Fortnite I: Choque de realidades

#14 - Pasado

Narra Artillera del BRUTO

Envié a los héroes de la central al pasado. En concreto, cuando la única líder era Renegada. Sin embargo, hubo una pequeña alteración que los mandó a épocas distintas. No le di importancia a este pequeño cambio.

Artillera: Hecho. Ya están en el pasado.

De repente, una parte de mí se sintió especialmente mal. Mal por lo que acababa de hacer. Cada vez que cometía algún acto de maldad, la misma sensación me visitaba. Intentaba no prestarle importancia, pero no podía evitarlo.

Artillera: Jefe.

Caballero Ultima: ¿Sí, Artillera?

Artillera: Yo también viajaré al pasado. Quiero vigilarlos más de cerca.

Caballero Ultima: Me parece bien, Artillera. Me parece bien. Suerte en tu viaje.

Me dirigí al Nexus que teníamos en nuestra guarida, idéntico al que había estallado en la isla, y me teletransporté yo también al pasado.

Narra Singularidad

Singularidad: ¡¡¡CHICOS!!!

Todos ellos fueron arrastrados al interior de la grieta. Después, toda la luz se evaporó, dejando solamente un Nexus medio resquebrajado y una nueva zona de gravedad cero.

Singularidad: ...

Lujo: ...

Vendetta: ...

Llave Maestra: ...

Lujo: ¿Estás bien?

Llave Maestra: Yo sí.

Vendetta: Yo también.

Singularidad: ¿...dónde han ido?

Lujo: No lo sé, Singularidad. Intenté controlar el flujo de la grieta con mi habilidad para cambiar su destino y volverla inofensiva, pero por desgracia no he podido. La grieta estaba... corrompida.

Vendetta: ¿Qué quiere decir eso?

Lujo suspiró de resignación.

Lujo: Alguien estaba controlando el Nexus. Alguien sabía cuándo iba a estallar, y ese alguien también sabe dónde han ido los demás. Solamente tenemos que encontrarlo.

Singularidad: Eso está hecho. Vamos a dar las alarmas.

Los cuatro corrimos al cuartel general.

Narra Cénit

Abrí los ojos. Nos encontrábamos en pleno campo. O al menos, Lince y yo. De Deriva y Catalizadora ni idea. Lince estaba tumbada a mi lado. Aún tenía los ojos cerrados.

Cénit: ¡Lince!

No respondía. Me acerqué a ella para comprobar que aún tenía pulso, y efectivamente, así era. Viva seguía. Yo volví a tumbarme.

Cénit: No sé cómo saldremos de esta...

No me di cuenta, pero en ese momento Lince abrió los ojos.

Cénit: Espero que sigamos juntos en todo lo que nos pase, Lince. Aunque sepa que no me estás escuchando. Aunque estemos sin Deriva y Catalizadora, solo nosotros podremos hacer frente a ellos. Nosotros... juntos...

Lince: Cénit...

Me incorporé y me giré hacia ella, sobresaltado por el susto.

Cénit: No me des esos sustos.

Ella estaba sonriendo.

Lince: ¿Todo lo que has dicho...?

Yo me sonrojé al instante.