HYBRID PARADISE [One-Shots] [Personaje x Lectora] [CERRADO]

Yuri Katsuki x Lectora [YOI]

[Medieval AU]

Sus pies se hundieron en la nieve fresca, mientras avanzaba en dirección a la aldea donde se crió. Incluso desde esa distancia podía oír la música alegre de las flautas y el sonido de los tambores; mañana seria el gran día, donde los cazadores demostrarían sus habilidades en la Gran Caza del Minotauro. Una festividad que se festejaba desde años atrás, y finalmente, después de haber esperado por tanto tiempo, tendría su oportunidad.

—¿No estas emocionado, Yuri? —miro hacia atrás, el mandoble que descansaba en su espalda bloqueando un poco el rostro de su querido híbrido.

El lobo caminaba con paso resignado, con la nariz roja por el frío y la cola arrastrándose por la nieve. Yuri era su compañero desde que se inició en su viaje por toda la región en busca de mejorar sus habilidades de cazadora y, además, dedicarse a la búsqueda de un dragón de hielo. Dragón que hace tiempo, condeno a muchas razas a desplazarse a sitios lejos de sus hogares. Con el tiempo, se crearon grupos de guerreros que hacían lo posible en derrotarlo y finalizar con el invierno eterno que reinaba.

De allí, con ayuda de la alquimia y la magia, nacieron los primeros híbridos. Compañeros que ayudaban a los aventureros en sus travesías.

Yuri la conoció cuando eran niños, sumado que, al ser un híbrido de tipo depredador, era el indicado para una cazadora. Era perfecto para ayudarla en cacerías debido a sus habilidades de rastreo e instinto salvaje. Sin embargo, Yuri no era nada parecido a un lobo, siendo posiblemente de los más debiluchos y escuincles de su camada.

Por lo tanto, (T/n) aprendió a utilizar el mandoble junto con el arco, de esa forma podía cubrir a Yuri que se especializaba en atraer a las presas.

—Un poco... —murmuro, frotando sus mejillas en la piel de oso que rodea sus hombros y cuello.

(T/n) esbozo una ligera sonrisa.

—Hemos practicado bastante, y ya tenemos experiencia necesaria. Viajar a las Colinas punta escarcha fue una buena idea —el camino de piedra comenzó a verse, guiándolos a la entrada de la aldea Vikinga. Las antorchas flameantes y el aroma a cerveza se notaban cada vez más—. ¡Vamos! ¡Padre y Madre deben estar esperándonos!

El híbrido la vio correr por la nieve como si no fuera la gran cosa, de vez en cuando el peso del enorme mandoble haciéndola tambalear. Yuri irguió la cola castaña y trato de seguirle el paso, la ansiedad instalándose de a poco en la boca de su estómago.

Podía ver el humo de la hoguera alzarse entre las casas y escuchar los gritos familiares.

(T/n) era el ejemplo perfecto de lo que una Cazadora debería ser.

Y Yuri lo único que deseaba era convertirse en el compañero que ella merece.

La Cazadora se desplazó por la aldea saludando a cualquiera que se cruzara, cada tanto contando de manera breve lo mucho que mejoraron en ese tiempo que estuvieron de viaje. Yuri solo se mantenía al margen, con cabeza gacha y correspondiendo los saludos o palmadas en el hombro con una sonrisa tímida. Había caras nuevas, híbridos de todo tipo y muchos Cazadores que venían a lo mismo. Se sentía pequeño entre tantos guerreros, y tuvo que recordarse a sí mismo reiteradas veces que es un depredador, no debía demostrar miedo.

Cualquier híbrido querría tener como compañera a (T/n), así que, por hoy, debía fingir que tenía todo bajo control para que nadie quisiera pasarse de listo y robar su lugar (cosa que podían hacer si lo retaban a un duelo).