Belladonna

Lunes 31 de Diciembre 2018.

Las familias se reúnen para recibir el año nuevo con alegría, buena comida, música y licor. Millie había estado actuando raro desde hace meses, se había obsesionado con un nuevo hombre del que nadie sabía nada, había decidido tener un bajo perfil, no hablaba de él como con los otros, eso generaba sospechas y sobretodo mucha curiosidad. Cuando salían en grupo se preocupaba más de lo normal por el móvil, texteaba cada vez que sonaba, a veces se le iluminaba el rostro de felicidad otras tantas la ira la poseía. Esa noche habían decidido pasar la media noche entre amigos, buenos amigos.

Victoria tenía un presentimiento sobre Millie, algo no estaba bien con ella, ¿pero cuando lo había estado se preguntaba para sí misma? quizá nunca, eso no importaba, era su amiga, su hermana, quería ayudarla, en más de una ocasión intento acercase para que Millie se pudiera abrir y si existía algún problema ayudarla. Pero no lo permitía, de aquella buena amiga solo quedaba el recuerdo, era triste pero debía aceptarlo.

Esa noche se limitó a observarla sin que se diera cuenta, la seguía sin seguirla, se veía molesta, inestable, no paraba de observar tu teléfono buscando alguna respuesta, "seguramente es por ese sujeto" pensó, la tiene completamente trastornada, no se hallaba al estar rodeada de tantas personas, trataba de sonreír pero le costaba, salió de la casa tratando de no llamar la atención, Victoria subió al segundo piso y se ubicó en el balcón para no perderle de vista, había mucho ruido dentro de la casa pero a fuera las cosas no eran muy diferentes, Millie estaba al teléfono con alguien, le estaba reclamando a alguien:

- Estoy cansada de tus mentiras.

- ...

- Es lo que dices siempre, pero no lo cumples y yo acá como una idiota, tratando de actuar como si no pasara nada.

- ...

- No, escúchame tu a mí, si hoy no solucionamos esto, si no le pones punto final, lo haré yo por ti.

- ...

- No me importa, voy hacer por ti lo que tú no tienes el coraje de hacer."

Colgó y entro ofuscada a la casa...

Antes de que Victoria pudiera dar la vuelta para cambiar de lugar sonó su teléfono móvil, era Alik, estaba a unos 20 minutos, había un poco de tráfico y no podía llegar a tiempo, solo había que tener un poco de paciencia, era un día donde todos estaban tratando de llegar a casa. Victoria colgó y trato de aparentar que salía del baño por si alguien se estaba preguntando donde estaba.

Sam amigo de toda la vida de Vic y Mill había llegado días atrás, estaba emocionado por estar allí después de tantos años, era ese amigo soltero, atractivo que quería vivir toda su vida sin compromisos, sin nadie que lo atara a un solo lugar, siempre tenía una sonrisa para los demás, nunca se le había visto enojado o molesto por algo o alguien. En ese momento era el alma de la fiesta, todo era felicidad, pero hasta él en su mundo de fiesta notó que algo sucedía con Millie, se acercó a Vic para preguntarle si sabía que le sucedía, pero Vic lo negó, estaban en la misma situación. Sam no se quiso quedar con la duda y busco la oportunidad de preguntárselo directamente como siempre ha sido, tomó del brazo a Millie y la llevó a un lado de celebración para poder hablar tranquilamente, ella se resistió por un momento, no quería darle explicaciones a nadie, pero Sam no lo permitió, la confronto de tal manera que Millie irrumpió en un llanto desconsolado, trataba de hablar pero era imposible comprender, no podía gesticular palabra alguna, Sam fue por un vaso de agua para tratar de calmarla y así poder entenderla. Su llanto era desesperado, estaba pidiendo auxilio desde lo profundo de su ser.

- ¿Qué te sucede mujer, por qué estas así? Le preguntó...

- La he cagado, la he cagado como nunca en la vida.

- ¿De qué hablas, estas embarazada?

- No, no es eso, o no creo, espero que no, pero es algo mucho peor...

- Pero habla, dime qué te sucede, quizá pueda ayudarte.

- Nadie me puede ayudar... ¡Nadie! Y cuando todo el mundo se entere me van a odiar.

- Pues ahora sí que no te entiendo. ¿Qué hiciste?

- Estoy saliendo con alguien y...

- Todos aquí sabemos que estas así por un hombre, así que tranquila.

- Ya... Pero, lo que no saben... Es que ese hombre ya está comprometido.

- ... Nunca has sido la mejor encontrando pareja, así que tampoco es para hacer un escándalo de todo esto...

- No creas. (Se dio media vuelta como tratando de ocultar su rostro) El problema es que ese hombre está comprometido con una mujer que también está aquí esta noche...

- Woooww, eso si no lo esperaba. (Rió sin temor de ser descubierto por alguien más) eres una perra sin escrúpulos. (Dijo.) ¿Y quién es la pobre desafortunada?

- No lo puedo decir...

- Déjate de tonterías, te recuerdo que hace unos minutos estabas desconsolada llorando y mírate ahora, necesitas desahogarte porque te estas atragantando con esa información. Dime de quién se trata.

- ... ¿Promete que no harás de esto un escándalo?

- Más del que tú ya hiciste, ¡no!

- Es Alik...

- ... ¿Alik...? ¿Qué Alik...? ¿El de Vic?

- Ajamm... ¡El mismo!

- Pero tú estás loca, estás mal de la cabeza, ¿te faltan vitaminas o qué?

- Te dije que no hicieras un escándalo.

- Como no voy hacer un escándalo si la estas cagando pero hasta el fondo.

- Te lo dije, pero tú insististe en saber y bueno, ahora debes guardar este secreto conmigo.

- ¿Guardar un secreto yo? Yo no soy ropero, no guardo nada, esto está mal, muy mal, debes hablar con Vic, contarle lo que sucede, se van a casar en unos meses ¡y esto hay que detenerlo!

- Yo le he dicho cientos de veces a Alik que debería terminar con ella pero...

- No seas zorra, debe terminar con las dos.

- Si se metió conmigo es porque las cosas no van bien con ella.

- O porque es un infiel por naturaleza, o porque es un imbécil, o por lo que sea, pero debes darte cuenta.

- Hace unos minutos tuvimos una discusión.

- Es verdad, él viene en camino...

- Por eso mismo, me siento mal estando acá y no los quiero ver juntos, por eso le advertí que si no terminaba con todo esto, lo tendré que hacer yo.

- Madre mía, este fin de año va con todo. ¿Estás dispuesta hacerlo?

- La verdad, sí.

- ¿Te enamoraste de ese cabrón como de los otros 18 con los que saliste?

- Alik es diferente.

- Pfff... Suéltate un poco ese moño que tienes en la cabeza porque no te deja pensar con claridad

Un timbre de móvil se escuchó en el fondo, aunque se tomaron su tiempo para ver de dónde venía, no lograron descubrirlo. Alguien más conocía el secreto de esa noche...Millie se apoyó en Sam y decidieron salir de allí, ya habían hablado demasiado y si ese alguien estuvo desde el inicio tenía demasiada información.

Crees que alguien nos escuchó (le susurra Sam a Millie) ella lo mira con ojos de quien teme lo peor y hace un ademan con sus hombros. Espero que no, le susurra al oído.