SU LLEGADA

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Después de acomodarme en mi nueva casa, puse la radio y la sintonicé con mis poderes para ver si podía escuchar las noticias del mundo humano, y para mí sorpresa sí que pude.
Pusieron muchas de mis canciones preferidas y también muchas canciones me Mimzzy.

- Hola a todos, soy Cris vuestro nuevo locutor a partir de ahora. Nuestro querido locutor anterior ha sido encontrado muerto después de más de una semana de estar desaparecido. Le damos nuestras condolencias a su mujer y amigos por la perdida de Alastor.

Quité la radio. No quería seguir escuchando más, estaba muy enfadado.

- ¿Como puede ser que hayan tardado tanto en...? ¡Ugh!

Estaba furioso. Mis nuevos criados intentaron acercarse a mi, pero les mire de una forma muy amenazadora, con mi sonrisa siniestra.

- Ni se os ocurra acercaros.

Desde que había muerto por culpa de los perros tenia la piel muy sensible al tacto.  Ya no me gustaba que me tocaran. Y también había cambiado más, si antes casi no dejaba ver mis emociones, ahora directamente lo único que hacía era sonreír. Nunca estás completamente vestido sin una.

Todos los días ponía la radio en la misma cadena humana, para enterarme de cómo iban las cosas en donde aún seguían viviendo mis amigos. Ya había pasado casi un año humano muerto, lo que equivalía a unos 100 años en el infierno. Mi vida había caído en la monotonía. Todos los días me levantaba, iba a dar un paseo, me tomaba un café amargo, torturaba personas, no se, siempre era lo mismo. Una tarde oyendo la música de la radio escuche una noticia que prácticamente me hizo salir corriendo al salón para oírla mejor.

- ¡Noticia de última hora! Esta noche han entrado a robar en la lujosa mansión de la cantante Mimzzy, han robado muchas cosas pero sobre todo han robado la vida de 3 personas. Ella y sus dos amigos que vivían con ella desde la muerte de Alastor, Nifty y Husk.

¿¡Queee?! No me lo podía creer, Mimzzy y mis amigos estaban en el infierno, tan pronto. No quería que ellos llegarán así.
Rápidamente me teletransporté al lugar donde había aparecido nada más llegar al infierno, al parecer en ese sitio aparecen todos.  Llegué al instante y allí estaban. Los tres. Mis amigos por fin estaba ahí.

-¿Mimzzy?¿Nifty?¿Husk?
- ¿eh?- respondieron a la vez.
- ¿Quien eres y dónde estamos?- dijo Mimzzy.
- No me puedo creer querida que me hayas olvidado.
-¿Alastor?

Mimzzy se levantó corriendo y me abrazó, y Nifty hizo lo mismo. Husk solo me miró con una cara de felicidad.

Las aparté un poco, seguía sin gustarme que me tocaran pero por ser ellas haría una pequeña excepción.

- ¡Cielo cuanto has cambiado! - me dijo Mimzzy.
- y vosotros, madre mia.

Mimzzy no había cambiado mucho, ahora tenía los globos oculares totalmente negros, y el iris rosa fucsia. Vestía un elegante vestido negro con una pluma negra en la cabeza. Como cuando iba a cantar. Nifty y Husk  en cambio si. Ella ahora tenía solo un ojo, el pelo le tenía más corto y muy rosa, ahora parecía una niña pequeña. Y Husk parecía un gato, muy alto, con un sombrero negro. Tenía alas.

- Realmente habéis cambiado mucho. Venid, os enseño la ciudad.

Fuimos andando hacia ella, y mientras andábamos, todos los demonios que nos veían salían huyendo.

-Oye Al creo que hay algo mal aquí - me dijo Nifty - todos huyen de nosotros, ¿Es algo normal con los nuevos?
- No cielo, todos huyen de mi.

Llegamos a mi casa y le invité a un café.

- Venga, cuéntenme, ¿Como acabasteis aquí?
- Bueno- empezó hablando Mimzzy- lo cierto es que estábamos quedando las últimas cosas de nuestros planes y eso, porque nos queríamos retirar, y cuando justo estábamos quemando las últimas cosas, entraron unos hombres a robar. Todo fue muy rápido, nos dispararon a los tres a la vez. Y bueno pues acabamos aquí. Linda historia, ¿No crees?
- Lo cierto es que os esperaba más tarde. He descubierto que un año humanos son 100 aquí.
- Vaya, pues si que has estado mucho tiempo aquí.
- Pues si, aburrido.
- Oye Al, ¿Como moristes?- me preguntó Nifty.
- Bueno no creo que sea muy agradable de contar.
- Anda Hijo de puta, ya nos has hecho sufrir mucho suéltalo ya- dijo Husk con su clásico sarcasmo.
- está bien- les sonreí con mis sonrisas siniestras.- bueno, la verdad es que no creo que lo vaya a olvidar nunca, hay veces que tengo pesadillas con ello. Vimos sabéis todos los días me torturaban y no era solo porque querían saber porqué estábamos allí. El jefe de esa mafia se llama James, el me estuvo torturando. Luego al dejaros marchar me siguió pegando hasta que me desmayé. Desperté en el bosque y hacía frío, me dijo que ya se había aburrido de mi y que me fuera, y yo pues me fuí corriendo, pero claro, no iba a ser tan fácil. Ese cabrón soltó perros de caza y ellos se encargaron de acabar conmigo.
- ¡Por dios que horrible!- Nifty estaba alterada - cuando ese cabrón venga al infierno seré yo personalmente quien lo vuelva a matar.
- Tranquila Nifty, no te quedes tú sola con la diversión.

Nos empezamos a reir todos, realmente los había echado de menos.
Al día siguiente les acompañé a buscar una vivienda para cada uno. Mimzzy había decidido vivir en una casa de color rosa muy cercana a la mía y Husk en una gris a un par de manzanas. Los gastos de sus casas iban a mi cuenta, pero me daba igual. Nifty se quedó a vivir conmigo. Esa pequeña diablillos no duraría mucho tiempo sola. Luego después de que se instalarán, les hice un tour por la ciudad del pentagrama, fuimos a una cafetería, a algunas tiendas a por más ropa y les di algo de dinero a cada uno.
Luego fuimos a un bar.

- Chicos ha sido maravilloso estar con vosotros pero me tengo que ir. Llamarme cuando queráis. Os recomiendo no ir por la zona oeste de la ciudad. Aunque no creo que os hagan daño porque os han visto conmigo.
- ¿A que te refieres con eso?
- veras mi querida Mimzzy, me he ganado una pequeña reputación aquí en el pentagrama como locutor de radio.
- Eso está muy bien ¿Pero cuál es el problema?
- verás es que ahora soy uno de los demonios más poderosos del infierno, después de los Magne.
- ¿Quienes son los Magne?
- Los reyes, Lucifer y su mujer Lilith y su hija.
- Y entonces...
- pues que me la he ganado haciendo lo que mejor se me da. Matar. Maté a todos los peces gordos del infierno, a los más peligrosos y poderosos y los torturé emitiendo sus gritos por la radio. Pero esa era la única manera para poder veros.
- ¿Vernos?
- Si, solo tenía que ser poderoso para poder abrir un portal hacia el mundo humano y así veros. Lo he hecho un par de veces.
- Vaya eso es muy bonito por tu parte.
- Bueno, yo ya me voy, que paséis una buena noche, ¿os acompaño a casa?
- No gracias- dijo Husk- me quedaré en el bar.
- Oye amigo, no puedo estar todo el rato manteniéndote.
- Y no lo vas ha hacer. He visto un cartel, se busca aquí a alguien para eso de las apuestas. Sabes que eso es lo mio.
- está bien, ¿y tu querida?
- Si por favor.

Llevé a Mimzzy a su casa y teletransporté a Nifty a la mia. Tenía que hablar con Mimzzy primero.

- Veo qué ya no necesitas mi ayuda.
- Cielo he comido he pasado el mejor año de mi vida. Y te lo digo muy en serio, pero se que la muerte separa caminos, y nosotros no íbamos a ser de menos.
- Fué bonito mientras duró. Jeje.
- Sabes, te puedo organizar algunos conciertos por aquí. Qué no hayamos estado enamorados, no significa que no seas mi amiga y que te ayude en todo lo que pueda sabes.
- Gracias Al, eres el mejor.- Mimzzy me dió un beso en la mejilla divertida- hasta mañana. Ven a por mí a eso de las 9:30 y nos tomamos unos cafés, uno amargo para ti y uno dulce con leche para mí, ya sabes, como en los viejos tiempos.
- Por mi perfecto. Y así ya organizamos algunos de tus espectáculos.
- Hasta mañana.
- Hasta mañana querida.

Quiero venganza. Charlastor. Hazbin HotelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora