La Rockera - Rochagus (Rochi y Agus)

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“Ella era una rockera, venía del '60 y sin religión
Él era consumista y algo pesimista del año 2000”

Ellos eran muy diferentes. Ella era bohemia, era libre, le gustaban las cosas simples, la naturaleza y los amores intensos. Él era su opuesto, vivía para trabajar, se preocupaba de sobremanera por acumular trastos inservibles para aparentar, le gustaba el lujo y el confort, y no creía en el amor. Cualquiera hubiese dicho que nunca se hubieran mirado, pero como todos saben, los opuestos se atraen. Rochi cayó enamorada a los pies de Agus.

“¿Para qué me has traído hasta aquí?
Y haciendo un sacrilegio soñaron ir lejos, juraron morir”

Él no sabía cómo explicarlo, pero le empezó a interesar esa mujercita rebelde, y pronto no se la pudo sacar de la cabeza. Fue tal la revolución en los cuerpos y en los corazones de ambos, que a los seis meses de estar juntos se casaron en secreto, se juraron amor eterno "hasta que la muerte los separe".

“Siempre descontrolaba, nadie la esperaba, nadie la vio partir
Excesos de cama, rock y marihuana se quiso quedar
Casi sin comer, siempre sin dormir
-Él se suicidaba cada vez que lo dejaba por otra mujer-”

Los primeros meses fueron normales, lindos, pero el cuento de hadas comenzó a esfumarse y su juramento empezó a peligrar. Agus comenzó a ausentarse por largos períodos de su hogar, siempre poniendo como excusa al trabajo, y Rochi aprovechaba estos momentos para hacer las cosas que a ella le gustaban: Salir, vagar sin rumbo por las noches, con la única compañía de sus cigarrillos de marihuana que, según ella decía, la elevaban a un estado superior del ser.

“Cuando vivas este infierno pensarás en volver
Ese día te dejo la vida rodar o morir
¿Para qué me has traído hasta aquí?
En un mundo de excesos, fronteras y rezos no cabemos dos”

Un día Rochi descubrió lo que no quería, pero suponía: Agus tenía otras amantes. No era sólo una, era una distinta cada vez. Rochi no pudo aguantar esto, y decidió abandonar el hogar. Agus se sintió vacío sin su presencia, y se lamentó por días haberle hecho ese daño a la única mujer por la que había llegado a sentir algo.

“Él no la emocionaba, no sentía nada igual moría por él
Enfrascado en el suelo olvidó que en su cielo se vive mejor
No te fíes de mí, que no soy de confiar
-Él se suicidaba cada vez que lo dejaba por otra mujer-”

Una de esas tardes, se dio cuenta que quedarse llorando no era la solución; tenía que hacer algo para recuperarla. La llamó, le insistió y le volvió a insistir hasta que ella aceptó ir.

Cuando Rochi entró a su casa, Agus quiso besarla, pero ella se apartó. Se sentó enfrente de él, mirándolo muy seria. En su rostro se veían marcas de días de tristeza, combinados con drogas y poca comida.

Bueno y... ¿Qué querés decirme? –

Rochi yo... No puedo más sin vos... Sé que me equivoqué muy feo y lo admito, pero por favor, dame otra oportunidad, vos no sabés lo que es estar solo acá 

¿Para eso me llamaste? Mirá, yo puedo perdonar muchas cosas, pero una infidelidad me parece demasiado... Además, no fue una, fueron varias... ¡Fueron millones! ¡Te reíste todo el tiempo de mí! ¿Así me amás? –

No sé ni lo que estaba haciendo, Rochi por favor, yo no sabía lo que era no tenerte, y ahora que lo sé... No puedo soportarlo –

“Cuando vivas este infierno pensarás en volver
Ese día te dejo la vida rodar o morir
¿Para qué me has traído hasta aquí?
En un mundo de excesos, fronteras y rezos no cabemos dos”

A Rochi las palabras de Agus le parecían falsas, pero ese hombre tenía el don de provocar algo en ella que la podía, era su debilidad.

Creo que todos se merecen una segunda oportunidad... - suspiró la rubia - ¡Pero te llego a encontrar en algo raro de vuelta y te olvidás de mí! –

Confiá en mí... –

“¿Para qué me has traído hasta aquí?
En un mundo de excesos, fronteras y rezos no cabemos dos
Ella era una rockera, venía del '60 y sin religión.”

Agus se levantó de donde estaba sentado y corrió a besarla, sí que la había extrañado. En realidad no estaba seguro de poder cumplirle, y para dejarla tranquila le había respondido eso, pero se iba a esforzar para no perder de vuelta el amor de esa mujer, su mujer, esa rockera que se mostraba rea ante el mundo pero que sólo necesitaba un poco de amor, y eso solamente él lo sabía.

 En realidad no estaba seguro de poder cumplirle, y para dejarla tranquila le había respondido eso, pero se iba a esforzar para no perder de vuelta el amor de esa mujer, su mujer, esa rockera que se mostraba rea ante el mundo pero que sólo necesit...

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