Los días transcurren con una lentitud que me provoca jaqueca. Ya han pasado seis días desde el cumpleaños de mi hermano mayor, lo que significa que mañana es veinticuatro de diciembre y realmente sigo sin tener ánimos de nada.
Sé que Paula está haciendo un esfuerzo enorme para hacerme olvidar por unos segundos todo pero mi mente realmente no puede hacerlo. Y, aún que sepa que ella me entiende, no me gusta lo que la estoy haciendo pasar. Habíamos hablado desde bien pequeñas como lo íbamos a pasar cuando viviéramos juntas pero nunca mencionamos los malos momentos. Había intentado poner buena cara para al menos pasar un momento de felicidad en la tormenta que sentía que estaba viviendo pero nunca duraba mucho.
—Se acabo—Paula de acercó a mí, agarrando la caja de galletas que descansaban sobre mis piernas—. Esto es lo único que te he visto comer en cuatro días y no voy a permitir que esto siga adelante.
—¿Qué quieres decir?—Con el ceño fruncido la observe mirándome enfadada.
—Superalo—responde—. Ya no es un consejo, es una orden. Sé por lo que estabas pasando, ______, y también sé exactamente como superarlo y lo primero que hay que hacer es no pensar en eso. Es difícil, no te voy a mentir, pero si poco a poco lo vas quitando de tu cabeza habra un momento en el que no pienses en él. Sal fuera, ¡conoce a gente! Harry Styles no es el único hombre del mundo y deberías darte cuenta de eso. Eres mi mejor amiga y quiero ayudarte.
Cogí exageradamente aire por la nariz y lo expulse todo de golpe.
Sé que Harry ni quisiera era el único hombre de su familia, que hay hombres guapos en todos los lugares del mundo y también sé que no hay ninguno como él. Llevo toda mi vida esperando al hombre perfecto porque ninguno ha conseguido que mis rodillas tiemblen con una mirada pero llega Harry y lo cambia todo. El poco tiempo que estuvimos juntos le di todo de mi, absolutamente todo, ¿y él que hizo? Destrozarme. Y no voy a permitir eso, ya no más. He tenido una larga semana para ahogar mis penas en alcohol y comida basura pero eso ya va a terminar. La ______ post Harry Styles ya está servida y lista para llevar.
—¡Tienes toda la razón del mundo!—De un salto, me levanto del sofá—. ¿Qué quieres hacer? ¿Te parece bien ir a comprar ropa? No tengo nada para poder ponerme mañana.
La cara de Paula paso de ser madre molesta a mejor amiga orgullosa y sonrie ampliamente antes de asentir frenéticamente con la cabeza.
[...]
La cena que ha organizado mi madre para el veinticuatro de diciembre ha resultado ser una pequeña reunión.
Mi hermano ha invitado a Jacob, su mejor amigo polaco y mi antiguo amor adolescente ya que al parecer sus padres habían ido a Polonia de vacaciones y le habían dejado solo hasta nuevo aviso y no sé si es debido a mi sorpresa por encontrarmelo aquí después de meses sin verlo o se debe a que el tiempo le ha sentado extrañamente bien, pero no he evitar ponerme nerviosa al verle.
Él me mira de arriba a bajo cuando entro en la sala y me sonríe en forma de saludo. Sé que no sabe cómo saludarme y la verdad es que yo tampoco; Jacob no es como Paula para mí familia y no hay tanta confianza como para saludarme con un abrazo o unos besos en la mejilla.
Mi mejor amiga está detrás de mi, hablando con mis padres de un tema desconocido para mi y veo la espalda de mi hermano y de su novia tan absortos en ellos dos que no se dan cuenta de que acabamos Paula y yo de llegar. Cuando menos me doy cuenta, veo a Jacob acercarse a mí.
Mierda, mierda, mierda.
—Hola—Su sonrisa llega a sus labios y no puedo evitar compararla con la de Harry. Jacob no tiene hoyuelos—. He oído que has estado en Italia.
—Asi es—Asiento con la cabeza—. De hecho volví hace poco más de una semana.
—¿Tienes pensado volver?
—Que va. Allí no tienen jamón de pata negra—digo, burlona y es la risa de Jacob lo que hace que mi hermano se gire hacia nuestra dirección y nos miré.
—Que bien, ya habéis llegado.
Mis primas, mis tíos y mis abuelos llegaron poco después y no tardamos mucho en comenzar a devorar la comida. Y no puedo evitar fijarme en que el amigo polaco de mi hermano a escogido el sitio que se encuentra delante del mío y que en varias ocaciones le he pillado mirándome. Siento como alguien me toca el muslo y giro la cabeza para observar a Paula, mirándome ojiplática y señalándole con los ojos a Jacob. No puedo evitar sonrojarme a lo que ella está tratando de decirme.
—¿Cómo has estado este tiempo, ______?—la pregunta de Jacob rompe la conversación de miradas que mi mejor amiga y yo estábamos teniendo y me giro a mirarle.
—Acaba de terminar una relación—Paula se apresura a responder—. Pero ahora está buscando a posibles candidatos.
Veo como mi antiguo amor se lame los labios y me mira, curioso.
—Menudo idiota, ¿no?
—Pues si—Esta vez, es mi hermano quién responde—. Es inglés, los ingleses son bastantes fríos y poco sensibles.
—Ese tópico es ofensivo y además, es un tercio inglés—digo—. También es italiano y español—Sacudo la cabeza, negandome a seguir hablando del innombrable—. Pero eso no tiene importancia ahora—Me encojo de hombros, intentando quitarle importancia y me dedico a volver a comer.
Miro de reojo a mi hermano y a mí mejor amiga e internamente sé que están compinchados por las miradas pícaras que se echan el uno al otro.
Malditos hijos de su fruta madre.
—Asique, ¿inglés, español e italiano? Solo te falta salir con un polaco— Aquella indirecta bastante directa hace que mi corazón se acelere por incomodidad. Toda mi familia está delante. Mis primas ahogan una risa y Gonzalo y Paula se miran contentos mientras que yo evitó mirar a mi madre que sé que a de estar encantada. Desde siempre me querido emparejar con él—. ¿Qué dices?—No sé si me está preguntando salir un día de estos y aunque no quiero salir con nadie ahora mismo, me obligo a asentir con la cabeza por tres motivos; unos de ellos es que he prometido intentar pasar página y Jacob puede ser un boleto directo hacía eso, otro es que mi adolescente interior siente curiosidad por como es salir con mi antiguo amor y la última es porque si en este momento le digo que no, la cena será bastante incómoda a partir de ese momento
—Claro, ¿por qué no?—Sonrio forzada, para después terminar de comer.
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En Italia {H.S}
De TodoRoma, una preciosa ciudad que sin haberlo planeado, me trajo el amor de mi vida #44 - harrystyles #37 - harrystyles #12 - harrystyles #10 - harrystyles #1 - harrystyles