-Hoy te vi muy platicador con mi abuela, ¿Qué traman ustedes dos?
Frederick y yo caminábamos juntos por el césped verde del palacio.
-Solo estábamos hablando cosas de estado.
-Si, claro, eso pudo haber sido después del desayuno, pero no antes. ¿Qué traman?
-Hemos platicado sobre en algo que nos interesa a los dos.
-¿Qué es?
-Una escultura magnífica, los dos hemos acordado en dar el aviso a ambas naciones cuanto antes. - Hablaba como si de un trofeo se tratase.
-¿Qué estas diciendo? - Lo miré confundida.
-Tu abuela me ha dado el permiso de anunciar nuestra relación.
-¿Qué estas diciendo? - Me pare en seco.
El avanzó unos pasos más, al no notarme a su lado se detuvo y se dio la vuelta.
-Lo que has oído ya no tendremos que escondernos. - Se acercó tanto que su aliento me golpeó la cara.
-¿Sabes que significa esto?
Me tomo el rostro entre sus manos.
-Que por fin podré decirles a todos que te amo con locura.
Lo miré fijamente algo me debía decir que era mentira, esto no podía ser, el y yo no podíamos tener una relación seria.
-Quítame las manos. - Por el rabillo del ojo noté que el personal se había detenido a observarnos.
-¿Qué? - Su semblante era de confusión.
-Nos están viendo, quítame las manos. - Pronuncié entre dientes.
-Vale, lo he entendido. - Bajo sus manos - No te ha caído la noticia.
Mire al personal y estos rápidamente se pusieron en marcha de nuevo en sus actividades, al parecer pensaban que no habían sido pillados.
-No es eso. - Lo jale del brazo para seguir caminando. - Entiéndeme, yo te dije que esto era lo que no quería.
-¿Qué no querías?
-Que nuestra relación fuera anunciada al público, ¿Te estas dando cuenta de a lo que nos enfrentamos? Frederick esto en muy poco tiempo será la bomba y ambos lo sabíamos y habíamos acordado algo ¡Por el amor de dios!
-Yo no le veo complicaciones, ¿Acaso no te importa nuestra relación?
-Claro que me importa y por eso te dije que lo mantuvieras en secreto, en cuanto ambos supiéramos que esto iba para más.
-¿Por qué esperar tanto? Eva en verdad que quiero todo contigo y hemos estado juntos por cinco meses, yo digo que ya es el momento.
-No Frederick, no sabes de lo que hablas, las cosas no son así. ¡Nosotros somos la realeza! No plebeyos, entiéndelo. - Comenzaba a frustrarme.
-No sé cual es la diferencia, ¿El poder?
-No, Frederick, cuando esto llegue a oídos de la prensa asociarán ambas casas y dirán que ya pronto habrá boda y la verdad que no quiero ver anuncios con mi rostro por todas partes, aún no pienso en boda tan siquiera.
-No te entiendo Eva, dices quererme, pero ¿No quieres hacer pública nuestra relación?
-Frederick, te quiero y en verdad que me gusta tu compañía estos cinco meses lo he pasado fenomenal, pero no quiero a la prensa detrás de mí y mucho menos que ahora quieran juntar nuestras agendas para que ellos tengan fotos y ambas casas salgan beneficiadas, no quiero que asociasen a mi familia como si el propósito fuera casarnos a mi hermano y a mí con futuros reyes.

ESTÁS LEYENDO
Reglas del juego.
Ficção AdolescenteSegunda parte de "¿Jugamos?" A veces la vida nos pone obstáculos para saber que tan fuertes somos, algunos duelen y otros simplemente nos dejan un raspón que se cura fácilmente. Esta vez a Charlotte le dejaron el corazón hecho añicos. Durante su a...