19 años después

Capitulo 20

PRISCILLA POV.

Bajé a desayunar cuando choque con alguien, genial, los Hearts tenemos la costumbre de chocar con las personas.

-Fíjate por dónde vas, imbécil- dije sin levantar la vista.

-Hola Price- saludó Scorpius.

-Oh, lo siento rubio.

-No importa, ¿A dónde ibas?

-Al Gran Salón- contesté.

-Te acompaño- sonrió.

Llegamos juntos mientras hablábamos animadamente; me senté junto a Albus, quien comía muffins. Pero en ese preciso instante vi como Lance hablaba con una Hufflepuff, se reían y sentí como me ardía la cara de furia.

-Ceeelooosss- canturreó Al.

-¿Qué? No, para nada- respondí indiferente.

-Hola Priscilla- saludó el castaño.

-¿Qué pasa, canuto?

-Oh, nada... me preguntaba... ¿Quieres ir a dar un paseo conmigo?- puso su sonrisa de arrogancia y yo sonreí.

-Antes, beso al calamar gigante.

Albus echó una carcajada ahogándose con su comida. Me levanté bruscamente y caminé hacia la sala común. No quería saber nada de ese tonto. Me encontré a una Hufflepuff demasiado alegre.

-Hola- saludó.

Era alta, de cabello morocho, ojos verdosos, flaca y con piel pálida que dejaba notar sus pecas en la nariz.

-Hola- contesté sonriendo.

-Soy Lisa- se presentó, yo lo iba a hacer cuando habló antes- ya sé quién eres, Priscilla Heart, mis amigos y yo estamos avisando que habrá un baile de fin de curso para todo el colegio.

-¿Ustedes pensaron en ello?

-Sí y será genial.

-¿Y necesitaré pareja?- ella asintió mientras yo bufaba.

-Tranquila, escuche un rumor de que Lance Whitmore te invitará- me guiñó un ojo y se fue felizmente dando saltitos.

¡Ja! Claro, yo no aceptaría ni loca, como dije antes y repetiré, antes beso al calamar gigante. Seguí mi camino hacia la sala común donde encontré a Adeline y fuimos juntas a historia de la magia.

-¿Te avisaron sobre un supuesto baile?- pregunté.

-Sip, será en 24 días- contestó.

-Irás con James ¿No?

-No lo creo, él no me invitó...

-Aún- canturree.

Llegamos a clase junto con Ravenclaw. El profesor aburría y me hacia babear la mesa. Comencé a cabecear de vez en cuando, pero gracias a mi hermana no me dormí. Escuché unos ronquidos de un par de mesas detrás de nosotras; me giré y vi a un James ya con los ojos bizcos y a un Lance apoyado en su mano con los ojos cerrados. Arrugue un papel y se lo tiré a la cabeza, él se despertó más rápido de lo que puede decirse Quidditch. Me tapé la boca conteniendo la risa mientras él miraba a todos lados.

-¿Fuiste tú?- le preguntó a James.

-¿Qué? Eh... no- contestó.

-¿Lunático?