𝗧𝗛𝗘𝗥𝗔𝗣𝗬 ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏ

Capítulo 22

Quinto Mes

TaeHyung había dejado las terapias.

JeongHan lo miraba mientras éste colocaba ropa en una valija grande.

—TaeHyung...

—No basta, estoy cansado.

JeongHan suspiró y se sentó en la cama mirándolo con una expresión de tristeza al pelinegro que cruzó miradas con él y este apretó sus labios mirando al suelo diciendo.

—Yo también estoy cansado de decirte que esta no es la solución.

—Sea o no la solución, yo no puedo estar cerca de JungKook y necesito que entiendas eso.

Cerró la valija mientras colocaba las últimas cosas en su mochila y se dirigía hacia la entrada de la casa que tantos años había compartido con JeongHan. Este lo seguía por detrás y TaeHyung trató de girar el picaporte pero no lo logró porque JeongHan tomó su muñeca enojado y lo hizo voltearse mientras se ponía frente a él obstruyendole el camino.

—No voy a dejarte salir por esta puerta.

TaeHyung dejó a un lado la maleta y despeinó su pelo frustrado, debía mantenerse firme en su decisión y dejar a JungKook hacer su vida. Desde que lo vió sonreír en la cafetería supo que debía dejar las cosas como estaban, que si lo recordaba ya daría igual ya que él no estaría allí para él, porque cuando recuerde todo le dirán que él fue quién lo atropelló y lo odiará. Para luego que declare y que está vez salga TaeMin de presión ahora que se enteró que sobrevivió y él viva una vida en la prisión, y quizás estaba exagerando pero así se sentía.

Se sentía tan culpable que le dolía.

Entonces el pelinegro solo cerró los ojos mientras sonreía derrotado nuevamente por los sentimientos, no podía ocultar que todo lo que se tratara de JungKook lo volvía indefenso totalmente. Le torturaba el alma recordar el accidente, la sangre...

—Te dejaré ir, pero con una condición.

TaeHyung abrió los ojos esperanzado y tomó su maleta nuevamente mientras veía a su amigo salir de enfrente de la entrada.

—Te escucho.

—Cuando JungKook recuerde todo, quiero que estés allí presente. Le dirás que estás enamorado de él y dependerá de ti si te vas o te quedas, no lucharé esa vez para que te quedes.

TaeHyung miró al suelo y apretó sus puños de la impotencia. Le estaba pidiendo algo arriesgado, ya que JungKook podría recordar todo mañana, el mes que viene o en 30 años y él tendría que estar allí presente para cuándo lo haga.

—Lo haré.

JeongHan sonrió y se acercó a su amigo abrazándolo delicadamente.

—Te voy a extrañar, porfavor come bien y mantente sano.

El contrario sonrió mientras contenía la respiración por el remolino de sentimientos en su estómago. Dejar a su amigo aquí le podría triste pero debía hacerlo por el bien de JungKook.

TaeHyung salió de la casa y JeongHan cerró la puerta despacio, vió como su amigo desaparecía de su campo de visión, miró el papel y sonrió.

Tomó su móvil y marco su número.

—Sé que ha pasado mucho tiempo, pero necesito que me hagas un favor...