- ¿William?
- Sí, soy yo. ¿Esperabas la llamada de alguien más?
- No, no es eso, me sorprende tu llamada. Sabes de hecho estaba por salir con mis amigas.
- Mejor, estoy en el mismo lugar que nos conocimos ¿Por qué no nos encontramos todos aquí?
- Hablare con mis amigas primero.
- Esta bien, si deciden venir mándame un mensaje.
- Claro, nos vemos.
Al colgar la llamada me tire a mi cama se lo comentare a las chicas. Las veo entrar a mi cuarto como si las hubiese llamado con el pensamiento.
- ¿Quién te llamo Sasu? — otra vez con ese apodo feo.
- No me digas así. Era William me dijo que si nos podíamos ver. Pero le dije que tenía planes con ustedes y me dijo que se encuentra en el mismo lugar que lo conocimos.
- Bueno ¿Y que esperamos? Arreglémonos rápido o si no se hará más tarde.
- ¿Están de acuerdo? Pensé que sería noche de chicas.
- Es una salida casual.
- Está bien, en marcha — responde Rach.
Nos comenzamos a arreglar muy rápidamente Clarissa alias Rissa, si un apodo muy "ingenioso" de mi parte, pero Sasu no es mejor. No sé de donde ella saco ese apodo tan raro. Ya que, ella y Rachel irán vestidas con unos lindos vestidos que hacen que se vean espectaculares.
Yo por mi parte escogí algo más cómodo. Unos pantalones de mezclilla negro acompañado con un top blanco con unos botines de tacón negros también.
Ya una vez listas salimos de casa despidiéndonos de mi madre prometiendo no volver muy tarde. Nos adentramos al Uber ya que no quisimos tomar un taxi, camino al bar le mando un mensaje a William. Quería llegar de sorpresa pero no quería que nos viéremos como tontas por no saber en dónde se encontraba.
Una vez ya en el bar busco con la mirada a William a lo largo lo veo riendo y charlando con unos chicos que ante mis ojos son unos desconocidos.
- Hola William —saludo una vez llegamos hasta ellos. De inmediato las risas cesan y tres pares de ojos nos observan de arriba asía bajo.
- Sandra, que bien que llegaron —William se acerca a saludarme, luego a las chicas. Sus amigos se levantan a saludarnos. William nos presenta a sus amigos llamados Liam y Lucas. Que comerán estos chicos de ahora que se ven tan guapos.
Pedimos unos tragos para ir entrando en ambiente mientras conversamos. Ese Lucas es muy malo con los chistes, pero sí que da gracia ver las expresiones que hace.
- ¿Quieren bailar? —Pregunta Liam. Clarissa y Rachel levantan la mano rápidamente.
Con William nos quedamos conversando una vez los chicos se fueron a la pista de baile.
- Te dije que nos veríamos pronto —Dice William bebiendo un poco de vaso.
- Si, veo que cumpliste. Oye no quiero sonar metiche pero ¿En que trabajas?
- ¿Por qué? Te gusto verme formal. Note como me mirabas eh — bromea al respecto.
- Claro que sí. ¡Me fascinaste!—le sigo la broma. Ambos reímos.
- Bueno respondiendo a tu pregunta. Todavía no trabajo. Sigo estudiando pero mi padre quiere que vaya adquiriendo conocimiento del mundo empresarial.
- ¿A qué se dedica?
- Mi padre empezó con un súper mercado muy pequeño. Cuando se casó con mi madre ellos hicieron magia juntos. Y ahora tienen varios de ellos por el país.
- Que bonito. Ahora tú llevas esa tradición.
- Sí, quiero dar lo mejor de mí. Aunque a veces es estresante hay que estar pendiente de todas las sucursales del súper mercado. Imagínate son siete. Mi padre está pensando en asociarse para expandirse.
- Tú puedes hacerlo William. Espero que sigan teniendo mucho éxito, no es fácil llevar esa carga en los hombros. Pero nada es imposible.
- Gracias por tus palabras Sandra, son como una recarga de energía para mí —al decir eso sonríe he imito su acción.
- Estoy muerto —Lucas aparece muy cansado junto a Liam —Tu amiga, Clarissa ,si le encanta bailar ¡No para! – suelto una risa porque sé que es verdad, Clari ama bailar.
- ¿En dónde dejaron a mis amigas? —cuestiono ya que no las veo con ellos.
- Cuando terminamos de bailar dijeron que irían un momento al baño —Liam responde a mi pregunta.
Veo a las chicas apareces con unos tragos para todos. Con William bailamos un par canciones mientras platicábamos un poco más. Le conté en que trabajo y el muy baboso me dijo que cuando me aburra de este trabajo que el con gusto me acepta como su asistente personal.
Los chicos se ofrecieron a llevarnos luego de un rato, así que nadie más sigo bebiendo. William manejo, ya que fue el que menos bebió. Una vez llegamos a mi casa nos despedimos prometiendo volver a salir cuando podamos de nuevo.
...
Ha transcurrido una semana llena de trabajo. Solo faltan dos semanas para el evento, me siento algo nerviosa. Rach me explica todo con lujo de detalles acerca de todo eso. También nos hemos encargado de proporcionarles algunas cosas para el evento. Decoración, comida, etc.
- ¿Ya has pensado que usar para el evento? – la pregunta de Rachel hace que despegue mis ojos de la computadora.
- Nopi – la risa de Rachel se hace presente por mi infantil respuesta —Quiero que tú y Clarissa me ayuden.
- Bien, tendremos todo este fin de semana para escoger los vestidos. Ve pensado en algo que te gustaría usar, para que más o menos tengas una idea en mente.
- Sipi — a veces se me sale lo infantil —Como tenemos mucho trabajo ¿Qué tal si comemos aquí en la oficina? – propongo.
- Me parece bien. Pide unas ensaladas con pollo, aguacate y almendras — la miro con cara ofendida.
- ¿Ensaladas? Pensé que pediríamos pizza con triple queso.
- Deja de comer eso. Esas ensaladas son deliciosas. ¿No quieres entrar en el vestido? Abstente de esas comidas aunque sea por estas dos semanas restantes.
- Está bien Doña saludable, pediré esas ensaladas — ella ríe mientras sigue trabajando en la computadora.
Sí que Rachel tenía razón. Están deliciosas me gusta que tenga mucho aguacate y las almendras le dan ese toque delicioso.
Seguimos trabajando el resto del día y preparando algunas cosas más del evento ya que será en unos de los hoteles que tiene asociado el jefe árabe con el Italiano Alessio D'agostino.
Así que todo debe de quedar muy impecable esa noche.
Hoy se cumple un año desde que publique la historia. (13/10/2019)
Estoy muy agradecida por el apoyo que le han brindado a mi historia. 🖤
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Mi Amor Árabe
RomanceJamás imagine que todo esto me iba a pasar a mí, o al menos no me lo esperaba de esta forma. Conocer lo a él, jamás imagine el cambio que iba a dar mi vida, pero ni en mis más locos sueños. La vida nos tiene guardad una sorpresa, conocer lo a él...