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Al día después de lo ocurrido con sus padres, Taehyung decidió enfocarse en lo que se había prometido: controlar su parte alfa, por lo que al llegar de la escuela se encerró en su cuarto a pensar en cómo podría lograrlo. Primero se le ocurrió meditar, así que se sentó en su cama con pose de meditación y comenzó a respirar profundo.

<<Si esto funciona, me transformaré en un alfa... ¿pero cómo volveré a ser beta entonces? ¿Tendré que hacer lo mismo o tendré que buscar otro modo? Tal vez sea lo mismo, ¿no?...>> Pensó. En pocos minutos su cabeza comenzó a formular más preguntas.

—¡Aaah! No puedo concentrarme— exclamó molesto cuando se percató de que su mente estaba en todo menos en su objetivo.

<<Tal vez no es el modo>>

Pasó otra media hora pensando en cómo transformarse hasta que se le ocurrió algo que le pareció un poco tonto, pero no perdería nada en intentar.

Se paró sobre su cama, hizo puños sus manos y respiró profundo antes de hacer poses al estilo de los héroes de Marvel.

—¡Transformación!— gritó y se colocó en una posición al estilo de Black Panther pero su pie resbaló con la sábana y terminó cayendo al piso estrepitosamente.

Su madre, quien acababa de llegar del trabajo, corrió hacia la habitación de su hijo al escuchar un fuerte golpe. Abrió la puerta con prisa y vio a Taehyung tirado en el piso sobándose la espalda.

—¡Osito! ¿estás bien? ¿qué estabas haciendo?— preguntó con angustia.

—E-estaba— pensó rápido en una mentira que sonara creíble y dijo lo primero que se le ocurrió— estaba practicando una coreografía de un grupo que me gusta mucho, pero hice un paso mal y me caí.

—Tae, por favor ten más cuidado, pudiste haberte golpeado la cabeza— respondió con más preocupación que enojo.

—Sí mamá, lo siento— su madre cerró la puerta y Taehyung se quedó tumbado en el piso.

<<Definitivamente necesito intentar otra cosa>>

•••

Taehyung jamás se había sentido tan frustrado, sintió que pasaban años sin lograr nada , a pesar de que sólo pasó una semana. Lo intentaba el tiempo que se quedaba solo al llegar a casa de la escuela, después de hacer su tarea y antes de dormir, incluso llegó a quedarse despierto hasta la madrugada releyendo el libro que la bibliotecaria le regaló para ver si encontraba algo que fuera útil pero fue en vano.

Por la falta de descanso Taehyung se estaba quedando dormido durante la clase de matemáticas; cosa que Jimin, sentado a su lado, pudo notar. Se le ocurrió picarle la mejilla con un lápiz para despertarlo, y lo hizo mientras contenía su risa por lo gracioso que se veía, pero pronto se percató de que Taehyung estaba tan dormido que no se daba cuenta.

—Tae... TaeTae...— susurró picando con el lápiz a cada sílaba— ¡Taehyung!— exclamó levantando la voz más de lo esperado.

—¡Park Jimin guarda silencio o te enviaré a la oficina del director!— gritó la maestra, Jimin solo asintió y bajó la mirada, al menos había logrado despertar a Taehyung.

—Ah... ¿qué estamos haciendo, Jiminie?— le preguntó una vez que se le pasó el sueño, Jimin rodó los ojos y le pasó su libreta con todos los apuntes— Eres el mejor, ¿lo sabías?— susurró con una gran sonrisa, Jimin solo negó con la cabeza mientras sonreía también.

I AM DELTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora