Capítulo 52 : Sorpresa

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Después de ignorar las palabras de Fernando sube a su cuarto, se ducha poniéndose decente, al salir encuentra a Matamoros esperándola en la cama.

Para su mala suerte, vestido, pero era algo que se podía resolver, bueno eso pensaba, el estaba allí por algo distinto a lo que Altagracia tenía en mente.




- Que guapo -sonríe- Por que tan serio

- Quiero llevarte a un lugar en la noche, bueno varios -se levanta- Sólo nosotros dos

- Cómo una cita? -va a el dejando caer la toalla

- Si -sonríe tomandola de la cintura- Una linda cita, necesitamos un tiempo juntos

- Y nuestro tiempo en la mañana? -roza sus labios con los de el- Será que podemos retomarlo

- Uhm -baja las manos hasta sus nalgas- No sería una mala idea -la pega a el

- Entonces que esperamos -lo ve

- Nada -acaricia su feminidad




Se abre pasó entre sus piernas estimulandola en lo que repartía besos por sobre su piel, la acuesta introduciendo los dedos aprovechando la humedad mientras sus labios reclaman los de ella.

Son interrumpidos otra vez pero ahora por el teléfono de Matamoros, los guardias necesitaban de su ayuda, entre quejas, besos y jalones logra separarse de ella.

- No es justo -se sienta- Es mi cumpleaños

- Lo sé pero debo evitar que se vuelvan a meter -ríe y la besa- Nos vemos más tarde

- Uhm ya que -suspira

- Te lo recompenzare -sonríe y se va

- Eso espero -va a ducharse de nuevo




Durante la tarde se entretiene con Ricardo y Cristian, ambos se van y ella va a prepararse para la cita, tenía el closet revuelto, ropa en la cama, maquillaje regado.

La plancha y el risador sobre el peinador, pero al menos ya estaba lista, bueno aún seguía cambiando de ropa pero sólo era un detalle.

Matamoros ya la estaba esperando abajo, al verla en los últimos escalones sonríe y va hasta ella tomandole de la mano

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Matamoros ya la estaba esperando abajo, al verla en los últimos escalones sonríe y va hasta ella tomandole de la mano.

Dejan a Zoé al cuidado de Nico y Paula, si ya se, parecía una locura, pero Nico cuidaba muy bien de su hermana, ahora Paula se la pasaba con el, ni modo que la mandaran a volar.

Una vez en el coche charlan tranquilos, Altagracia trataba de sacarle el lugar dónde irían a cenar pero nada, el era una tumba verdaderamente.

Resignada se dedica a tararear las canciones de la radio, llegan a un restaurante muy lindo de los que le gustan a Altagracia.

Le abre la puerta ofreciéndole su brazo, entran siendo llevados a su mesa.




- Muy bonito oye -sonríe viendo el lugar- Dónde me llevarás después -revisa el menú

- Paciencia -ríe- Disfrutemos de un buen vino primero, cuándo terminemos aquí te llevo al segundo lugar

- Y que vino tomaremos -le da la carta

- Ahora lo resolvemos -la empieza a hojear



Luego de escoger la comida y el vino conversan de la vida, de cómo Zoé iba creciendo, volviéndose más despierta y activa con el pasar de los días.

La cena transcurrió en un perfecto clima de calma y amor, al terminar con la comida la banda comenzó a tocar, había un pequeño sector dónde ellos se encontraban.

Una pista con ahora unas cuantas parejas, no era una mala idea ir también.




- Te gustaría bailar un rato? -acaricia sus dedos

- Si, si es contigo -sonríe tomandolo de la mano

- Que esperamos entonces -se levanta llevándola a la pista- Nomas no me vayas a pisar -bromea

- Por quien me tomas -coloca la mano sobre su hombro

- Te la estás pasando bien hasta ahora? -sonríe tomandola de la cintura

- Si -se acomoda en su pecho- Nunca había tenido un cumpleaños así

- Es que soy original -besa su cabeza

- Gracias -susurra

- Por que? -la mira

- Por todo, gracias por no dejarme sola nunca -sonríe dejando caer una lágrima

- No llores -se la limpia- Lo último que quiero es hacerte llorar en tu cumpleaños

- Ya me intoxicaron llorar no es nada -ríe

- Me gusta más cuándo sonríes -acaricia su mejilla- Se te ilumina el rostro por completo

- Hace mucho tiempo no me sentía tan feliz -lo abraza- Gracias por todos estos días maravillosos

- Son maravillosos en verdad -sonríe- Espero tengamos muchos más días así

- Todavía no me vas a decir a dónde me vas a llevar? -sonríe

- Ya te quieres ir? -ríe

- Me lastiman los zapatos -confiesa

- Pues vámonos -la suelta- Tampoco podemos llegar muy tarde -toma su mano

- Nuestra bendición debe estar siendo torturada por Paula -niega







Llevo días tratando de terminar esté capítulo :v

Y si todo fuera diferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora