¿Quienes sois?

Lo he visto.

Se quedaron todos mudos, quitos, mirándome como si fuera un animal que podría atacarles en cualquier momento. También me observado por un par de miradas curiosas que habían captado el barullo que estaba ocurriendo.

Intentaba fijarme en alguien, concentrar mi atención en una sola persona pero todo me daba vueltas. No era capaz de sostenerle la mirada de ninguno de mis amigos.

—¿Que? — salió automáticamente de ni garganta un tono de reproche— ¿Por que me mirais así? Lo que he dicho es verdad. — me puse a la defensiva—¿Es q nadie va a hacer nada?

Y como pocas veces ha pasado el mayor de todos fue el que tomó la iniciativa. Jin dio un paso al frente, con un gesto muy poco propio de el: rostro serio, mirada centrada, movimientos lentos. Fue ahí cuando me pregunten a mi mismo si acaso estaba haciendo algo mal.

—Jungkook— puso un su grande Palma sobre mi hombro— deberías irte.

Su voz no me reprochaba nada, tampoco era una amenaza. Aun q sus palabras no transmitían esa idea parecía que me estaba dando el pésame, como si realmente lo sintiera por mi.

Me deshice de su agarre, no de forma brusca, pero tampoco amigable.

—Vale. Ya entiendo— intente encontrar en alguna parte de mi algo que echarles en cara pero mis palabras sonaban cansadas. Aun así lo intente— y yo que creía q erais mis amigos. Pero ya entiendo.

Intentaba hacerles daño, que se sientan culpables por mirarme de aquella manera. Estaba enfadado pero también triste por saber que no podía contenerme. Era un remolino de sentimientos que llevaba acumulando. No podía controlar lo que ocurría a mi alrededor y, sobre todo, a mi mismo. Eso solo hacía que mi rabia aumentase. 

<<Vale, no podía controlarme, pero yo lo sabía y ellos también. ¿Así que por que no me ayudaban?>>

—Después de todo sigo estando solo.

Sin atrever a echarla un ultimo vistazo cogí mis cosas y me fuí.

(***)

Jungkook se dió la vuelta y se fue. Sus movimienos eran torpes por el acohol y no se me escapó la forma en la que volvió de su pequeña escapada. Había llorado, yo y seguramente todos lo podíamos decir por sus ojos y nariz enrojecida.

No era bueno interactuando con las personas, más bien no me paraba a prestarlas atención, pero no era tan tonto como para no darme cuenta de que Jungkook estaba pasando por lago. Nosotros no tardamos en irnos. María y Min Ju se fueron por otro lado. La segunda llevaba toda la noche fulminándome por la mirada, seguramente aún enfadada por lo que la hice en el pasado. Cada vez me quedaba más claro que, en efecto, de alguna manera la vida es como un boomerang. Lo que tiras acaba volviendo.

—Tae— me dijo Hoseok— ¿Que crees que le habrá picado a Kooky?— me dijo mientras que andábamos hacia nuestro edificio.

—No se— me sinceré— pero joder, ha sido intenso.

—Creo que Yoongi-hyung está rayado por lo que le ha dicho kooky.

—¿Tu crees?

—Si. Lleva desde que se ha ido callado, en plan el tipo de silencio que hacía cuando nos conocimos, no el silencio de aburrimiento de siempre.

—Hombre, le veo sentido. Los dos viven juntos, así que supongo que será un golpe fuerte para él. Ya sabes... en plan chico duro por fuera y balndo por dentro ¿No crees? El solo nos tiene a nosotros y aún que no llevemos casi nada juntos supongo que para él somos lo más cercano que tiene a una familia.

—No me digas eso que lloro— dijo Hoseok removiendose el pelo agobiado-La que está muy tranquila es Lidia.

Miré a la chica. Estaba a unos metros de nosotros hablando con Nam y Jin, seguramente de la situación. Cuando Kook se marchó fué ella quien le quitó hierro a la situación. No parecía tán afectada, no tanto como creí.