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D I E C I S E I S

"Punto de quiebre"

Taehyung se fue una hora más tarde, dejándolo a él solo en el silencio de su vivienda.

Dejándolo con sus pensamientos, que hoy estaban más ruidosos que nunca. Mirando la situación tenía muchos problemas, estaba Chulseung, que como había dicho era un grano en el culo, pero también estaba Taehyung. Aunque el mayor no era un problema, había algo en él que sí lo era.

Su confesión.

¿Qué demonios debía de pensar él?

Es decir le dijo que le gustaba, pero que no se moría por él. ¿Eso que significaba? O más bien dicho ¿En qué posición los dejaba eso? Porque no eran novios, y dadas las circunstancias no podía decir que eran solo amigos, con el cien por ciento del significado de "amigos"

Suspiró cansado pensando en que necesitaba hablar de ello con alguien. No era tan tarde, su madre seguramente seguía en su turno en el hospital, así que debía de poder encontrarla ahí. Ella siempre tenía buenos consejos.

Encaminándose a la salida de su casa se calzó sus zapatillas y tomando sus llaves rápidamente salió de su hogar. Aun pensando.

Tal vez debía de darse un tiempo, para analizar mejor la situación, y calmar sus nervios. Porque sí, su estómago estaba siendo pisoteado por todo el elenco de Jurassic Park.

Y aunque la visión de él evitando a Kim no le atraía demasiado, tal vez fuera algo necesario. Pensó.

Lo mejor sería preguntarle esas cosas a su madre cuando la viera. Tal vez podría pedir unos minutos de su tiempo y hablar más a fondo de eso. Por ahora solo tenía planeado contarle superficialmente, omitiendo demasiados detalles, lo que había sucedido y pedirle una opinión y algún consejo sobre que debería hacer. Después de todo ella siempre sabía que consejos darle, era genial.

Saludó a las personas en la sala de espera, cuando llegó al hospital donde trabajaba su madre y encaminándose hacia la recepción fue recibido por una señora de cálidos modales.

-¿Disculpe está usted seguro de que ese es el nombre de quien busca?-Preguntó la mujer luego de preguntar por su madre a lo que él asintió extrañado por su comportamiento.-Lo siento, joven, debe de ser una equivocación. Ella solicitó unas vacaciones desde la semana pasada. Si era por consulta de cita o para sacar una puedo anotar su nombre para cuando regrese...

-No hará falta, gracias-Respondió él con el ceño fruncido. ¿Vacaciones? Su madre casi no tomaba vacaciones, solo tomaba días libres para su cumple años y para navidad. ¿Por qué no le había dicho entonces? ¿Estaba planeando algo? Pero él estaba en el colegio en esa época, y de todas formas ella no había mencionado nada de planear un paseo. Ella llegaba a la hora de siempre, vestida como si hubiera estado trabajando. Eso significaba que no quería que él lo supiera, pero ¿por qué? ¿Qué estaba pasando?

Se tragó sus dudas, olvidándose por completo de la razón por la que había ido a buscar a su madre y regresó a la casa, con el ceño fruncido y las manos apretadas durante todo el camino. ¿Y si le había pasado algo malo? ¿Sería por salud y no quería que se enterara? Decidió mantenerse sentado en la sala a la espera de que ella llegara en la madrugada, de todas formas no iba a poder dormir con las dudas dando vueltas en su cabeza.

A eso de las dos y media de la madrugada, cuando sus ojos empezaban a cerrárseles solos, el ruido de la puerta abriéndose lo sacó de cualquier estado parecido al sueño que pudiera tener.

-¿Mamá?-Preguntó a la oscuridad recibiendo una exclamación sorprendida en respuesta. Luego como las luces de la sala se encendían casi dejándolo ciego.