Hoy es el cumpleaños de una compañera.Estoy muy emocionado, no recuerdo ir a ninguna fiesta, mamá y papá están emocionados igual, papá se arreglo mucho para irme a dejar tras ir a comprar el regalo, mamá me ayudó a envolverlo, se les veía realmente felices. Yo estoy feliz.
No sé su nombre, eso me hace sentir mal pero estoy muy agradecido por ser invitado así que espero conocerla bien después y que en sus próximos cumpleaños ponerle una tarjeta con su nombre.
No sé su nombre... ¿El de nadie? No importa por que me ha invitadoNo sabia tampoco que vivía a tan solo unas calles de la mía.
Mis padres querían ir conmigo y quedarse a celebrar pero si lo hacían notarian que no la conozco, no del todo. Se que se peina siempre de coletas y que... Es amable.Me costó mucho convencerlos de que era mejor ir yo solo, papá me dijo que el regalo era muy grande, que soy pequeño para llevarlo hasta allá.
Dije que era a las cuatro y que me vería en el camino con unos compañeros.
Se pusieron el doble de felices. Y se apresuraron para vestirme, me dejaron salir tras ver a más niños con regalos, algunos con sus padres y otros solos, cuando vieron que iban a la misma dirección se sintieron seguros, se quedaron mirando que fuera en orden y se que lo hicieron hasta que estaba seguro aún doblando la calle, pero esta bien por que así me ven, están tranquilos y no se darán cuenta de mi mentira.Pero... Si.
Escribo esto mientras mis padres duermen.
Llegue a casa apenas dos horas después de salir.No había fiesta, ¿gracioso verdad?
Bueno, si había fiesta. Cuando llegue después de cruzar la calle rodeado de niños con regalos y algunos padres, entre a la casa.Estaba asustado, ningún niño me hablo y yo... Creo que pasaron minutos.
Entonces la vi, ella tenía un vestido enorme azul, apenas podía correr, iba con más niñas y niños, di un paso y ella se detuvo. Debí verme penoso por que no dijo nada y de repente todos me miraron.
Hizo una cara fea.
Y dijo muy despacito, tan despacito que apenas pude escucharlo
“¿Que hace esta aquí?”
Dijo esta como si fuera una niña.Las otras niñas la miraron, dijeron cosas como que no sabían, que no me dieron invitación, que seguro me perdi.
No reconocí a ninguna de antes.Ella se acercó y dijo que no me invitó.
Le conté que en mi banca estaba la invitación.Se quejo.
La invitación no era para mi.
Era para la niña que dijo que los niños eran tontos. Niña que no estaba por que yo tome su invitación.
Pedí una disculpa.
Trate de decir algo, apenas pude inclinarme.
Deje el regalo en el suelo frente a ella y le deseé feliz cumpleaños, ella me siguió con la mirada hasta que salí.
Entonces camine, nadie me vio, no, nadie lo hizo, me vieron entrar y salir. No.
Nadie me vio.Creo que soy invisible, como ese cuento que mi mamá me contó,.
El de papá invisible.Soy invisible.
Soy invisible.
Soy invisible.
Soy...
Soy, soy, soy, soy invisible
Lo siento.
Lo siento niña, tome tu invitación.
No quería llegar de inmediato a casa por que me preguntarian.
En ese momento quería jugar con niños como yo y comer pastel.
Si.
Por primera vez quería pastel y no podía tenerlo.
Quería jugar.
Quería estar en esa fiesta.En lugar de eso me quede sentado en una calle desde donde veía mi casa.
Mamá y papá estaban felices.
Y fallé.Soy invisible.
Era lo único que podia pensar, en ser invisible y esa fiesta.
Me di cuenta entonces de algo.
Esa niña, se peinaba de coletas y era la única con el cabello de mi color.
¿Amarillo?
Aunque el mio es muy corto y el suyo muy largo.Entonces pasaron.
Mis vecinos.El vecino del perro de los lunes sin el perro y su esposa.
Me preguntaron algunas cosas pero no escuche y no contesté.
Ambos se sentaron a mi lado.La señora llevaba una canasta con galletas y me dio unas cuantas.
Dijo; Deja de llorar por ello, come un poco. Mira que no vale la pena, tendrás más fiestas y amigos.
No son mis amigos.
El señor era serio, no sonreia como su esposa, apenas me miró, miraba al frente mientras yo tomaba una galleta y la miraba igual.
Yo estaba llorando, pero no se por que.
Lo olvide cuando el señor me hablo.“Sólo tengo dos amigos en todo el mundo, llevo con una más de cuarenta años y con el otro casi veinte, tu tampoco necesitas tantos. Solo necesitas verdaderos.
Ademas...”Su esposa lo interrumpió y completo algo divertida, que esa niña estaba molesta conmigo por que era mucho más lindo que ella y mucho más listo.
Dijo que ella siempre competía por todo con todos y que vio que yo tenía el cabello del mismo color y se molesto.Dije que era tonto.
Ella sonrió; lo sé.Mi cabello es corto, el suyo es largo. ¿Por qué me dijo esta?
Pensó que te molestaria, comentó mi vecino.
Además el problema no es que sea del mismo color, el tuyo es natural.¿Natural?
Le tomo unos minutos explicarme que su padre era rubio, y que siempre estaba fuera. Ella quería ser rubia más que nada en el mundo. Y yo lo era.
No entendí por que me decían eso.
Como sabían tanto de esa niña.
Pero sabían.
Se disculparon por su actitud como si fueran sus padres o algo por el estilo.
Incluso me dijeron su nombre.
Te pedimos que disculpes a... No importa.Entonces me di cuenta.
No era invisible, alguien me vio entrar y salir.
Ellos me vieron, me ven.Y se disculparon.
Aún si no tenía lógica.
Se despidieron.
Fueron amables y me invitaron a comer más galletas algún día.Incluso dijeron que tal vez puedan arreglar un juego con la niña. Algún día.
Pero ya no me importaba, ya no quería saber su nombre ni su vida.
No quería conocerla más.
No era importante.Mis vecinos se fueron directo a su casa.
Vi sus ojos tristes y lo supe.Ellos tampoco habían sido invitados.
Y a ellos les dolía más que a mi.
Y esa canasta de galletas era especialmente para ella.
Para esa niña.Esa niña que como mi vecino tenía unos ojos azules.
Para cuando llegue a casa mis papás aún estaban muy felices., querían que les contará todo, yo...
No tenía nada que contar así que fingi estar muy cansado.Ellos cenaron conmigo pues aseguraban que comí puros dulces.
Cosa buena pues solo unas galletas pude comer.
Y me dieron las buenas noches esperando que les cuente mañana.Tal vez lo haga
Les diré que comí mucho pastel y jugué un montón, que a ella le gustó mucho el regalo y que se llama...
Inventaré un nombre entonces.
Ya lo olvide.Esa fue, mi fiesta, la fiesta en la que fui invisible y después aparecí.
La fiesta donde jugué y no fui invitado.
La fiesta donde comí pastel y galletas.
Donde fui feliz, me divertí, y jugué
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Toda una vida
Fanfiction"Esto, esto como todo, también fue un error... " Historia que relata la vida de Souichi Tatsumi, quien fue, que lo hizo ser lo que ahora es. Su pasado, lo que imagino que fue. Segunda parte: Toda una vida II Personajes de Hinako Takanaga