KiriBaku Month

Aniversario

Una semana era lo que faltaba para el aniversario de bodas de los protagonistas, su pequeño estaba más que feliz viendo el cambio que tuvo su padre en ese tiempo, pero ¿Qué fue lo que paso?, te estarás preguntando y yo te daré la respuesta, así que quedate, lee, comprende y entiende.

Después de la noche en la que Eijirō dijo aquello Katsuki lo penso mucho tanto que se perdió en sus pensamientos.

Pero había tomado una decisión, si el chico no quería estar con él era libre de irse.

Se acerco al estudio donde Eiji estaba trabajando, toco la puerta esperando que el chico le diera el pase, cuando lo obtuvo entro y camino hasta estar frente al pelirrojo.

— Seré directo... — guardo silencio, Eiji lo miro — si no me amas puedes irte te daré el divorcio, preferible eso a vivir una vida que nos esta haciendo daño — dijo serio.

— ¿Crees que con eso se soluciona todo?, dejame decirte que no — coloco sus brazos en su escritorio y adopto una pose seria.

— Es lo mejor para ti y para mi, además nuestro hijo esta de acuerdo — dijo sin expresión alguna aunque le doliera.

— ¿Hablaste con él de esto?, estas loco tiene 4 años — golpeo el escritorio con la palma de sus manos.

— El entiende, es muy inteligente para eso — fruncio el ceño — no se en que te afecta — bufo.

— Si quieres que esto termine esta bien, largate que yo no me iré, además nunca te necesite, nunca te ame yo estaría mejor sin ti ya que sólo fuiste una piedra en mi camino — se sentó.

— Eso es lo que opinas de todo esto — trataba de ser fuerte pero con cada palabra se iba rompiendo poco a poco.

— Ojala nunca te hubiera conocido, ahora desaparece de mi vista — dijo molesto.

Katsuki se mordió el labio para no decir más, salio del estudio y al cerrar la puerta se desmoronó en llanto, dolía, vaya que dolía, pero debía ser fuerte, por él, por su hijo.

Limpio las lágrimas y fue por el pequeño, tomo las maletas que tenía ya listas y las llevo al auto junto a su hijo.

— Mami, ¿Por qué nos vamos? — pregunto el pequeño viendo como se alejaban de la casa.

— Tendremos vacaciones — dijo tratando de no llorar.

— ¿Papá no vendrá? — miro a su mami.

— Esta ocupado — lo que le había dicho a Eiji era mentira, nunca le dijo nada a su hijo.

Katsuki manejo a una velocidad de 80 a 100, a cada avance sus ojos se nublaban, pero en un descuido no logró bajar se velocidad y pasar la curva despacio, el auto termino cayendo por un barranco.