Fortnite I: Choque de realidades

#1 - Deriva

Narra ???

???: ¿Dónde estoy?

Lo último que recuerdo es estar pintando una especie de escultura con un grafiti... una especie de máscara blanca, rodeado de mi carrito y escuchando música en la radio. Una grieta me llevó hasta aquí. También recuerdo... mi nombre... Deriva.

Deriva: ¿Qué narices hago aquí?

No sabía donde me encontraba. Era una explanada, con unas casas al fondo. A mi lado, una cabaña.

Deriva: ¿Qué? ¿Una cabaña?

Entré, pensando encontrarme a alguien a quien pedir ayuda. Sin embargo, solo me encontré con un arma de color verde.

Deriva: ¿Qué es esto?

Recogí el arma. Era una pistola. ¿Por qué verde? La verdad es que no tenía ni idea.

Deriva: Alguna vez he visto pistolas... pero nunca he tenido una en la mano.

Sujeté la pistola e intenté disparar a la pared. Sorprendemente, logré dañar la pared.

Deriva: Así que así se usa este bicho... ¿y para qué quiero yo una pistola?

Unos ruidos fuera de la cabaña me sobresaltaron. Decidí mirar por la ventana a ver qué pasaba.

Deriva: Qué...

Observé una persona construyendo una rampa de madera. Después un suelo, y otra vez una rampa. Encima de él estaba otra persona, una chica, construyendo varios conos de piedra. Al final, el chico alcanzó a la otra chica, y le metió... ¿¡un escopetazo!? En ese momento, el cuerpo de la chica se volvió azul y un robot apareció encima de ella, llevándosela a no sé donde. El cuerpo de la chica también arrojó una escopeta azul, una pistola como la mía y una bebida azul gigante. El desconocido recogió los objetos de la chica, se tomó la bebida azul y siguió su camino. Cuando me pareció que estaba todo despejado, salí de la cabaña.

Deriva: No entiendo lo que acaba de pasar a mi alrededor. ¿Han matado a esa chica? ¿Dónde está ahora?

Sin darme cuenta, empezaron a dispararme por detrás.

Deriva: ¿¡Qué!? ¿¡Y ahora que hago!?

Quien me había empezado a disparar se estaba acercando a mí construyendo rampas. Yo intenté irme.

Deriva: ¡Solo quiero paz!

El desconocido siguió persiguiéndome hasta que llegué a un acantilado. No podía avanzar.

Deriva: ¿Qué hago ahora?

Cogí la pistola e intenté disparar al sujeto que venía a por mí. No le di ni una bala.

Deriva: ¡Argh! ¡Maldita pistola!

No pude hacer nada. Al final, quien había venido a por mí me dio un escopetazo en la cabeza, aunque no sentí dolor. Simplemente sufrí una sensación rara, como de cosquilleo. Grité, pensando que moriría en el acto. Pero no fue así.

???: ¿Has acabado ya?

Abrí los ojos. Sorprendentemente no me encontraba en un vacío en la oscuridad, sino en un suelo... ¿suelo? Observé una chica enfrente de mí. Parecía una gata, de color negro. Tenía los brazos cruzados.

Deriva: ¿Qué...?

La desconocida rio.

Lince: Mi nombre es Lince. Tú eres...

Deriva: Deriva, soy Deriva.

Me tendió la mano para ayudarme a levantarme. La tomé y volví a estar de pie.