Los alfas solían estar en la cima, pero ahora están en lo más bajo. Son odiados e ignorados.
Los omegas están divididos. Algunos encontraron comodidad sin los alfas y otros quieren que las cosas vuelvan a ser como antes.
Los betas dominan ahora, s...
Como se dijo antes, cuando algo entra en la mente de Kim Taehyung es difícil que ese algo salga, y en ese momento muchas cosas estaban en la mente del delta.
Le había enviado nueva información a Bogum para otro hilo. El primero había sido sobre el asesinato y el hilo nuevo hablaba sobre la falta de profesionalismo y protocolos que hubieron en la investigación del asesinato, inculpando a Choi Seongjin y obteniendo de él una confesión forzada, sacada a punta de golpes y torturas horribles.
Nuevamente el hilo había causado un revuelo increíble.
Cuando no estaba leyendo los comentarios dejados en la cuenta de Vante se ocupaba con su trabajo en la biblioteca o con sus deberes de la universidad. Cuando tenía un poco de tiempo libre lo dedicaba a pasar el tiempo con Seokjin para mejorar sus habilidades, con Jimin o sus amigos de la escuela para distraerse o con Namjoon y Hoseok dentro del gueto para pasar un buen rato y, de paso, hacer feliz a su alfa.
Sentía que cargaba un peso enorme con sus todas actividades, acabando su tiempo y su energía.
Pero podía esa dejar esa carga de lado si se trataba de Jungkook, junto con aquella cita que habían acordado el día de la galería.
—¡Corre hyung!— exclamó Jungkook, tomando rápidamente la mano de Taehyung y corriendo hacia el tren que estaba a punto de partir.
Ambos lograron entrar al vagón cuando las puertas se cerraron justo detrás de ellos, jadearon un poco, se miraron y soltaron una pequeña risa apenada.
—Estuvo cerca— Dijo Taehyung tomando asiento e invitando a Jungkook a sentarse a su lado.
—No hubiéramos llegado tarde si no te hubieras detenido a tomar fotos— le recriminó con una ceja alzada pero con una sonrisa en los labios.
—¡Pero saliste muy bien! Mira— Desbloqueó su celular, mostrándole las fotos que le había tomado cuando ambos iban camino a la estación de tren
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—No recuerdo que hayas tomado esa.
—La tomé cuando ibas llegando, tú... Te veías muy bien— La voz de Taehyung fue haciéndose más pequeña con cada palabra, cosa que enterneció a Jungkook.
—Está bien, si vas a ser mi fotógrafo designado tienes que capturar siempre mi ángulo bueno— bromeó el menor para aligerar el ambiente.
—Todos tus ángulos son ángulos buenos, chico beanie— contestó el mayor siguiendo la broma, sin percatarse del efecto que esas palabras tuvieron en Jungkook.
—¿Chico beanie?— preguntó, tratando de ignorar las palabras anteriores de Taehyung.
—Sí, en las dos citas que hemos tenido te has puesto un beanie.
—Me gusta, aunque prefiero el otro apodo.
—¿Cuál?— preguntó arqueando una ceja y esbozando una pequeña sonrisa traviesa— ¿Jungkookie?
