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Lentamente abrí los ojos.

¿Como había llegado a mi cama?

Me incorporé separando mi cara de las arrugadas sabanas de mi colchón. De seguro que se me habrían quedado las marcas de estas. Aún sentada miré por la ventana de mi cuarto. Era de noche, el cielo de Seoul se presentaba totalmente despejado y con alguna que otra estrella brillando en aquella gran pantalla plana azulada. 

Cuando me quise dar cuenta vi una figura que estaba sentado al borde de mi cama, justo al lado contrario de la ventana en mis pies. Al principio sentí una pequeña punzada de terror al ver a aquel hombre inclinado y apoyado sobre sus rodillas, pero en seguida se me pasó cuando me percate de quien era la figura.

Yoongi estaba tan absorto en sus pensamientos que seguramente ni se dio cuenta de que estaba despierta. Cuando me moví mas para quedar completamente sentada sobre la superficie fué cuando se el se reincorporó. Levanto la cabeza para mirarme. Observé detenidamente esos ojos. En sus orbes podía ver reflejada la luz del exterior. 

—Yoongi...— dije con voz somnolienta.— ¿Que haces aquí...?

—Estaba esperando a que te despertases.

¿Esperándome? ¿Que hora era?

—¿Que hora es?

Me respondí a mi misma cuando miré el reloj electrónico que descansaba sobre mi mesilla de noche. Eran las 04:30 de la mañana. 

—Es super tarde.— dije haciendo claro lo evidente.

—Lo se.— simplemente comentó, como si no fuera nada del otro mundo pasarse la noche despierto esperando a que alguien se despertase, privándose así de su sueño.

—¿Como...?— empecé la pregunta aún que tarde mi tiempo en formularla ya que debía primero aclarar mis ideas—¿Como he llegado aquí?

—Te desmayaste. Nam y yo te trajimos aquí.— explicó tranquilamente.—¿Te acuerdas de que pasó?

Mi cerebro comenzó a funcionar del todo haciendo así que los recueros me golpearan de nuevo. Lo primero fué la llamada de Hoby, luego vino el botellon, la escena que tuve con Jungkook, el enegrecido rostro de Kim Tae Hyung y por ultimo pero no mas importante el beso de Jimin.

Mi consciencia comenzó a atormentarme al momento de acordarme de eso. ¿Por que actué de esa manera tan estupida? Me castigué una y otra vez por dejar que Jimin se fuera solo a pesar de que sabía que estaba borracho y malherido.

—Si.— dije.— ¿Donde está Jimin?

—Aún no lo sabemos.— me contestó el con una voz neutra dándome a entender que ya no estaba enfadado con el.

—¿Y... y Jungkook?— cuestiné antes de darme cuenta de lo que estaba diciendo.

Vino a mi mente el momento en el que comprobé como Jeon se había marchado después de que Jimin me besara y sobre todo lo extraña que me sentí después de aquello. ¿Por que le daba tanta importancia inconscientemente al hecho de que se marchara?

—Tampoco lo hemos visto.— me respondió y note en su tono un deje de decepción.— Pero nos ha enviado un mensaje hace una hora diciéndonos que no le llamáramos mas, que había encontrado un lugar para dormir esa noche. Hoseok y Nam ya están en sus pisos.

Me hacía gracia la manera en la que trataba de disfrazar el "se ha ido a follar" con esas palabras. Me acurruqué en una bola cuando escuché sus palabras. 

—¿Y tu que haces aquí?— pregunté después de unos minutos de silencio.

Tardó mucho en responder.

¿Quienes sois?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora