Capítulo 8: Vuelta a la rutina.

423 14 2
                                    

-Sigrid-

Oh.

El camarero amigo de Cris (del que todavía no sabíamos el nombre) había entrado en la sala de la piscina.

Nos volvió a hablar en su incompresible lengua y, al ver que no le entendíamos, nos habló en inglés.

-What are you doing, crazy guys!?

-Perdona tío,-le dijo David.-pero prefiero el francés.

-JAJAJAJAJAJAJAJA-nos reímos todos.

-Oh, stupid boys... always doing stupid things in this stupid hotel.

-JAJAJAJAJAJA

-Tío, vamos.-dije.

Salimos de allí lo más rápido que pudimos ya que venía detrás de nosotros.

En el camino a la habitación...

-¡¿A QUIÉN SE LE OCURRE?!-dije.

Ellos me miraron.

-¡SOLO A TI, CABEZÓN!

-JAJAJAJAJA

Carlos me miró.

-Si yo soy un cabezón tú eres una enana. ¡Enana!

-¡Cabezón! Yo por lo menos lo tengo asumido... Se que igual no crezco pero tu cabezón, por mas que crezcas, seguirá igual o mas grande.

-JAJAJAJAJA-rieron todos.

Estábamos andando por los pasillos para llegar a nuestra habitación.

-Chicos, lo estáis poniendo todo perdido.-dijo mi amiga.

-Como si tú no estuvieses chorreando.

-Calla David.

No habíamos dado dos pasos cuando Blas y Dani se cayeron al suelo.

-Vosotros tenéis tendencia a caeros, ¿no?-dijo mi amiga.

-Nah, que va.

Se levantaron y siguieron chorreando todo el suelo.

Se abrió una de las puertas del pasillo.

Nos giramos y no había nadie.

-Tíos, tengo miedo.-dije.

-Y yo...-dijo Cris.

-No hay nada chicas.-dijo Carlos.-Pero... si queréis, os puedo proteger.-dijo poniendo un brazo alrededor de nuestros hombros.

Le pegamos un tortazo.

-¡AU! ¿Y ESTO?

-Guau.-dijo David.-¿Cuántos tortazos te llevan pegando ya?

-No lo sé David. He perdido la cuenta.-dijo Carlos sarcásticamente.

Seguimos andando mientras Carlos se frotaba la cara, por los dos lados.

Oímos otro ruido en el pasillo.

-¡Tíos, tíos! ¡Qué ahí hay alguien!

-Qué no Cris, no seas cabezona.-dijo David.

Mi amiga le miró mal.

-Claro, claro... A el le miráis mal pero a mi me pegáis.

Todos nos reímos de eso.

Seguimos andando otro rato pero seguíamos oyendo ruidos.

-¡AHORA EN SERIO, AHÍ HAY ALGUIEN!-dije.

Entonces oímos voces.

-¡FANTASMAS, FANTASMAS!-gritaron David, Dani y Carlos.

-¡CORRED, CORRED, CORRED!-empezaron a decir Álvaro y Blas.

Endless Road (Auryn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora