♢ Jeon Jungkook y Park Jimin solo querían divertirse, pero no contaron con llevarse a dos prostitutas a su hogar, y tampoco contaban que surgiera algo más. Pero, aferrarse a una persona, es un gran y doloroso costo que hay que pagar.
↻No copias ni...
Sus manos daban suaves caricias a la espalda de su menor, sus preocupaciones últimamente han aumentado. Esto no era normal.
—Rosie, ¿Estás segura que solo estás enferma?
—S-Si JenJen... Debo haber comido algo que me cayó mal...— dijo la rubia para tirar la palanca del inodoro, y todo lo que había expulsado ella, se fuera.
—¿Y si vamos al hospital?— preguntó Jennie para alejarse un poco.
—No quiero preocupar a los chicos....— dijo Rosé para ponerle pasta dental al cepillo de dientes, y metérselo a la boca, para empezar a hacer movimientos circulares.
Jennie soportaba un poco la tozudez de su amiga, pero este asunto ya era bastante extraño, la mayor parte del tiempo, la rubia pasaba en el baño, expulsando lo que ella come.
—Si vuelves a vomitar, quieras o no, iremos al hospital.
La australiana asiente mientras se seguía cepillando sus dientes, y la castaña se retira del baño, dejándola sola. Ya finalizado su lavado, se dirige a la habitación, y se sienta a la orilla de la cama.
—¿Qué te sucede estómago?— dijo Roseanne para empezar a acariciar su abdomen.
¿Qué iba a saber una chica de 19 años que está embarazada?
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—¿Qué tal todo con Rosé?— preguntó la chica de melena mientras lo miraba.
—Pues, de maravilla. Amo pasar tiempo con ella...— respondió el pelicastaño para sonreír.
—Si que estás enamorado Kook...— dijo su amiga para sonreír negando con la cabeza.
—¿Y qué tal todo con Mina?
—No nos hemos visto mucho, la ascendieron de su trabajo, y trabaja mucho más de lo que ya hacía...— respondió Chaeyoung.
—No debes por qué preocuparte Chae, verás a tu novia, no es como si de un día para otro ya no la vieras...
—Tienes razón, estoy muy orgullosa de ella, está dándolo todo por nosotras...— respondió la de melena.
Su conversación fue interrumpida, por la llegada de una chica, Chaeyoung suspiró y la miró.
—Señor Jeon, tiene que firmar estos papeles para la exportación y las promociones de la nueva línea...
—Gracias por traerlos Yeri, puedes retirarte.— dijo Jeon para darle un breve mirada a la chica y mirar los papeles que ahora tenía en sus manos.
La chica asintió y le dio una disimulada mirada a la pelinegra de melena y salió de la oficina con una sonrisa.
—Muy pronto vas a sufrir Jungkookie, ella se irá y serás completamente para mí...— se dijo Yeri para sentarse en su silla, aún con su sonrisa pegada en el rostro.
