Minutos después...

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Una vez estuvieron a solas los Oficiales.

- Entonces Glenn. ¿Ya te pudiste convencer de una buena vez por todas?

- Debería, pero hay algo dentro de mí que no me permite estar tranquilo.

- Te di lo que querías y seguimos en las mismas.

- Ryan, ella sabe más de lo que dice, en eso estoy seguro. Pero esto será más difícil de lo que había pensado.

- ¿Qué sugieres?

- Hablemos con quien sería la madrina de boda, quizá por ese lado podamos conseguir algo. Y no estaría de más poder obtener las declaraciones de la otra hermana del muerto.

- Alik, se llamaba Alik.

- Buenos Ryan, tú me entiendes.

Victoria no veía la hora de estar fuera de ese lugar, de alguna manera estar allí la ponía nerviosa, sabia controlar su cuerpo, sus reacciones, pero no podía evitar sentirse así y que al más mínimo error pudiera delatarse. La desconcertó saber que harían una segunda autopsia, se supone que las cosas serían un poco más simples, estaba molesta con Emma, no sabe bien en que momento perdió el control pero no debió lastimarlo, no era necesario. No estaba tranquila y no lo iba a estar hasta que cerraran el caso. La única opción, acelerar las cosas con la familia y salir de todo esto lo más pronto posible.

Buscó en su móvil a Rossie, desde su visita a casa no habían tenido contacto, no lo sentía necesario, intentó encontrar las palabras adecuadas en ese momento para no sonar desesperada, necesitaba seguir siendo la novia traicionada y triste, dudó por un instante hasta que se decidió a llamar.

- ¿Vic? Me sorprende tu llamada. ¿Estás bien?

- No Ross, esto es horrible, necesito hablar con alguien.

- Claro, cuando quieras.

- ¿Podríamos vernos ahora?

- ¿Dónde?

- En un lugar especial para mi,  si te parece bien.

- Envíame la ubicación y llego de inmediato.

- No tardes por favor.

Negrón® es uno de los lugares favoritos de Victoria, por pequeño y acogedor, su torta de red velvet es única, aunque siempre que estaba allí se debatía entre las porciones de amapola o red velvet, alguna veces se daba el gusto de pedir las dos, siempre diciéndole a la niña que le atendía que si subía de peso seria por culpa de ellos. Pues preparaban cosas deliciosas. Esa tarde se sorprendieron en el local, pues por primera vez ninguno de estos sabores estaba en el pedido, solo deseaba un café de rosas... La mesera de siempre se extrañó y se lo hizo saber con su mirada de incredulidad, pero Victoria estaba tan ocupada con sus pensamientos que no le dio importancia y solo reaccionó hasta que vio que la puerta se abrió, Rossie por fin había llegado.

- Vic llegué lo más rápido que pude.

- Esta bien, no te preocupes, no hace mucho que estoy acá.

La mesera se acercó para ofrecerle la carta e inmediatamente se retiró.

- Cuéntame, tu llamada me dejó muy preocupada.

- Preocupada estoy yo Ross.

- ¿Por?

- Acabo de reunirme con los oficiales que están a cargo del caso de Alik.

- ¿Y qué pasó? ¿Tienen noticias? ¿Por qué no nos llamaron?

- Sí y no.

- No te entiendo, habla por favor.

- Querían hacerme más preguntas, pues encontraron algo en el móvil de Alik, querían saber si yo tenía conocimiento de eso.

- ¿Que encontraron?

(Tras esa pregunta victoria no sabía si llorar, pero temía que al hacerlo no le saliera del todo natural.)

- Unos vídeos asquerosos de tu hermano con algunas mujeres.

- No te estoy entendiendo.

- Ross, esto no es fácil para mí, me da asco recordarlo y decirlo mucho más. Eran vídeos pornográficos. Tu hermano se grabó con esa o esas mujeres teniendo sexo.

- No puedes estar hablando en serio...

- Quisiera no estar hablando en serio, porque de solo decirlo me siento sucia.

- ¿Cuantas mujeres?

- Ross no sé, creo que a estas alturas eso no importa.

- ¿Cómo no vas a saberlo, no los viste?

- Sí, pero en el vídeo el único que era reconocible es tu hermano, a las mujeres no se les ve el rostro.

- ¿A ninguna?

- A ninguna de ellas.

- No... No lo puedo creer. El había cambiado, seguramente esos vídeos son viejos.

- Ross solo te cuento lo que vi, yo también pensaba eso, pensé que se trataba de un error y pedí que me mostraran lo que habían encontrado, no podía creer en las palabras y cuando lo vi... Ahí estab... (Rompe en llanto)

- Vic cálmate, por favor, siento mucho que estés pasando por todo esto.

La mesera se acercó para saber si necesitaban algo, Rossie amablemente pide agua para ella y para Victoria.

- Pero eso no es todo.

- ¿Qué quieres decir?

- A raíz de todo lo que ha sucedido, los oficiales sospechan de mí.

- ¿Cómo que sospechan de ti?

- Dicen que es muy raro que yo no me hubiera dado cuenta de todo esto, de sus infidelidades, al menos de una de ellas.

- Pero tú serias incapaz.

- Mas allá de eso Ross, tú crees que yo me expondría a todo esto, a ser la tonta y peor aún a que esto salga a la luz y me señalen de la peor manera. No claro que no, jamás.

- Eso lo sabemos Vic, nosotros en ningún momento hemos pensado algo así. Por el contrario estamos de tu lado, confiamos en ti y nos apena que estés viviendo todo esto.

- Yo solo quiero despertar de esta pesadilla. Que me digan que todo ha sido mentira, que fue un accidente, que nada de lo que dicen de él es cierto.

- Ay mi Vic, no me gusta verte así. Todos queremos lo mismo, que termine esto y que mi hermano pueda descansar de una buena vez.

- ¿Que tienen pensado hacer?

- Es un tema muy sensible, pero hace muchos años lo habíamos hablado como familia y se había tomado la decisión ya. Así que eso no cambiara en nada. Todos seremos cremados cuando sea nuestro momento. Jamás pensamos que Alik sería el primero, pero hay que aceptarlo.

- El me había mencionado algo al respecto, pues quería que tuviéramos todo listo en un futuro, pero yo siempre odie hablar del tema, en mi cabeza no cabe que ahora lo estemos discutiendo.

- Lo sé...

- ¿Te encuentras bien Ross?

- Sí, solo que me dejaste muy mal con lo que me cuentas. No puedo entender que había en la cabeza de mi hermano.

- (Suspira) La verdad yo tampoco. Prefiero tener en mi cabeza los buenos recuerdos, los buenos momentos. Del Alik que me han hablado en los últimos días no existe, me niego a aceptarlo, nunca lo conocí y prefiero que sea así.

- Haces bien Vic, es lo mejor para todos. ¿Quieres que te lleve hasta tu casa?

- Te lo agradecería Ross.

Sentía que cada movimiento que hacia podía ser vigilado, la necesidad de ir con cautela, de cuidar cada paso, gesto, palabra, reacción, era importante a cada segundo. Debía cuidar hasta lo que pensaba. Nunca había orado para pedir por algo, pero en este momento si algo así solucionaba las cosas, estaba dispuesta a hacerlo sin titubear...

BelladonnaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora