Nuestro Lado Oculto

No cita

Después de que Jessica se dejara de juegos y les explicara a sus hijos la razón real por la que han ido al hospital, no fue mejor para estos, ahora están molestos e indignados, primero porque los asustó y en segundo lugar por el motivo por el que está allí, es algo que se les hace humillante.

Se hallan en una sala de hospital únicamente los tres a la espera de ser llamados para pasar.

Nayeon teclea a gran velocidad en su celular, Jaehyun trae cara de perturbado porque tiene menos información por no poner atención en clases, así que no tiene idea de que le espera.

—Como sea mamá tiene que ver los mensajes en algún momento. —Finaliza de escribir Nayeon— Y cuando lo haga vas a estar en problemas Jessica.

—Solo estuve con una chica y Nayeon con el idiota, esto es exagerado madre. —Dice Jaehyun.

—El idiota estuvo con varias, la chica con la que estuviste seguro que no tienes idea con cuantos más ha estado y también existe otro tipo de peligro de contagio.

—¿Cómo cuál? —Pregunta Nayeon.

—En cuanto sea su turno de pasar, le hacen las preguntas al médico.

Jessica los ha llevado al hospital porque ha arreglado todo para que les hagan exámenes en busca de ETS, por su puesto que no sería tan tonta como para quedarse sin la posibilidad de ser abuela, además de que en serio no puede decidir sobre esterilización de otros.

—Jung Nayeon. —Una señorita la nombra.

—¿Primero yo? —Hace expresión de miedo.

—¿Quieres que pase contigo? —Se ofrece Jessica.

—No, mala madre.

—Yo si quiero que pases conmigo. —Pide Jaehyun solo que es ignorado.

—¿Estas segura que quieres ir sola? —Lo que más le preocupa de dejarla ir sola es que Tiffany le haga escándalo cuando se entere.

—Ni siquiera quiero estar aquí pero no tengo opción. —Se levanta de la silla y Jessica hace lo mismo— No entres conmigo, no soy una niña y no quiero tu presencia.

—Probablemente hagan que te desnudes. —Lo único que le saca es la mirada Jung y la ve perderse con la señorita.

—¿Para que nos van a desnudar? —Cuestiona Jaehyun temeroso.

—¿Tiffany no hablo contigo de estas cosas? —Le sorprende ya que conoce a su esposa y está segura que habló con los tres al respecto.

—La ignore porque era incómodo y yo lo sé todo. —Obtiene la mirada helada.

Nayeon que ha pasado a un consultorio, recorre su vista en el lugar solo para evitar la mirada de la doctora que la va a atender.

—No tienes de qué asustarte, sentirte intimidada o avergonzada, no voy a juzgarte y tu madre pagó mucho dinero por mi amnesia.

—¿Amnesia? —Le pone la vista encima.

—Cuando salgas de aquí yo no recordaré que te conocí, menos que viniste a consulta y a hacerte exámenes.

—¿Y las pruebas quien me las va a dar? —La descubre como una mujer de unos treinta años.

—Los resultados los entregan en otra área, si hay algún problema te remitirán al especialista en el problema que sea que tengas, que esperemos todo este bien. —La mujer es amable y bien intencionada.

—Siempre use preservativo sin excepción. —Vuelve a desviar su mirada.

—¿Hasta para el sexo oral?