Shirley, la heroína de Teselia

Capítulo 3-Llegada a Cuidad Gres y el Solar de los Sueños

Tras su estancia en Pueblo Terracota, llegaron a la Ruta 2. De repente, y asustándolas un poquito, sonó el videmisor de Shirley. Era la Profesora Encina.

-¡Shirley! ¡Carelia! ¡Malva! ¿Dónde estáis?-preguntó apresurada.

-Acabamos de llegar a la Ruta 2-respondió Malva.

-Vale, vale, ¡no os mováis de ahí!-exclamó. Las chicas asintieron. Al cabo de unos cuantos minutos(no más de diez) la Profesora estaba allí.

-Muy bien chicas, antes de partir os quería decir una cosa muuuy importante. A partir de la Ruta 2 aparecerán Entrenadores y os retarán, y tendréis que luchar para poder ganar, pero no os preocupéis, si en algún caso perdéis tendréis que ir al Centro Pokémon y allí se curaran. No lo olvidéis. ¡Ah, otra cosa! Tengo un regalo para vosotras-les sonrió amablemente dándoles una bolsa-. Son unas Deportivas, una para cada una, bueno dos jeje.  Con ellas podréis correr mucho más rápido. ¿Hacia dónde os dirigís?

-La verdad es que no tenemos ni idea, no conocemos mucho el mundo fuera de Pueblo Arcilla-suspiró Malva.

-Yo pienso que Carelia no opina igual, ¿no es así?-sonrió la Profesora.

-Bueno... se podría decir que sí. Después de la Ruta 2 se encuentra Cuidad Gres-informó Carelia.

-Veo que con Carelia no os perderéis pero, por si acaso, os voy regalar otra cosita, es un Mapa, aquí podéis consultar todo lo que queráis saber sobre las ciudades, pueblos, y todo sobre Teselia. Sólo os puedo dar uno-dijo lamentándose un pelín-. ¿Quién lo llevará?

-¿Puedo ser yo?-preguntó Malva tímidamente.

-Claro-le dijeron sus amigas.

-Otra cosa, antes de iniciar un viaje tenéis que tener claro una cosa, ¿queréis combatir en los Gimnasios Pokémon?

-Yo sólo quiero acompañarlas y criar a los Pokémon, no quiero combatir en los Gimnasios-anunció Malva.

-No te preocupes, querida, no tienes por qué hacerlo. ¿Y vosotras que haréis?

-Creo... que yo tampoco combatiré. Quería salir de viaje para conocer los lugares de Teselia. Combatiré con quien me rete, pero no me gustaría combatir en los Gimnasios-dijo Carelia.

-A mi si me gustaría combatir, mi sueño es conventirme en la mejor Entrenadora de Teselia, y para eso tendré que ganar todas las medallas.

-Tranquilas chicas, si vosotras sólo queréis acompañar a Shirley no hay problema. Toma, Shirley. Es un Medallero, cuando colecciones las ocho Medallas podrás ir a la Liga Pokémon. Ya os he dicho todo lo que tenía que decir, así que, con esto y un bizcocho, me despido de vosotras-y se fue.

-Bueno... eh, creo que sería mejor que cada una llegara por su cuenta. Ya que tenemos objetivos distinto será lo mejor, ¿no?-propuso Shirley.

-Si tu quieres... está bien-dijo Malva-. Vamos Alana, y tú también, Sol-le dijo a su Lillipup(sí, a ella también le puso un mote).

-¿No crees que es mejor llevar tus Pokémon en sus Pokeballs?-le sugirió Carelia.

-No, prefiero que me acompañen mientras camino. Bueno adiós, voy a ver si capturo otro Pokémon-y salió corriendo Malva.

-Yo también me voy, tengo muchisímas ganas de ver Ciudad Gres.

Shirley se quedó sola. Bueno, sola no, tenía a sus amigos, Tepig y Lillipup. Decidió sacarlos de sus Pokeballs, pero solo hasta que un Entrenador la retó. Con muchos esfuerzos consiguió ganarle, a él y a otros dos más. Por el camino encontró una Pokeball y una Poción.

Al llegar a Cuidad Gres se encontró con Malva.

-Si que has tardado. Espero que hayas mejorado porque tendrás que vencerme a mí, Te reto a un combate. ¡Adelante, Alana!-le indicó a su Snivy-. ¡Látigo Cepa!

Ese golpe acertó a darle a su Tepig pero no le hizo mucho daño.

-¡Ahora, Tepig, Ascuas!-fue un ataque tan fuerte el Alana se debilitó.

-No pasa nada, pequeña, lo has hecho genial. ¡Adelante Sol, tu puedes! ¡Placaje!-fue un buen ataque pero Tepig logró esquivarlo-. ¡Placaje otra vez, Sol!-esta vez si consiguió darle y se debilitó. Shirley parecía algo decepcionada, quizá esperaba más de ella, pero eso indicaba que tenía que entrenar más.

-¡Vamos Lillipup, Mordisco!-ese ataque acertó-. ¡Otra vez, ataca, Mordisco!-Sol se debilitó-. Muy bien Lillipup-le felicitó.

-Flicidades, Shirley. Esta vez has conseguido ganarme, pero la próxima vez venceré yo. Me tengo que ir a entrenar a la Ruta 2.

-¡Espera!-exclamó Shirley-. ¿Sabes dónde está Carelia?

-Creo que esta en la Escuela Pokémon, puedes pasarte a ver. Pero también puedes ir al Gimnasio de Ciudad Gres. Llamáme por el Videomisor si me necesitas. Adiós.

"Iré primero a ver a Carelia" pensó la chica. Sus Pokémon volvieron a las Pokeballs y ella fue a Centro Pokémon para que Tepig se recuperara y se dirigió a la Escuela Pokémon. Allí la econtró.

-Hola Shirley, ¿capturaste a otro Pokémon?-la saludó sin retirar la vista de la pizarra.

-No, pero si se hicieron más fuertes.

-Yo capturé a un Purrloin, es super mono. ¿Te apetece combatir?

-Encantada de luchar contra ti.

Fue un largo combate, pero al final Shirley consiguió ganar, aunque por lo pelos, ya que tres contra dos fue duro...

-Toma, es un premio por haberme ganado-le dijo dándole unas bayas-. Son tres Bayas Aranja, curarán un poco la salud de un Pokémon si la come.

-Muchas gracias, tengo que ir al Gimnasio Pokémon, me serán útiles.

Antes de entrar al Gimnasio encontró una placa no muy lejos,en ella estaba escrito Solar de los Sueños, decidió entrar, pues tenía curiosidad por saber que se encontraba tras ese precioso nombre.

Decidió explorar pero no pudo llegar muy lejos porque el camino estaba bloqueado por un árbol no muy ancho, pero aún así no podía pasar. Tambien se enfrentó contra dos Entrenadores.

-Hola, ¿es la primera vez que visitas este lugar?-le preguntó una chica que estaba allí con una voz muy dulce.

-Sí-respondió.

-Es un lugar muy bonito, pero no hay mucho que ver. Por ser la primera vez, quiero hacerte un regalo.

-¿Un regalo?-preguntó extrañada, pues ese día la habían colmado de regalos.

-Sí, es un Pansage, te sera de ayuda.

-Gra-gracias-balbuceó algo incrédula-. ¿Estás segura de que quieres dármelo?

-Claro, es un placer regalar Pokémons-sonrió la joven chica.

-Bueno pues gracias de nuevo, me tengo que ir al Gimnasio Gres, chao.

Y se dirigió hacia el Gimnasio. Estaba en la puerta, algo insegura, no sabía si podría ganar, pero de lo que sí estaba segura era de que lucharía con todas sus fuerzas, al lado de sus Pokémons, para conseguir que sus sueños se hicieran realidad.

                                                                                                                                       CONTINUARÁ...