Aidan
Miré a Ilan dormir plácidamente, sonreí al ver su cara y cómo sonreía levemente entre sueños; se veía muy lindo. Solté un pequeño suspiro y llevé mi mano hacia su cabello para acariciarlo suavemente. Él se acomodó un poco, acto seguido, se giró dándome la espalda, aproveché esto para acercarme aún más a él y abrazarlo, colocando mi mano en su vientre. Aún no me creía que Ilan me haya dicho que estaba embarazado, aunque sabía que no debería emocionarme mucho, aún debíamos ver el resultado del test de la clínica. Cerré los ojos obligándome a dormir, ya que, como si fuera un niño pequeño, no podía dormir de la emoción que sentía desde que recibí la noticia.
Al cabo de un rato, decidí levantarme de la cama. Ya casi eran las seis de la mañana y no había dormido absolutamente nada. Tampoco es como que me importara mucho, no sentía cansancio, aunque era muy posible que luego me la pasara como un zombie. Me dirigí a mi estudio y me senté frente a la computadora, entré al navegador, luego a YouTube para buscar algo que ver y me entretuviera hasta que Ilan se levantara.
Cerca de las siete y media de la mañana escuché a Ilan abrir de un portazo, no estaba seguro si la puerta del cuarto o del baño. A los pocos minutos se apareció por mi estudio, se recostó contra el marco de la puerta y me miró cansado.
—¿Aún quieres que hagamos las pruebas? Me he levantado así todos estos días, creo que esto es seguro —solté una pequeña risa—. Por cierto, no he traído nada. ¿Tienes un cepillo de dientes? —asentí rápidamente, me levanté y me acerqué a él.
—Buenos días —le besé en la frente—. ¿Has dormido bien?
Asintió sonriendo. Lo tomé de la mano y lo llevé hasta mi cuarto, me acerqué a mi clóset y busqué en uno de los cajones hasta dar con un cepillo de dientes nuevo.
—Ya no deberías traer tu cepillo, usa este cuando estás aquí —él tomó el cepillo con una sonrisa en los labios.
—¿Esto de verdad va en serio? —Esta vez fui yo el que sonrió, me acerqué más a él y posé mi mano en su vientre.
—Tiene que ir en serio —le di un corto beso—. Ahora, ve a prepararte.
Asintió devolviéndome el beso para luego dirigirse al baño. Por mi parte, comencé a sacar la ropa que usaría hoy. Después de hacerlo, saqué mi celular y busqué el número del enfermero que le haría el análisis a Ilan. Cuando lo encontré, le escribí rápidamente e igual de rápido recibí una respuesta positiva.
—Debo esperarte, ¿verdad? —escuché la voz de Ilan al tiempo que sentía sus brazos rodeando mi cintura por atrás, simplemente asentí tirando el celular en la cama.
—Deberás ir solo hasta donde te harán la prueba —me giré para mirarlo—. Dile a la recepcionista que quieres ver a Bruno Vlak. Es un buen amigo mío y dijo que me hará el favor de hacerte la prueba —él asintió—. Si te pregunta algo, no le digas que eres mi paciente.
—¿Tengo que fingir ser solo tu novio? —llevó sus manos hasta mis hombros—. Me gustaría llegar y decir algo como: "soy el novio del sexy doctor Zhang".
Me sonrió, noté que sus mejillas se ruborizaban un poco, pero su sonrisa algo socarrona no había desaparecido.
—Eso me gustaría —le sonreí también—. Ahora déjame alistarme, así nos vamos.
Me aparté de él, tomé mi ropa y me dirigí al baño. Me di una ducha rápida, me cepillé los dientes, me vestí y volví al cuarto. Ilan no se encontraba allí, así que, tomé mi celular y bajé.
—Ven, Aidan —me llamó desde la cocina, me acerqué a él recibiendo una taza de café, que tomé con una sonrisa en los labios.
Luego de desayunar, tomé mis cosas, las llaves de mi auto y mi abrigo. Ilan se abrigó también y se dirigió directamente hacia el garaje, lo seguí para abrirle la puerta del auto, me sonrió y subió. Me di la vuelta para subir del lado del conductor. Lo miré en cuanto me senté, él mantenía la cabeza baja con una de sus manos en su vientre, no pude evitar sonreír al verlo; parecía que él tampoco podía creer toda ésta situación.
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Broken Boy
Ficção Adolescente⚠️Mpreg⚠️ Un complejo de inferioridad, una cicatriz en el rostro, un maltrato continuo y él, el único faro de luz en la tiniebla de su vida. El único que es capaz de hacerle ver su belleza, de darle una nueva dirección a su vida, de darle una pequeñ...