Dejame amarte.

XV

Daniel.

Daniel: ¿Entonces que dices?

Danna: escucha, entiendo lo que quieres hacer con tu amigo, pero... ¿El te lo pidió? Tal vez solo estás exagerando las cosas.

Daniel: si, pero... Sé que el...

Danna: ¿Recuerdas todo lo que pasó esa noche?

Daniel: no... No quiero hacerlo...

Danna: tienes que hacerlo para que puedas ayudar a tu amigo.

Daniel: bien... Sí lo hago... Por eso te pido esto... Ni siquiera aguanto unos dedos, por eso no es gay.

Danna: ¿Al menos lubricaste? Recuerda que el ano no es lo mismo que una vagina, la vagina lubrica sola y el pene igual... El ano y los dedos no se lubrican por si solos.

Daniel: ... Aún así...

Danna: ¿Qué sientes por tu amigo?

Daniel: el... El es el bandido más malvado de todos...

Danna: ¿Eh?

Daniel: el... Me salvó de la soledad... Cuándo era pequeño... Es normal que lo quiera... Como a un hermano...

Danna: ¿Como a un hermano o... Como tú pareja...

Daniel: no... Yo no soy así...

Los recuerdos inundaban mi mente últimamente, cuando lo bese aquella fiesta... Estaba confundido...

Daniel: solo lo bese porque él no había dado su primer beso... Como yo... Yo ya sabía hacerlo... Solo le enseñé...

Danna: ¿Porque decidiste hacerlo?

Daniel: porque iba a besar un pene de goma...

Danna: ¿Con que criterio pensaste que tú eras mejor que eso?

Daniel: porque... Yo...

Danna: ¿Tú...?

Las lágrimas salían por mis ojos, yo no quiero esto... Yo no elegí esto...

Daniel: ¡Yo no soy así!

Danna: ¿Eh?

Daniel: yo no quiero ser gay... ¡No quiero despertar a lado de un hombre! No... ¡No quiero!

Cai rendido al suelo, la tigresa me miraba con pena... No la culpo...

Danna: ¿Y qué tiene de malo el que lo seas?

Daniel: el que... Me mirarán raro...

Danna: pero tendrás a una persona a la que harás feliz, a la que que te apoyará sin importar que, la felicidad tiene un costo... Solo tú puedes estar dispuesto a pagarlo.

Daniel: pero... Todo cambiará...

Danna: a cambio de felicidad, ¿Vale la pena no?

Daniel: si...

Danna me abrazó para consolarme, yo me solté y lloré más, pasamos un rato, después regrese a casa, supongo que... Puedo intentar...

Daniel: es hora de ir de compras...

Javier.

Sean: hey, lindo, ¿Quieres un collar?

Javier: pues... ¿Porque no? ¿Cuánto es?

Sean: gratis, un regalo de mi para ti.

Me dió una concha azul amarrada a un delgado lazo negro, yo compré uno verde y se lo di, yo me quite el mío y desamarre el nudo.