Tarde o temprano...

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El mundo es un pañuelo, lo pensó el día que Alik le enseñó un viejo álbum de fotografías que solía guardar como recuerdo en su casa, era de las pocas cosas que atesoraba. Una tarde de domingo sin muchas cosas por hacer decidió mostrarle un poco más de su vida, aquellas fotos que nos toman de pequeño que realmente son ridículas, pero hacen parte de la historia de cada uno de nosotros, al principio sintió pena, pero lograba sentirse cómodo con Vic sin importar el qué. Las fotos de los bautizos, piñatas y cuanta gracia pudiera ocurrir en el momento, al llegar a las últimas páginas, la vio, sus ojos la reconocieron inmediatamente, aunque su cerebro tardo un poco más en saber de dónde se le hacía familiar ese rostro, ese color de pelo, esa sonrisa, por alguna extraña razón esa mujer le hacía pensar en Jamie, cómo olvidarle si ella había sido la causante de esa ruptura, Alik y esa mujer eran hermanos... El universo se tenía que estar riendo de ella, meditó por unos segundos qué hacer después de algo así, se quedó en blanco, no supo y no pudo hacer nada. Esa noche no durmió, no era capaz, la cama era un lugar completamente incomodo, el solo pensar que estaba involucrándose indirectamente con ella le producía una alergia, estuvo a punto de retirarse del juego aun si saber todo lo que estaba por venir...

Victoria estaba completamente segura que a pesar del tiempo Caroline no tenía idea de su existencia junto a Jamie o eso quería pensar, necesitaba sentirse segura de ello o perdería la cabeza por completo justo cuando todo estaba a punto de terminar, decidió guardar distancia para poder estar alerta no solo tenía que estar pendiente de ese nuevo problema, también debía seguir actuando pues no dudaba que el Oficial Ryan estaba ahí justamente para observar cada uno de sus movimientos y gestos todo eso hacía que los minutos se volvieran eternos uno más que el anterior, desde la distancia se pudo percatar de la relación que existía entre aquellas hermanas a pesar de que no compartieran mucho tiempo juntas, estaban unidas y el dolor que sentían las unía mucho más, Ross buscaba a Vic con la mirada pero no podía encontrarla entre la gente, Vic sabía que era a ella a quien buscaba y lo menos que quería era que la encontrara pero no podía escapar de ella para siempre, finalmente Ross hizo un gesto muy sutil con su cabeza al ver donde se encontraba, se acercaron hacia ella, Victoria sintió que en cualquier momento las cosas podrían empeorar, Caroline se quitó las gafas, la miro fijamente a los ojos mientras rodaban lagrimas por sus mejillas y sin pronunciar ninguna palabra solo se limitó a abrazar a Victoria...

"Gracias por hacer feliz a mi hermano."

Se limitó a decir solo eso y se retiró sin decir nada más, fue la sensación más extraña e incómoda que pudo experimentar, Victoria estaba completamente desubicada, no sabía qué hacer ni que sentir, pero debía hacerlo rápido pues Ryan seguía observándola, se le ocurrió fingir que limpiaba lágrimas de sus ojos para evitar llorar con más fuerza, eso calmaría las cosas por unos minutos. Mientras meditaba en los siguientes pasos que debía dar una mano suave toco su hombro, al girar sintió paz pues se trataba de Millie que finalmente había decidido hacer acto de presencia, ya había saludado a toda la familia de Alik solo faltaba ella, Mill se paró frente a ella y la abrazo con ternura.

- Que bueno que estas aquí Mill.

- Debo contarte algo importante.

- ¿Qué sucede?

- No, aquí ya no es seguro hablar, cuando puedas búscame. Ahora actúa de acuerdo a la ocasión.

No sabía de qué se trataba lo que Mill le quería contar, pero desde luego no debía ser nada bueno y si no tuvo la confianza para hacerlo en ese instante muy seguramente se trataba de Alik y de lo que habían hecho, el temor volvió a recorrer su cuerpo, hasta después de muerto ese imbécil seguía causándole problemas. Le pidió a Mill que la acompañara por una botella de agua, cualquier excusa era buena para salir de allí, necesitaba respirar, pero respirar de verdad, porque desde que había pisado ese lugar sentía que solo estaba conteniendo la respiración.

- ¿Quién es esa mujer que esta con Ross?

- Caroline, su otra hermana.

- Ahhh. ¿Pensé que no vendría?

- Yo también pensé lo mismo.

- No te veo muy contenta.

- Tu misma lo dijiste, no es el lugar para hablar.

- Te entiendo. Pero es linda, muy linda.

- Sí que lo es.

BelladonnaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora