Euforia (Vhope/Hopemin, Yoonkook, Namjin)

27. Malas noticias

[Jimin]

Estuve toda la noche en un rincón de la habitación donde tenían a Hoseok, esperando a que despertara, pero no lo hizo. Los señores Jung y Jiwoo me habían pedido que fuera a descansar, pero no quise irme, ya que sabía que no estaría mejor estando lejos de él, yo necesitaba estar para el momento en que despertara y le dieran la mala noticia.

Por la mañana, salí un momento al baño, donde me permití llorar un poco y luego salí y compré un café, queriendo mantenerme despierto. Había visto a mis padres por la madrugada, y me habían dicho que Yoongi ya había despertado, lo cual ya era algo bueno, pero aún no había querido ir a verlo.

Esperé un rato solo, en la sala de espera, sin saber qué hacer. Lo cierto es que era agobiante estar en aquella habitación, viendo a Hoseok como si sólo estuviera durmiendo. Él tenía algunas cortadas pequeñas en el rostro y un moretón en la frente, así como una gasa en una mejilla. Me mataba lentamente verlo en aquella camilla, aunque sabía que todo empeoraría cuando despertara, y eso era lo que me daba miedo.

—¿Qué tal la noche? —me preguntó Jungkook de pronto, sentándose a mi lado.

—Una mierda —solté sin más, mirando al frente.

—Se nota —dijo, como si no tuviera más qué decir.

Nos quedamos callados por un momento, y entonces sentí que tomaba mi mano y entrelazaba sus dedos con los míos. Le regresé levemente el apretón de manos, sin verlo todavía. Lo cierto es que aún no olvidaba que él sabía acerca de mi secreto, y me pregunté cómo es que podía seguir a mi lado como si nada.

—¿Cómo está Yoongi? —pregunté, queriendo romper la tensión en la atmósfera por un momento.

—Él está bien —respondió —. Preguntó por Hoseok. No pude decirle la mala noticia.

—¿Cree que todo está bien? —cuestioné con el ceño fruncido, mirándolo.

—No supe cómo decirle que el accidente se había llevado los sueños de Hoseok —respondió, mirando al suelo —. No sé qué pueda pasar si sabe la situación por completo.

—Tendrá que saberlo en algún momento —le dije —. Es duro, pero sea como sea, no es él quien se lleva la peor parte. Aún tengo miedo de que Hoseok despierte y lo sepa.

De sólo pensar en ello un nudo se anidaba en mi garganta.

—Eso lo sé —me dijo —, pero Yoongi se culpa por lo que pasó. Si sabe que Hoseok perdió las piernas podría ponerse como un loco histérico. No sé si podré con eso.

Volteé a verlo y supe que ambos estábamos igual con las situaciones. Todo esto era un desastre y ninguno de los dos parecía tener idea de cómo proceder al respecto. Era algo totalmente nuevo para mí, a pesar de haber estado en la situación de esperar en el hospital por alguien. Jamás había tenido que lidiar con una noticia tan mala y nefasta como esa. Casi sonaba como una broma de mal gusto, pero desgraciadamente era real.

—Él también ha preguntado por ti —me dijo de pronto, después de un momento en silencio —. Quizás sea bueno para él si vas a verlo. Somos la única familia que tiene por ahora, me gustaría que él pudiera ver que también estás aquí por él.

Yo miré a Jungkook al escuchar su voz llena de tristeza y supe que le frustraba y dolía la situación de Yoongi. Suponía que me sentiría igual si fuera el caso de Hoseok, y decidí hacer lo que me pedía, a pesar de lo cansado que estaba. Quizás podía resistir un poco más antes de que mi máscara de tranquilidad decayera por completo.

Dado que accedí, ambos nos dirigíamos a la habitación donde estaba el chico, tomados de la mano. Me sentía un poco nervioso, ya que temía que de alguna u otra forma él descubriera que algo iba mal en todo esto. Sabía lo explosivo y problemático que todo podría tornarse después de que Yoongi supiera la verdad, por lo que entendía las razones de ocultárselo. De alguna forma era para protegerlo de sí mismo.