HYBRID PARADISE [One-Shots] [Personaje x Lectora] [CERRADO]

Delincuente!Kuroo Tetsurou x Lector [Haikyuu!!]

Su larga cola negra se enroscó varias veces en el aire, observando desde el tejado a la cantidad de personas que se juntaron para cruzar la calle. No es algo de lo que este orgullo sinceramente, pero no puede vivir únicamente del aire. Necesita comida, ropa para las diferentes estaciones y demás.

Y ya que él es un híbrido demasiado apuesto, no puede permitirse verse en mal estado. Hay una reputación que mantener.

En el momento en que el semáforo cambio a rojo y una avalancha de gente comenzó a caminar hacia el otro lado con pasos apurados, vio su oportunidad. Con la misma sigilesa de su gen, Kuroo se introdujo entre las personas, murmurando falsas disculpas cuando "accidentalmente" chocaba con ellos.

Una vez llegó al otro lado de la calle, una sonrisa de lado se esbozó en sus labios y veloz, se escondió en el callejón más cercano con los bolsillos llenos de mercancía y billeteras nuevas.

Kuroo Tetsurou es un híbrido de gato, específicamente de uno negro. La gente se negaba a adoptarlo más que nada por esta absurda creencia de que los gatos negros traen mala suerte. Estuvo mucho tiempo escuchando esto, e incluso ahora con veintitrés años lo sigue haciendo.

—Ah~ ustedes se deben hacer cargo del monstruo que han creado —murmuro a nadie en específico, revisando cada una de las billeteras. De las cuales recolectó tarjetas de crédito, billetes, un par de monedas y fotografías o papeles viejos.

Sostuvo entre sus dedos una fotografía de unas jovencitas. Amigas de preparatoria por lo que supone al ver los uniformes. Una de ellas llamo su atención, tanto así que sus largos bigotes de gato se movieron al  instante que sonrió.

Kuroo es reconocido en esta zona tanto por los policías como con las señoritas. A pesar de ser un híbrido, tiene la misma popularidad que un idiota de esas películas de Hollywood. Será un delincuente, ladrón, embustero y demás cosas.

Pero lo guapo no se lo pueden negar.

Vivir solo de lo que pueda llegar a robar no es algo muy sabio, considerando que no siempre iba a tener buena suerte con sus presas. Por eso, buscaba otro método.

Las chicas son muy fáciles de enamorar si tienes las armas necesarias y al alcance para hacerlo.

Y oh, el es la persona indicada para ello.

—(T/N), ¿eh? —lamió sus labios con lentitud, acuclillado en el callejón, con los cadáveres de billeteras vacías a sus pies—. Veo que así se llama la afortunada de esta vez.

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Su madre tenía la tendencia de decir que las cosas sucedían por una razón, era algo así como su frase favorita. Pero solo aplicaba a la hora de perder objetos innecesarios, o cuando inevitablemente su novio pasaba a convertirse en ex.

Solo que esta vez, acababa de perder cosas demasiado importantes.

Su carnet por ejemplo, el de la universidad, dinero para su almuerzo, y una fotografía de cuando iba a la preparatoria. Si su madre no la mataba, ella se encargaría de auto matarse.

—De solo pensar en la cantidad de cosas que deberé hacer para que me den un carnet nuevo..—un suspiro resignado se logro oír a medida que caminaba apurada por la calle. Apoyo una mano sobre su frente, sintiendo el dolor de cabeza que se estaba formando.

Con mucha suerte, tal vez alguien encuentre su billetera y decida contactarla.

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