Capitulo 18

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ADELINE POV.

 Tuvimos clase de vuelo con Ravenclaw, yo estaba fascinada, en cambio mis hermanas no tanto. James era capitán y un chico de Ravenclaw era otro, se suponía que debíamos mezclar ambas casas, ni idea... yo fui a parar al equipo de Potter.

 -Cuando toque el silbato comenzaran a jugar- anuncio Madame Hooch.

 El silbato sonó y ella arrojo la Quaffle, rápidamente la tome en el aire y comenzamos el partido. Se la pase a mi Lance y así simultáneamente, una típica estrategia para distraer a los demás. Cuando estuve más cerca del aro tire y anotamos diez puntos.

 Así pasamos el rato, varias bludgers fueron lanzadas y nos pateábamos por la Quaffle, excepto Jenna, ella solo les gruñía a los demás, era genial cambiando su boca por la de un tigre. Íbamos 110 a 90, Gryffindor ganaba por veinte puntos. Me pasaron la Quaffle y un chico de Ravenclaw trato de quitármela, hice un movimiento raro en el cual quede volando boca abajo como un koala. Luego acelere y di vueltas en espiral hasta anotar otro tanto.

 -¡Buen tiro!- grito Annabeth sobre su escoba.

 -¡¡Cuidado!!- le avise.

 Pero fue tarde, un chico paso volando muy de cerca e hizo que la rubia se tambaleara perdiendo el equilibrio. Cayó de espaldas y choco contra el suelo, bajamos a toda velocidad, estaba bien, solo que inconsciente.

 -¡¡Ya vuelvo!!- dije a James.

 Monte mi escoba y salí disparada al castillo, volé por el lado de afuera la sala de transformaciones hasta que la encontré. Me pare en la ventana haciendo señas a Cory. Éste codeó a Travis quien me miro confundido y con los labios module algo así como "Annabeth está en la enfermería, cayo de la escoba". Mi hermano abrió los ojos como plato y salió de ahí corriendo.

TRAVIS POV.

 Salí corriendo de la sala como alma que lleva el diablo, mientras lo hacía gritaba cosas como "Fuera de mi camino malditos imbéciles", "Abran paso", "A un lado".
Llegue a la enfermería jadeando y todo sudoroso, la busque hasta que encontré a una chica rubia, de Ravenclaw, con una venda y sus hermosos ojos cerrados. Me acerque a ella tomándola de la mano, esperando alguna respuesta, pero nada.

 Pasó una hora y nada, seguía silenciosa, como cuando leía libros muggles.

 -Hola- dijeron detrás de mí.

 Un chico de cabello rubio, ojos verdes, alto y flacucho, traía una caja de ranas de chocolate y un ramo de margaritas, aunque hubiesen sido mejor las rosas.

 -¿Quién eres?- pregunte.

 -Jake Falken, soy su compañero, traje esto para ella, es una forma de pedirle disculpas por haberla chocado con mi escoba.

 -Así que tú fuiste...

 -Fue un accidente, no la vi- dijo defendiéndose y me entrego las cosas- dile que son de mi parte cuando despierte.

 -Seguro- respondí.

 Luego de que ese tal Jake se fue Annabeth despertó y salte de alegría.

 -¡Annie, amor! ¿Estás bien? ¿Te duele algo? ¿Cómo te sientes?- dije atropelladamente.

 -Trav tranquilízate, estoy bien- sonrió- pensé que tenias clase...

 -Aun las tengo- respondí- Adeline me aviso que estabas aquí.

-Irresponsable ¡Deberías estar en clase de pociones en este instante!- gritó y luego se llevo la mano a la cabeza.

19 años despuésDonde viven las historias. Descúbrelo ahora