"¿DEBERÍAMOS?"

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Me encuentro en la terraza mirando los fuegos artificiales abrazando la cintura que nunca he olvidado. Aspiro su aroma y me enfoco en su risa al hacerle yo cosquillas. 

La veo girarse y mirarme. Le saco la máscara y luego me saco la mía. Ambos nos recorremos con la mirada el rostro, grabando a fuego las miradas y la curvatura de nuestros labios.

Voy a acercarme para besarla, pero ella se aparta y niega con la cabeza. Voy a hablar cuando escucho la puerta abrirse.

- Mami!

Karina se separa de mi y va hacia el interior de la habitación. La sigo al interior y siento como se me acelera el corazón al ver a Karina con el niño. Cuando este me ve hace la misma expresión que su madre cuando algo no le cuadra.

- Mama, quién es el?

Ella me mira a los ojos y luego sonríe al niño.

- El es un amigo de mama TJ, ahora vuelve abajo y ve con Cris y Alek, dentro de nada la fiesta termina.

El niño abraza a su madre y le da un beso en la mejilla para luego salir de la habitación.

- El es mio... verdad?

Karina asiente y me mira decidida.

- Si Stephen, es tuyo, pero no por eso permitiré que te lo lleves o que pase por una situación de preguntas y cosas que no entiende.

- Pero es mío, soy el padre.

- Ya te he dicho que...

No la dejo terminar porque la abrazo con fuerza contra mi.

- Gracias... aunque no le hayas dicho que soy el padre... gracias.

Cuando me aparto veo su cara de enfado. Ella me mira furiosa y se va a la terraza. La sigo sin entender su reacción.

- Que te pasa?

Cuando se gira no puedo evitar recordar los primeros momentos en los que la conocí. Se ve igual de impotente.

- Me pasa que tu deberías odiarme, deberías estar gritándome y echándome en cara el porqué te he ocultado por cinco años que eres el padre de Tyler...

- Karina...

- No Stephen, Karina nada... te abandoné, te rompí y te oculté que estaba embarazada. Te hice a un lado por completo por un capricho mío... y ni siquiera estas enfadado?

Me acerco a ella y coloco mis brazos en la barandilla, acorralandola entre mi cuerpo y la terraza.

- Si, tienes toda la razón, me destrozaste, me hiciste sentir una mierda y tardé mucho en poder volver a la normalidad... pero en ningún momento te he odiado o te he olvidado Karina

- Si lo has hecho... ahora tienes novia...

- Karina, ella no es mi novia, es solo... un royo, con el que ahora mismo acabaré.

Veo como abre los ojos como platos y niega con la cabeza.

- No Stephen, tu debes seguir con tu vida, y yo, no estoy dentro de esa vida, al igual que tu no estás dentro de la mía.

Me aparta de un empujón y entra en la habitación. La sigo y la cojo del brazo para que me mire.

- Me negarás que vea a mi hijo?

Ella tensa la mandíbula. 

- Dime una sola razón por la cual no deberíamos intentarlo preciosa... dime una sola razón por la cual no debería volver a meterme en tu vida y formar una familia con TJ.

Ella me mira con los ojos aguados, se está aguantando las ganas de llorar.

- Porque yo ya no siento nada por ti.

Después de decirme eso, sale del cuarto dejándome confuso, dolido y vacío.

No huyo *2*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora