Lunes 14 de enero 2019. (Ryan y Glenn.)

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Los oficiales Glenn y Ryan se habían mantenido un poco distantes del caso ya cerrado, o eso querían hacer parecer a sus colegas, en sus ratos libres se habían dedicado a investigar a su manera algunas de las mujeres que Ryan pudo identificar en el sepelio de Alik. Contaron con la suerte que más de una quiso hablar sobre el tema extraoficialmente con ellos,

- Qué bueno que te veo Glenn, precisamente te iba a marcar.

- ¿Qué necesitas?

- El jefe me acaba de llamar la atención por mi físico, dice que estoy un poco desaliñado, ya que estamos terminando la jornada acompáñame a la peluquería y de paso le damos otra vuelta al caso...

- Listo, déjame termino un par de cosas que tengo en el escritorio y te caigo, pásame la ubicación.

- Ahí te la acabo de enviar.

- ¿La Peluquería Felipe's Barber Shop®? Y por qué precisamente en este lugar.

- Cuando llegues allá lo sabrás con exactitud, acá no puedo hablar de eso.

- Está bien Ryan, ahora con más razón terminare rápido y te veré allá.

El oficial Ryan tenía un motivo de peso para ir precisamente a ese lugar aprovechando la oportunidad que le había dado su jefe con ese mal comentario, pero lejos de sentirse ofendido, su cerebro proceso rápido y unió las ideas para hacerlo.

40 minutos después llegó al lugar, había llamado con anterioridad para pedir que le atendieran, al cruzar la puerta se percató de que era más grande de lo que imaginaba, inmediatamente lo atendieron, le entregaron una toalla y le guiaron al primer piso donde le lavarían el pelo, antes de que la niña que amablemente lo había llevado se marchara, le pidió que estuviera pendiente de un amigo que llegaría allí preguntando por él.

5 minutos después, justamente en el momento que estaban terminando de lavarle el pelo escucha la voz de Glenn, mira de reojo y lo ve a su lado.

- Compañero. ¿Me lo están tratando bien?

- Déjate de bromas Glenn.

- No estoy bromeando. Y bien, acá estoy. ¿No me digas que me vas a invitar a un corte?

- Pues no te caería nada mal. Pero acá no hacen milagros.

- Bueno, dime de una vez para que me pediste que te acompañara, me siento muy observado por las mujeres que están haciendo fila, van a pensar que tenemos algo.

- Espero que eso sea lo último que piensen. Lo que me faltaba...

- ¿Entonces Ryan?

- Ven sígueme, pidamos algo de tomar en el bar mientras espero que me atiendan.

- ¿Ah es que este lugar tiene bar? Esto si es pensar en grande.

- Cosa que le falta a otros o no compañero (Ríe descontrolado)

- Bueno, cuéntame que sucede que me tienes con la duda.

- El fin de semana estuve hablando con una de las mujeres que asistieron al funeral.

- Yo también hice lo mío por mi parte.

- Bien, pero préstame atención. Le pregunte a Samy.

- ¿Samy?

- Bueno Samantha, pero me pidió que le llamara Samy.

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