Colder✅ [Libro 1]

10. Fuera de lugar

El hecho de casi todos nos estuvieran viendo, me ponía los pelos de punta. Esta gente lucía bastante extraña, en extremo perfecta, rozando la falsedad.

Cada rostro en el que posaba mis ojos tenía una expresión extraña, pero la que más me conmocionaba era la de Agniet.

—Tu hermana me mira como si quisiera matarme.

—Te ves mejor que ella, era de esperarse.

Lo miré con los ojos entrecerrados.

Era imposible verse mejor que Agniet, con su blanquísima e inmaculada piel que destacaba por su vestido azul, el mismo que se amoldaba a la perfección a su cuerpo. Tenía su largo y oscuro cabello rizado, recogido fuera de su cara para lucir sus brillantes e increíbles ojos.

No me malentiendan, soy bastante segura de mi misma, pero delante de ella yo era una chancla.

—Y hablando de cosas que no tienen sentido... —digo a Arion mirando a Elliot quien se acerca a nosotros medio tambaleando.

Iba de traje y se veía muy bien.

—Hola Anabelleee —y también estaba muy borracho.

Este chico tenía un serio problema con el alcohol.

—¿Te ha invitado mi hermana? —cuestiona Arion muy serio.

—Yo...sé lo suyo ¿Recuerdas? ¡Claro que estoy invitado!

Arrugué completamente mi rostro, Arion a su vez frunció el ceño y lanzó a Elliot una mirada muy intimidante.

—¿No tienes ganas de bailar Elliot? —dijo mirándolo fijamente.

El chico parpadeo antes de irse en dirección contraria e invitar a bailar a la primera chica que se cruzó en su camino.

—Cuanto poder de convencimiento —mascullo confundida.

Arion sonrió.

Y de vuelta me sentí extraña, estaba viendo expresiones y sonrisas raras en todas partes, incluso la de Arion me pareció un tanto desquiciada.

—Voy por algo de beber —dijo, giró y luego de pensarlo un momento y me miró de nuevo—. No hables con desconocidos.

Me pareció invasiva su orden, tanto como para replicar. Levanté una ceja, de repente me di cuenta de que sus ojos estaban muy distractores esta noche por lo que asentí antes de perderme en ellos.

Ya dado vuelta, fui repentinamente consciente de todas las miradas de nuevo, Evan y Kate no estaban, Agniet seguía disparando miradas envenenadas en mi dirección mientras hablaba con sus amigos.

Donde quiera que mirara era lo mismo, tal vez comenzaba a estar paranoica pero sentía esos ojos ver a través de mí, y comencé a hacer contacto visual y detallarlos; era tan confuso, miré a todos lados y solo veía ojos azules, me perseguían.