Secreto

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–Ok, beruhige dich (Ok, tranquilízate)– tomó Austria sus manos –Was ist passiert? (¿Qué pasó?)–.

–Era él– lloró –Quiso hacerme daño– se apoyó en su pecho.

–Sprechen Sie ... Spanisch? (Estás hablando... ¿Español?)–.

El latino se sobresaltó, carajo, no había pensado en una excusa para su idioma.

–¿Español? Esa siempre ha sido mi lengua ¿No?– fingió demencia –¿No?–.

Austria guardó silencio un momento –Ich werde 911 anrufen (Llamaré al 911)–.

El menor asintió, con suerte su plan tendría éxito, sólo tendría que paciente e inteligente.

Lo llevaron a la habitación de Italia. Se recostó en la cama. No pudo evitar dejar escapar una sonrisita, hace años no dormía sobre algo tan cómodo; se sentía como en un palacio. Fue al baño. No tenía ganas de orinar, pero le emocionaba volver a tener servicio de agua. Se paseó por el closet, al fin tendría más de un cambio.

–Mex, eres todo un genio– se dijo a él mismo.




–Señor, ha habido uno más– entró un tricolor a la sala.

El mayor soltó un gruñido.

Acercó el cigarrillo a su boca, sin embargo no pudo fumar nada, no se sentía merecedor de hacerlo, ya habían pasado 3 años desde el primer ataque y aún no lograba ningún avance, tal vez una que otra imagen borrosa, pero no tenía caso tenerlas si no podían encontrarlo por ningún lado.

–¿Se encuentra bien, señor?–.

–Что если я чувствую себя хорошо? (¿Qué si me siento bien?)– lo miró el mayor –ВЫ ВИДИТЕ, ЧТО Я ХОРОШО!? (¿¡TE PARECE QUE ESTOY BIEN!?)– gritó.

El de las estrellas dio un brinquito –Discúlpeme, señor URSS– masculló.

El contrario suspiró –Нет, вы извините меня, Венесуэла, за то, что не заставили вас жить в безопасном городе (No, tú discúlpame, Venezuela, por no lograr que vivas en una ciudad del todo segura)–.

–No se preocupe, jefe, algún día lo atraparemos y cuando eso pase...

–UdSSR (URSS)– entró Third Reich a la sala –Wir haben gerade erhalten... (Acabamos de recibir...

–Отец! Мы получаем звонок от 911 (¡Padre! Recibimos una llamada del 911)– interrumpió su hijo.

El alemán le lanzó una mirada asesina.

–Россия Сколько раз я говорил вам, что вы не можете войти в эту комнату, не касаясь? (Rusia ¿Cuántas veces debo decirte que no puedes entrar a esta sala sin tocar?)– habló URSS.

–Извините, отец, я говорю, босс (Lo siento, padre, digo, jefe)– suspiró.

–Einer konnte fliehen (Uno logró escapar)– hablo Third Reich.

–Что? (¿Qué?)–.

–Imposible– murmuró Venezuela –¡Esto es fantástico!–.

–Как называется? (¿Cual es el nombre?)– preguntó URSS.

–Italien–.

Doppelganger ◇Rusmex◇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora