MASQUERADE

Capítulo 11

12 de Agosto. Aún sin noticias de Harry.

La Orden del Fénix a pleno le buscaba hasta por el Callejón Oscuro y el Londres muggle, pero no había un solo rastro ni de él o su familia; incluso algunos miembros, haciéndose pasar por policías, habían interrogado a los vecinos de Privet Drive por si sabían algo, pero ellos, no sin cierta desconfianza, sólo respondieron que los habían visto salir en su auto para ir a recoger a su hijo del colegio cuando el año escolar terminó, pero ninguno estaba seguro de haberlos visto volver.

Al menos podían estar tranquilos sabiendo que Voldemort no los tenía; Snape les había informado que los mortífagos, y el propio Lord, habían ido ese mismo día que ellos iban a retirarlos de la casa, llevándose la misma sorpresa al no encontrar a nadie, y ahora estaba furioso.

-Él cree que es todo una estrategia para despistar -informó -Pero que tienen a Potter escondido en algún lugar.

Dumbledore asintió con la cabeza mirando fijamente al hombre antes de despedirlos para que continuaran con la búsqueda.

-Quédate un momento más, por favor Severus -pidió con voz tranquila. Cuando todos se hubieron marchado, se volvió a él -Veo que a Voldemort no le sentó nada bien el no poder hacerse con Harry como lo pretendía -dijo señalando las manos de Snape que temblaban ligeramente, señal de haber estado bajo la maldición Cruciatus por un largo tiempo.

-Ya le dije que él cree que ustedes lo tienen -indicó metiendo sus manos en los bolsillos para que dejaran de temblar, lo cual era imposible, ya cuando llegara a su casa tomaría la poción que necesitaba -Por eso no confía en mí como antes, piensa que le estoy escondiendo alguna información.

-De eso mismo quería hablarte, Severus -explicó sentándose en una silla de la cocina e invitándole a imitarle. Se lo veía cansado, como si el peso de todos los años que en verdad tenía se le hubieran caído sobre los hombros de repente desde la desaparición de Harry -Hay una manera para que él vuelva a confiar en ti. Debes asesinarme -sentenció sin dar muchas vueltas como era su costumbre al hablar.

-¿Quiere que lo haga ahora mismo? -Preguntó con ironía - ¿O necesita que le dé unos minutos?

-No, todavía no -repuso con una sonrisa -Pero la ocasión se presentará por sí sola. No me queda mucho tiempo, tú lo sabes igual que yo -añadió señalando su mano marchita por culpa de la maldición del anillo, y su cuerpo en general que había quedado bastante débil después de haber consumido el veneno en la cueva.

-Si hiciera eso, ¿cree que él estaría feliz de perder un espía en Hogwarts? -Inquirió -Porque ya no podría seguir "espiando" para él si hiciera eso.

-Cuando llegue el momento ya no necesitará un espía en Hogwarts -señaló Dumbledore con simpleza -Tú mismo dijiste que está planeando hacerse con el control del colegio. Y confió en ti para que protejas a los alumnos, por eso te lo estoy pidiendo -Severus tragó saliva al escucharle decir que confiaba en él, pero fuera de eso no dio ninguna otra muestra de cuanto alivio le había causado -Intentaré pelear hasta donde mis fuerzas me alcancen, -siguió diciendo Albus -pero te confieso que prefiero un final rápido y sin dolor a una agonía prolongada.

Hablaba con ligereza, pero traspasaba con la mirada a Severus como si fuera capaz de ver su alma y decirle que a pesar de que lo consideraran tan poderoso e invencible, en ese momento sólo era un hombre común que le tenía miedo al dolor. Comprendiendo ese hecho, Snape asintió con un movimiento de cabeza.

>Gracias, Severus -dijo más tranquilo.

-No tan rápido -le cortó levantando una mano cuando el hombre mayor se puso de pie -Quiero algo a cambio.