prohibido y hazle frente a tu destino..."
La piel de Pansy se estremeció al mismo tiempo que sus ojos recorrieron el lugar con desesperación. Debía buscar y evitar a toda costa que Hermione cometiera una locura, aunque conociendo a la muggle sería más sencillo encarar al mismo Voldemort antes que hacerla cambiar de opinión. Lo sabía, y eso era lo único que odiaba de ella. Su lealtad e ideales locos que la impulsaban a hacer lo que fuera por sus amigos. Los ojos verdes se llenaron de lágrimas con impotencia, un agarre firme la tomó por sorpresa y la arrastro hacia la oscuridad de un pasillo cercano.
—Tenemos que largarnos de aquí.
Draco temblaba de manera incontrolable contra la pared, su rostro pálido y demacrado observaba paranoicamente a su alrededor. No había logrado realizar su plan, y por fortuna eso significaba que Hermione y sus amigos aún tenían tiempo para encontrar una solución.
—Con gusto te daría tu merecido por meternos en esta mierda, pero tu propia mente se encargara de hacerte pedazos. —Exclamo Parkinson encajando su varita en la garganta de él con fuerza.
—Yo no lo hice.... No pude hacerlo. —Repetía entre sollozos.
Sus manos apretaron el cuello de su camisa y lo estampo contra la pared, él gimió adolorido pero no hizo nada por apartarla.
—Tenemos que ir al bosque, evitaremos que Potter y los idiotas de sus amigos se reúnan con ese bastardo.
—¿Qué acaso no lo entiendes? Voldemort no se detendrá hasta capturarlo.
—Mira, me importa poco lo que ese idiota quiera, por él y su obsesión con Potter es que a todos nosotros nos está llevando el demonio.
—¡Entonces entrégaselo! Voldemort al único que quiere es a Potter. Una vida a cambio de todas las otras.
Esas palabras se repitieron en la mente de Pansy una y otra vez, Hermione no merecía un final tan miserable, no si había alguna forma en ella pudiera evitarlo.
Oculta entre los arboles Pansy contemplaba el camino, sus sentidos estaban agudizados al máximo y el sonido de pasos acercándose la alerto. La figura de Harry comenzó acercarse y no pudo evitar suspirar con alivio al notar su soledad.
El crujir de las ramas alerto su presencia y Harry no dudo en alzar su varita hacia su dirección.
—No soy yo tu enemiga, solo estoy ocultándome.
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Round & Round
RomanceHermione descubrió demasiado pronto que quizás se había equivocado y esa chica no iba a ser una amiga. No en ese momento, ni en otro cercano porque Pansy... Pansy Parkinson, era una de las estudiantes provenientes de las familias más poderosas y rec...