I'm Deaf // Lee Minho

.12.

Luego de salir de la librería, Minho me guío hasta un arcade que el conocía, y luego iríamos a cenar en donde yo quisiera, ya que el eligió el arcade.
Al entrar, me sorprendí al sentirme tan cómoda, el lugar me hizo sentir que estaba en mi hogar, pues el arcade, tenía la temática de Japón.

Senti como mis ojos brillaron al ver un lugar así, se sentía realmente bien poder leer aquellos carteles con letras de mi país, como si estuviera alli, tenían subtítulos en coreano por supuesto, pero aún así era genial.

Mire Minho con la mejor sonrisa en mi rostro y él se sonrojó un poco.

Creí que te gustaría

Escribió en su libreta.

Me encanta <3

Le devolví sus cosas y miré otra vez las máquinas de peluches. Pero una me llamo más la atención que las demás, pues dentro de ella, había un panda muy bonito. Tomé la muñeca de mi acompañante y comencé a correr hacia esa máquina, estaba muy emocionada.
De hecho estaba tan feliz de estar allí que la tristeza ya había desaparecido por completo.

- ¡Mira ese! ¡Es muy lindo! Ojalá pueda ganarlo. - Dije sin pensar, hasta que caí en la realidad.

Que idiota.

Mire con culpa a Minho, pero él solo me sonrió y negó con la cabeza, hice una reverencia para disculparme, pero me tomó de los hombros enseguida para que me enderezara, volvió a negar mientras sonreía y me tocó rápidamente le punta de la nariz con su dedo índice, luego se alejó un poco y miro el panda que había visto antes.
Lo señaló y me miro, como si me estuviera preguntando si ese es el que quería. Asentí y el me hizo una seña de que esperara.
De su bolsillo sacó una moneda y la colocó en la máquina.

Comenzó a mover la garra metálica con mucha facilidad, lo cual me sorprendió muchísimo. Dirigí mi vista hacia el y me transmitió tranquilidad, ademas de que era un chico muy guapo, parecía ser alguien muy agradable, pero notaba algo extraño, pero no pude descifrar que era.
Saque mi celular a escondidas y le tome una fotografía. El sonreía pero tenía mucha concentración.
Volví a ver la máquina y pude ver que en la garra estaba el oso panda que tanto me había gustado, luego lo ví caer en la caja.

Cuando me lo entregó, sonreí emocionada y abrace el peluche, hacía mucho tiempo que no me regalaban algo así. Dirigí mi mirada a sus ojos y luego le agradece con una reverencia.
Tomé su libreta, la cual había dejado a un costado para poder jugar, y escribí.

Muchas gracias! Eres genial, yo no lo hubiera logrado <3

C

uando lo leyó, su cara se transformó en un gesto de ternura y luego volvió a tocar mi nariz con su dedo índice, indicándome que era muy dulce.

Un panda.
Un conejo.
Un peluche de kaneki.
Una pequeña bolsa con varios dulces.
Y un globo.

Eso llevaba en mis manos, y por supuesto, todo lo había conseguido mi a aconpañante. El llevaba un llavero de Dragon Ball Z y una soda. Me sentía algo apenada por no poder ganar nada en los juegos, pero realmente se me daba mal.

Muy mal.

Íbamos a salir del lugar, estaba realmente agradecida de que Minho me haya hecho olvidar el mal momento de hace unas horas. Pero cuando íbamos a salir, un chico rubio llegaba al lugar con una chica a su lado.

Si.

Eran Chan.

Él no me había visto, asi que aproveche para tomar a Minho de lo hombros y lo coloque frente a mi, cubriéndome. No quería que Chan me viera, no quería hablar con el.
Cuando entraron, y los perdí de vista, apoye mi frente en el pecho de mi amigo, aliviada por no tener que ver la cara del rubio.

Y reaccioné.

Me aparte de Minho, quién estaba notablemente sonrojado y con los labios entreabiertos.

- L-lo siento. - Dije y pareció comprender, solo asintió sin dejar de tener esa expresión de sorpresa.
Tomé nuevamente su cuaderno y escribí lo ocurrido.

¿Ese no es el chico del otro día?

Solo me limité a asentir y a mirar mis pies.
Sentí como daba un par de palmadas es me cabeza, así que lo mire y me encontré con su sonrisa apenada. Con su cabeza, me hizo una señal para que salgamos y lo seguí.

Esta vez, yo lo guíe. Lo lleve a una restaurante de comida china y pareció gustarle la idea ya que al ver la entrada, hizo un "wow" inaudible con sus labios, algo que hizo que me sienta bien.

Al sentarnos en la mesa que nos habían indicado anteriormente, nos dispusimos a leer el menú, y vaya que se me antojaba todo. Pero opte por unos fideos de arroz y sopa, mientras que Minho me indico en el menú un plato más sofisticado.

Pasamos el rato hablando a través de la libreta, a veces tardabamos un poco porque lo que queríamos decir era extenso, pero valía la pena esperar. Algunas personas nos miraban extrañados por nuestra manera de comunicarnos, y note como mi acompañante se ponía tenso ante eso, pero trataba de no demostrarlo.

Él se encontraba leyendo mi anécdota de cuando comencé la universidad y cómo conocí a Félix, parecía muy entretenido, hasta que llegó a la parte graciosa de la historia.

Y podía jurar que su risa fue el sonido más melodioso que había escuchado.

Me quedé atónita.

Había escuchado una pequeña parte de su voz y me sentía muy satisfecha.

Cuando el iba a comenzar a escribir, tomé rápidamente el cuaderno de sus manos y escribí nuevamente. Sus ojos tenían confusión por mi repentino cambio, pero no pude evitarlo.

Por favor, déjame por tu risa más seguido :3

Al leerlo, se quedó petrificado. Se quedó mirando la nota por varios minutos y luego me miró. Le sonreí y asentí en modo de aprobación para que se sintiera cómodo. Mordió sus labios avergonzado y miró su plato de comida, luego asintió y volvió a mirarme.

Lee Minho eres una obra de arte.