Gotas de amor, sexo y mentiras (Yaoi)

Capítulo 3. La peor suerte del mundo

Ya han pasado seis días desde lo que ocurrió en el deportivo con Drake. Por suerte, el profesor se lastimó y tuvimos toda la semana libre y la escuela aún no había iniciado así que no vi a ese pervertido durante un largo rato.

Sin embargo, mis vacaciones ya se habían terminado y tenía que ir al colegio. Me desperté temprano porque no quería llegar tarde en mi primer día, así que me di una ducha rápida y me vestí con prisa. Tomé el auto de mamá y conduje hasta la Preparatoria. Bajé del auto y corrí hacia mi salón, ya que llevaba cinco minutos de retraso. Llegué sudoroso al enorme salón donde varios alumnos me miraron expectantes, y gracias a Dios el profesor aún no había llegado. Intenté calmarme y caminé lentamente hacia el primer asiento desocupado que vi.

Estaba tan absorto en mis pensamientos que no sentí la mirada de alguien detrás mío. Hasta poco después lo noté, pero al voltearme no vi a nadie. Dos minutos después entró el profesor de Literatura y empezó con su clase. Todos se fueron levantanto uno por uno para presentarse. Sin embargo, yo no lo hice y algunos más tampoco; lo considerábamos cosa de niños de primaria. Entonces un último chico se levantó, y cuando voltee a verlo me quedé helado de la sorpresa.

-Me llamo Drake Nickel, un gusto profe.

¡Maldita sea! no puedo creer que luego de evitarlo una semana entera de pronto solo me lo encuentre en mi salón. Tengo la peor suerte del mundo.

El profesor notó que ya eran todos así que empezó a explicar su manera de trabajar. Estaba ya embelesado cuando escuché que el profesor decía algo de un trabajo importante de inicio.

-Este trabajo lo deberán hacer en parejas -todos empezaron a hablar y a sonreirse, obviando que querían formar sus parejas hasta que el profesor los interrumpió. -Parejas que por cierto, yo voy a formar.

Todos se quejaron al mismo tiempo, pero al profesor no le importó. Tomó su lista de asistencia y empezó a nombrar a dos alumnos para formar los equipos; seleccionaba uno de arriba y uno de abajo. Yo era casi último por estar más o menos en medio; moría de ansias por saber con quien trabajaría. O al menos moría de ganas hasta saber quien realmente me tocó.

-Arthur Hiroshi y Drake Nickel.

Maldije mi mala suerte y tuve ganas de que me tragara la tierra. Drake me miró con una sonrisa inocente, una que nunca había visto desde que lo conocí. Me miró con ternura y sonrió a las anchas. El profesor continuó nombrando parejas hasta que la lista concluyó.

-Bien, ya estan las parejas formadas. Ahora pónganse de acuerdo.

Todos empezaron a acercarse con quien habían hecho pareja y yo me quedé en mi lugar, encogido, con ganas de morirme. Drake se acercó a mí con una amable sonrisa, saludando con una mano.

-Hey, Arthur, ¿qué tal?

-Hola Drake -saludé cortante. Realmente no tenía ninguna gana de hablarle por lo que me había hecho. Sin embargo, el se mostró indiferente, como si no lo recordara.

-Y bien, ¿qué haremos para el trabajo? si quieres yo puedo hacer la parte teórica solo, y juntos podemos trabajar en el modelo tridimensional. ¿Te parece?

Asentí distraido, sin estar escuchando realmente. Drake sonrió como un niño y me dio una palmadita en el hombro. Empezó a hablar de no se qué (supongo yo que me estaba dando ideas para la maqueta) pero yo no lo estaba escuchando. Repasaba una y otra vez en mi mente el momento en el que nos encontramos en la ducha, y todo lo que ocurrió después. Drake me preguntó algo, y de nuevo, asentí por pura inercia. Entonces salí de mis pensamientos cuando vi que Drake se estaba levantando.

-Bien, lo haremos en tu casa. ¡Hasta mañana, no se te olvide comprar el material!

Drake se levantó y volvió a su asiento. Yo me quedé confundido, ¿a qué demonios había accedido? ¿llevaría a Drake a mi casa para "hacer un trabajo"? maldita sea, realmente debería poner más atención cuando me hablan... tengo la peor suerte del mundo. Miré mi horario y descubrí que tenía solo una clase ese día, por ser el primero. Salí de la escuela y estaba dirigiéndome a mi auto cuando me fijé que Drake estaba sentado en la acera, moviendo los dedos de manera extraña en el aire con los audífonos puestos. Parecía estar tocando un instrumento invisible. Quería saber qué estaba haciendo, pero no quería acercarme a él. Decidí ignorarlo y subí al auto de mamá. Arranqué y a los dos metros, el auto se paró. Maldije cuando me di cuenta de que me agoté la gasolina y olvidé llenarle el tanque.

Bajé del auto y me paré en la calle para esperar un autobus que me dejara cerca de casa. Entonces Drake se me acercó y me tócó el hombro.

-Hey, ¿necesitas que te lleve?

-N-No gracias... esperaré el autobus.

-Es muy temprano tonto, no pasarán autobuses a esta hora. Anda, te llevo.

NOTA: Uhhh las cosas se ponen candentes con Drake el sensual y Arthur el uke mas uke del mundo 7u7 XD con que trabajo en casa de Arthur eh ( ͡° ͜ʖ͡°) con resultados sexuales (?) Mañana prox capítulo!!