MÍA

James

Lunes. Un día más que el demonio se encontraría con su amada. Presentía que hoy sería diferente. Algo nuevo entraría en su vida. Sabía que Kara estaría aun enfadada con ella y con su hermana, fue arriesgado hacer lo que hizo pero sabía que si quería ganarse a Kara lo más "moralmente correcto" tenía que ganarse el cariño de su hermana también. Nada más oír la pregunta de si sus padres la hicieron de lado por ser homosexual, su cabeza hizo clic. Alex era lesbiana. Lo ocultaba tan bien que ni siquiera me di cuenta antes. Por eso intente crear un lazo con ella. Como presentí, nadie sabía que le gustaban las mujeres, y seguramente tendría miedo de confesarlo así que me hice la "buena" con ella. En el fondo me importa poco, ni siquiera es hermana real de Kara.

Salí de la cama y me puse una ropa provocativa. Podría darle celos a través de su hermana.

Al bajar las escaleras me encuentro a Octavia ya vestida sacándole la correa a Lilith que se abalanzo sobre mí dándome lametones en la cara.

-Vaya que madrugadora-

-No pude dormir muy bien-

-Por cierto...- Una mirada coqueta se dirigió a mí. –¿Que paso la noche de la tormenta?-

-¿Has oído alguna vez, la curiosidad mato al gato?- Kieran dejo a Lilith en el suelo. Unos pasos bajaban por la escalera y de allí apareció una Raven bostezando y tropezando con el último escalón. Octavia la agarro antes de que fuera al suelo.

-Gracias...-

-No hay de que...- Se miraban a los ojos y ninguna parecía importarle que Kieran estuviera allí plantada mirándolas directamente.

-Octavia tenemos clase. ¿O prefieres quedarte?-

-Nono...voy- Aparto la mirada a desgana.

-Ah... ¿Raven?-

-¿Si?-

-¿Tienes carnet de coche?- Pregunto la ojinegra cogiendo dos llaves del cajón de la entrada.

-Si...- Por poco no alcanza a coger las llaves que le fueron arrojadas. -¿Qué es esto?- Miro las llaves durante un rato viendo el símbolo de Ferrari.

-Estas becada por mí. Te he comprado un coche.-

-¿Qué?- Siguió mirando el llavero sin creerse nada. ¿Aún estaba dormida y estaba soñando?

-Acompáñanos un momento- Así lo hizo. Al salir de la cada vio dos Ferraris idénticos aparcados delante de casa, lo único que cambiaba era el color. Uno rojo y el otro blanco.

-El tuyo es el blanco- Dijo alejándose. Octavia le cerro la boca a Raven riendo.

-Espero que te guste el blanco- Dijo guiñándole el ojo y subiendo al asiento copiloto.

-¿Qué?- Su pregunta fue al aire ya que Octavia y Kieran se habían puesto en marcha rumbo a la universidad.

Bajando las escaleras del aula sentía todos los ojos mirándole el culo, en el fondo le gustaba causar esa sensación. Dejo su bolso en la silla y se sentó en la mesa. Pasó una ojeada por el lugar y sus ojos cayeron en la localización de la rubia. Estaba en tercera fila al lado de un chico que jamás había visto. Alex en cambio estaba en la primera fila mirándola fijamente. Algo no le gustaba, había un espesor en el aire que parecía que era la única que lo notaba. Se quitó la chaqueta y la dejo detrás.

-¿Traéis el comentario?- Ante el asentimiento de algunos y los ruidos de bolígrafos marcando los papeles a toda prisa prosiguió. –Kara- La aludida la miro con alegría pero en una milésima de segundo su mirada cambio a enfado. –¿Me eres tan amable de recogerlos por mí?-